La ¨²ltima batalla de Cristina Kirchner
La expresidenta intenta recuperar el poder perdido en 2015. La primera ronda de la batalla no le ha salido tan bien como esperaba, pero todos admiten que darla por muerta es un error
Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner no est¨¢ loca. Aunque parezca mentira, conviene aclararlo porque muchos de los argentinos que la detestan creen que s¨ª. Los mitos que han circulado sobre ella hicieron crecer esa teor¨ªa. Su particular forma de presentarse ante sus fieles, con una est¨¦tica y un dramatismo que recuerda a Evita Per¨®n, aliment¨® la leyenda.
Incluso algunos destacados miembros del Gobierno argentino creen que ella act¨²a de forma irracional, que no es capaz de dominarse, que est¨¢ loca. Pero no es as¨ª. Est¨¢ herida, eso s¨ª, despu¨¦s de una derrota dur¨ªsima en 2015. Y quiere volver. No lo tiene nada f¨¢cil, porque conserva mucho apoyo pero tambi¨¦n much¨ªsimo rechazo. Nadie es indiferente ante ella en Argentina.
Fern¨¢ndez de Kirchner conserva intacta su ambici¨®n y ahora solo tiene un objetivo: recuperar el poder, frenar a Mauricio Macri, el millonario expresidente de Boca Juniors y exalcalde de Buenos Aires que contra todo pron¨®stico derrot¨® al todopoderoso peronismo.
Para volver, ella ha decidido arriesgarlo todo. Ha creado en dos meses un partido para intentar ganar las elecciones en Buenos Aires, la provincia clave, y de ah¨ª colocarse en el Senado como jefa de la oposici¨®n para volver al poder en 2019. Las cosas han salido peor de lo esperado en la primera ronda, el pasado domingo. Aparentemente gan¨® por la m¨ªnima ¨Cel escrutinio definitivo tardar¨¢ a¨²n dos semanas- pero la mayor¨ªa de los analistas creen que perder¨¢ en las elecciones definitivas el 22 de octubre.
El presidente por el contrario logr¨® un buen resultado en todo el pa¨ªs, mostrando que el macrismo vino para quedarse. Algunos la dan por acabada, pero los mejor informados admiten que eso con ella siempre es un error.
¡°Yo nunca la di por muerta¡±, confiesa Jaime Dur¨¢n Barba, el gur¨² ecuatoriano de Mauricio Macri, el presidente argentino. Es uno de los hombres que m¨¢s ha estudiado a Kirchner, su gran rival. ¡°Siempre dije que pod¨ªa ganar en Buenos Aires. Es una de las pol¨ªticas m¨¢s importantes que ha tenido este pa¨ªs en d¨¦cadas. Cristina es inteligente, valiosa, conoce lo que hace, tiene una experiencia pol¨ªtica enorme.
Ella no hizo su carrera por ser esposa de N¨¦stor¡±, concede. Pero precisamente por eso, Dur¨¢n Barba cree que este resultado, en el que cuando acabe el recuento definitivo se ver¨¢ que con un 35% en Buenos Aires ha ganado por unos miles de votos a Esteban Bullrich, un exministro de Macri poco conocido, es muy poca cosa para alguien como Fern¨¢ndez de Kirchner, que en 2011 tuvo el 54% de apoyo en todo el pa¨ªs. ¡°Es casi una l¨ªder cantonal, solo ha ganado en algunos municipios alrededor de Buenos Aires¡±, bromea. Claro que son precisamente los m¨¢s poblados.
El Gobierno trata de minimizar el resultado de Fern¨¢ndez de Kirchner. Pero lo cierto es que hace un a?o casi todos pensaban que estaba acabada. Ella se refugi¨® en El Calafate, su para¨ªso cerca del glaciar Perito Moreno, mientras arreciaban los esc¨¢ndalos de corrupci¨®n de algunos kirchneristas y los jueces avanzaban en las causas contra ella y su familia.
