Trump firma el veto a los transg¨¦nero en el Ej¨¦rcito
El presidente deja en manos del Pent¨¢gono la continuidad de los ya enrolados
Lo anunci¨® en julio en su cuenta de Twitter y este viernes lo confirm¨®. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firm¨® el memor¨¢ndum en el que proh¨ªbe al departamento de Defensa el reclutar a personas transg¨¦nero, si bien deja en manos del Pent¨¢gono la continuidad o no de los que ya est¨¢n sirviendo a Estados Unidos. La medida, con efecto a 23 de marzo de 2018, tambi¨¦n implica que el Ej¨¦rcito no costear¨¢ ninguna operaci¨®n de cambio de sexo salvo aquellas imprescindibles -por motivos de salud- para aquellos que ya hayan comenzado un tratado hormonal.
"En mi opini¨®n, la Administraci¨®n anterior fall¨® a la hora de justificar, con base suficiente, que cambiar la pol¨ªtica del Departamento de Defensa no iba a entorpecer la efectividad militar y su capacidad letal, dificultar la cohesi¨®n o gravar los recursos militares", se?ala el presidente en su carta al jefe del Pent¨¢gono, Jim Mattis.
La decisi¨®n es un mazazo para este colectivo, el eslab¨®n m¨¢s d¨¦bil de la comunidad LGTB, que con la Administraci¨®n de Barack Obama vio posible el cambio de sexo cuando ya formaban parte del Ej¨¦rcito y podr¨ªan seguir en ¨¦l reconoci¨¦ndose abiertamente como transg¨¦nero. En junio de 2016 el anterior Gobierno americano adopt¨® esa decisi¨®n y fij¨® para el 1 de julio de 2017 el verdadero gran cambio: las personas transg¨¦nero iban a poder enrolarse.
Ya no ser¨¢ as¨ª. La primera se?al de alarma lleg¨® d¨ªas antes de esa fecha, cuando se empez¨® a rumorear que el Pent¨¢gono aplazar¨ªa la medida un semestre para ganar tiempo de adaptaci¨®n. La demora se confirm¨® aquel esperado d¨ªa y unas semanas despu¨¦s Trump solt¨® la bomba.
"Despu¨¦s de consultar con mis generales y expertos militares, el Gobierno de Estados Unidos no aceptar¨¢ ni permitir¨¢ individuos transg¨¦nero en el Ej¨¦rcito. Nuestros militares deben estar centrados en la victoria y no pueden cargar con los tremendos costes m¨¦dicos y la alteraci¨®n que los transg¨¦neros supondr¨¢n en el Ej¨¦rcito¡±, escribi¨® el 26 de julio en la red social. Estas consideraciones contradec¨ªan el informe independiente en el que se bas¨® el Gobierno de Obama para apostar por la integraci¨®n y que reduc¨ªan a cifras irrisorias el coste de los tratamientos.
Aquellas palabras de Trump, que no hab¨ªa ordenado a¨²n nada en firme al Pent¨¢gono, dejaban en una situaci¨®n incierta a los aproximadamente 13.000 militares transg¨¦nero que ya sirven a Estados Unidos, seg¨²n los datos que maneja? la Asociaci¨®n de M¨¦dicos de Estados Unidos (JAMA, en sus siglas en ingl¨¦s), si bien otras organizaciones reducen la cifra a menos de la mitad. Su futuro, en cualquier caso, queda ahora en mano del jefe del Pent¨¢gono, Jim Mattis, que tiene una plazo de seis meses para elaborar un plan que implemente la directiva de Trump.
En su memor¨¢ndum, Trump dice que "ninguna acci¨®n debe tomarse contra los individuos" transg¨¦nero que ya est¨¢n en el Ej¨¦rcito hasta que el Pent¨¢gono tome una decisi¨®n sobre ellos. Fuentes de la Administraci¨®n citadas por Associated Press se?alaron que Mattis tendr¨¢ en cuenta diferentes factores para tomar su decisi¨®n, como la efectividad del Ej¨¦rcito, las limitaciones presupuestarias o la cohesi¨®n.
La decisi¨®n devuelve a Estados Unidos a la ¨¦poca del Don't ask, don't tell (en espa?ol, "no preguntes, no lo cuentes), aquella en la que los militares homosexuales se enrolaban mintiendo sobre su orientaci¨®n y su presencia era un secreto a voces, pero se les consent¨ªa con tal de que vivieran su condici¨®n encerrados en el armario. Las voces m¨¢s conservadores de la Casa Blanca han ganado esta mano a costa de los derechos del colectivo m¨¢s discriminado dentro d ela comunidad LGTB.
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