Macri fracasa en su intento de expulsar del Congreso a Julio De Vido, un kirchnerista acusado de corrupci¨®n

La campa?a electoral argentina se traslad¨® este mi¨¦rcoles al Parlamento. Tras una sesi¨®n que dur¨® casi nueve horas, el Gobierno de Mauricio Macri fracas¨® en su intento de expulsar de su banca de diputado al exministro kirchnerista Julio de Vido, procesado en cuatro causas judiciales. Pero el macrismo transform¨® esa derrota en un pulso pol¨ªtico contra sus rivales, con la corrupci¨®n convertida en arma electoral de cara a las legislativas del 22 de octubre. "El caso De Vido va a exponer con toda claridad qui¨¦nes quieren que la impunidad contin¨²e (...) Hoy se define qui¨¦nes estamos de un lado y qui¨¦nes est¨¢n del otro, se lo digo a todos los argentinos: miren qu¨¦ van a votar sus diputados", dijo Mauricio Macri.

El macrismo necesitaba el respaldo de 158 diputados, equivalentes a los dos tercios de la C¨¢mara Baja, para expulsar a De Vido por "inhabilidad moral". No lo consigui¨®. El proyecto oficial obtuvo 138 votos, 20 menos que el corte, y De Vido sum¨® a su causa el apoyo de 95 legisladores. Antes de la votaci¨®n, el exministro, uno de los hombres m¨¢s poderosos de la gesti¨®n kirchnerista, se declar¨® v¨ªctima de una persecuci¨®n: "Soy el blanco de un plan sistem¨¢tico de m¨¢rketing ideado por el asesor extranjero del presidente (Jaime Dur¨¢n Barba)". "Nunca me ampar¨¦ en fuero parlamentario alguno. Me he presentado ante cada referimiento de la justicia", dijo, en medio de silbidos de diputados oficialistas.

Conocida la derrota parlamentaria, el jefe de Ministros, Marcos Pe?a, un hombre que habla en nombre del presidente Macri, dijo que fue "un paso adelante" que se pudiese discutir en el Congreso la expulsi¨®n de un diputado acusado de corrupci¨®n. Y al mismo tiempo mand¨® un mensaje a sus electores: "Ahora el poder est¨¢ en manos de los votantes".

De Vido, un hombre poderoso

De Vido fue el ¨²nico ministro que permaneci¨® en su cargo desde el primer d¨ªa de la presidencia de N¨¦stor Kirchner, el 25 de mayo de 2003, hasta el ¨²ltimo de Cristina Fern¨¢ndez, el 10 de diciembre de 2015. En esos 12 a?os estuvo al frente de la cartera de Planificaci¨®n, Inversi¨®n P¨²blica y Servicios, desde la que se deciden todas las inversiones del Estado en infraestructura. El macrismo sabe que cualquier golpe que reciba perjudica tambi¨¦n a Fern¨¢ndez de Kirchner, candidata a senadora en octubre. Pero hasta ahora no ha podido con ¨¦l. Tres semanas antes se cerr¨® tambi¨¦n la v¨ªa judicial, cuando un juez se opuso a pedir la quita de los fueros legislativos que protegen al diputado kirchnerista, tal y como hab¨ªa solicitado un fiscal.

"Acuso a De Vido infame y traidor a la patria", atac¨® Elisa Carri¨®, uno de los arietes de la coalici¨®n Cambiemos en la lucha anticorrupci¨®n y cabeza de lista a Diputados en Buenos Aires. En l¨ªnea con el discurso presidencial, Carri¨® pidi¨® que se haga p¨²blico el nombre de cada uno de los diputados que "protegen" a De Vido para que "sea la sociedad la que decida, si quiere la verdad o la impunidad". "No tiene sustento constitucional", se opuso poco antes la legisladora kirchnerista Diana Conti. "Es un acto reaccionario y fachista", agreg¨®.

Hay que remontarse 14 a?os para encontrar un antecedente semejante en el Congreso. En 2003, el peronismo ya logr¨® rechazar un intento de expulsi¨®n en el Senado, pero entonces los papeles estaban cambiados. Fern¨¢ndez de Kirchner, en ese momento senadora, fue una de las m¨¢ximas partidarias de la salida de su compa?ero de bancada, Luis Barrionuevo, acusado de alentar los episodios de violencia que concluyeron con la suspensi¨®n de la elecci¨®n provincial en Catamarca, en el norte argentino. La mujer de Barrionuevo, la hoy diputada del Frente Renovador Graciela Cama?o, vot¨® junto a su bloque contra De Vido.

El apoyo m¨¢s inesperado al exministro lleg¨® desde la izquierda. Los diputados del Frente de Izquierda y de Trabajadores (FIT) consideraron que la votaci¨®n fue una maniobra de distracci¨®n del Gobierno para evitar que se hable de la dura situaci¨®n econ¨®mica que atraviesan las capas medias y bajas de la poblaci¨®n. "Se erigen como h¨¦roes de la moral quienes crean f¨¢bricas de pobreza. Ustedes son los que aprobaron el pacto con los fondos buitres, ustedes hablan de los delitos del kirchnerismo, y no de los propios", argument¨® la diputada Soledad Sosa.

Desde que lleg¨® el poder, Macri ha quedado en la mira de la Justicia por varias causas vinculadas a los negocios millonarios de su padre, Franco Macri, uno de los empresarios m¨¢s ricos de Argentina. Algunos de sus amigos cercanos tambi¨¦n, como es el caso del jefe de los servicios de inteligencia, Gustavo Arribas, acusado de haber recibido sobornos por un arrepentido del Lava Jato, la investigaci¨®n contra la constructora Odebrecht en Brasil. Pero estos esc¨¢ndalos empeque?ecen si se comparan con los que acumula el kirchnerismo. Fern¨¢ndez de Kirchner est¨¢ procesada en dos causas por presunta corrupci¨®n, De Vido acumula cuatro procesamientos. El exsecretario de Transporte Ricardo Jaime est¨¢ condenado por administraci¨®n fraudulenta de bienes estatales. Y el exsecretario de Obras P¨²blicas, Jos¨¦ L¨®pez, fue descubierto al intentar ocultar bolsas con nueve millones de d¨®lares en un convento.

La derrota del macrismo volvi¨® a exponer su debilidad parlamentaria. Como contrapartida, logr¨® instalar la corrupci¨®n como tema de campa?a y, sobre todo, oblig¨® a sus opositores a exponerse p¨²blicamente por una figura que, para el n¨²cleo duro del voto a Macri, encarna todos los males del kirchnerismo.