El empresario m¨¢s cercano a los Kirchner, L¨¢zaro B¨¢ez, est¨¢ en la c¨¢rcel por corrupto. A su secretario de Obras P¨²blicas le pillaron mientras escond¨ªa nueve millones de d¨®lares en un convento. Durante meses ella solo volv¨ªa a Buenos Aires para enfrentarse a causas judiciales.
Muchos pensaban que se retirar¨ªa. Pero la crisis econ¨®mica y el enfado de muchos con Macri hizo que ella apenas bajara en las encuestas. Y entonces, seg¨²n los suyos contra su voluntad, decidi¨® volver. No porque quisiera, sino porque no hab¨ªa nadie con su fuerza electoral capaz de enfrentarse a Macri, explican. Era tan evidente que no ten¨ªa heredero que los alcaldes peronistas del superpoblado y empobrecido conurbano de Buenos Aires, algunos enfrentados con ella, le pidieron que volviera. En estas condiciones, el resultado obtenido es desde su punto de vista un gran ¨¦xito. El problema, explican, fueron las encuestas, que daban que ella iba a arrasar.
Axel Kicillof, exministro de Econom¨ªa con Fern¨¢ndez de Kirchner y ahora diputado, cree que el Gobierno no puede presumir del resultado. ¡°Ha pasado como a Podemos en Espa?a. Hicieron una excelente elecci¨®n, pero estuvieron por debajo de las expectativas creadas por las encuestas. Nuestro resultado es muy bueno. Ganamos la provincia de Buenos Aires, que era el objetivo, y Santa Fe. Entre las dos son el 48% del padr¨®n.
Ellos han logrado un despliegue nacional que no ten¨ªan, es cierto, pero no hay ninguna ola amarilla [el color del partido de Macri]. Hace poco dec¨ªan que el kirchnerismo no ten¨ªa ning¨²n apoyo. Cristina, con todo en contra, ha demostrado su vigencia cosechando tres millones en el distrito de mayor peso del pa¨ªs: Buenos Aires¡±, explica.
Desde el d¨ªa en que regres¨®, el 20 de junio, con un gran acto con 25.000 personas en el estadio Julio Grondona, en pleno conurbano, todo gira en torno a ella. Se analiza su forma de vestir ¨Chubo un cambio radical, de la ropa cara, joyas y tacones pas¨® al vaquero, el poncho con la bandera argentina y los zapatos c¨®modos- sus v¨ªdeos, hasta la decoraci¨®n de su cocina, porque hace muchas apariciones desde all¨ª. Ella ha roto todos los t¨®picos. Se pensaba que no escuchaba a nadie, que era incontrolable. Pero ha sido una candidata disciplinada, ha seguido una estrategia de campa?a en redes dise?ada por el catal¨¢n Antoni Guti¨¦rrez Rub¨ª sin salirse del guion e incluso ha reconocido que en el pasado le falt¨® ¡°humildad¡±.
Ha demostrado una profesionalidad que muchos pensaban perdida. Ahora incluso quiere recuperar la relaci¨®n con los medios, rota durante su Gobierno. Los que la conocen explican su cambio: le ayuda no tener la presi¨®n del poder, dicen, pero sobre todo es una pol¨ªtica dedicada a lo que mejor hace: intentar ganar elecciones. Tal vez sea demasiado tarde, porque el deterioro que sufri¨® su imagen es muy importante. ¡°Desde el 2011, con ese 54%, el retroceso del voto kirchnerista es muy fuerte. Cristina no est¨¢ muerta, tiene mucha identidad, un voto muy fiel.
Pero le cuesta crecer. Hubo un quiebre con una parte de la opini¨®n p¨²blica que no ha resuelto. Perdi¨® mucho voto en la clase media que nunca m¨¢s volvi¨®. El oficialismo lo tiene m¨¢s f¨¢cil¡±, explica Juan Germano, director de la consultora Isonom¨ªa. Quedan dos meses para saber si ella es capaz una vez m¨¢s de darle la vuelta a las previsiones.
Pizzas con camareros frente a morcilla untada
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.