Merkel se ve abocada a buscar una in¨¦dita alianza con liberales y verdes
La denominada coalici¨®n Jamaica, que ensayan en un estado, entra?a riesgos a nivel federal
Durante la campa?a, la canciller Angela Merkel, ten¨ªa una certeza que le alegraba la vida. Las encuestas indicaban que su partido (la CDU), junto a su aliado de Baviera (la CSU), ser¨ªan el bloque m¨¢s votado, lo que le aseguraba, casi en forma autom¨¢tica, su reelecci¨®n. Pero desconoc¨ªa el resultado final que caus¨® una especie de terremoto pol¨ªtico en Berl¨ªn. la CDU obtuvo un 33% de votos, con una asignaci¨®n provisional de 246 esca?os. Ante su catastr¨®fico resultado y la debacle de los socialdem¨®cratas, Merkel se ve obligada a negociar una coalici¨®n con dos partidos que se odian entre s¨ª, el Partido Liberal (FPD) y Los Verdes.
Ser¨ªa una alianza in¨¦dita que en Alemania denominan Jamaica por los colores de los partidos ¡ªla CDU (negro), el FDP (amarillo) y el verde para el partido ecologista¡ª, los mismos que los de la bandera de eses pa¨ªs. Los liberales obtuvieron un 10,7% (80 esca?os) y Los Verdes, el 8,9% (67 esca?os).
¡°En la noche del domingo, ella llamar¨¢ a Martin Schulz para ofrecerle formar un nuevo Gobierno de gran coalici¨®n¡±, dec¨ªa un alto funcionario del SPD, a solo seis d¨ªas de los comicios. ¡°Ella ha se?alado que no desea formar un Gobierno con el partido Liberal y Los Verdes y el l¨ªder de los liberales tampoco quiere una alianza tripartita¡±.
Desde que las dos cadenas p¨²blicas de televisi¨®n ofrecieron la primera proyecci¨®n de los resultados, Merkel qued¨® confrontada a un dilema in¨¦dito en la historia pol¨ªtica alemana de postguerra.
Poco despu¨¦s de conocerse los primeros resultados parciales, el jefe del grupo parlamentario socialdem¨®crata (SPD), Thomas Oppermann, admiti¨® la amarga derrota de su partido y anunci¨® con convicci¨®n que, con el 20,5% del voto y 153 esca?os (el peor resultado desde 1949) no ten¨ªa otra opci¨®n que convertirse en la principal fuerza de oposici¨®n en el Parlamento.
¡°Seremos el partido de la oposici¨®n¡±, prometi¨® Martin Schulz, ante las c¨¢maras de la segunda cadena de televisi¨®n p¨²blica (ZDF), ¡°porque est¨¢ totalmente claro que el mandato de los electores ha sido ese¡±. La decisi¨®n de Schulz dej¨® a Merkel confrontada a una delicada negociaci¨®n con dos partidos con los que ya ha formado la coalici¨®n Jamaica en el Estado federado de Schleswig Holstein, pero a nivel federal es toda una novedad que no est¨¢ exenta de peligros.
Los Verdes por ejemplo, tienen muchas afinidades con el partido de Merkel y ya gobiernan juntos en Baden Wuttemberg y en Hessen, pero una hipot¨¦tica participaci¨®n en el Gobierno federal puede hacer fracasar varias promesas de la canciller.
Defensa e inexperiencia
La m¨¢s importante es la relacionada con aumentar el presupuesto de defensa hasta el 2% del PIB en el a?o 2024, una promesa de la canciller destinada a satisfacer al actual presidente de Estados Unidos, Donald Trump. Los Verdes se niegan categ¨®ricamente a aumentar el presupuesto del Ej¨¦rcito y han exigido que, a partir de 2030, solo puedan circular por las carreteras germanas autom¨®viles impulsados por motores el¨¦ctricos o h¨ªbridos. Durante la campa?a, Merkel admiti¨® que le parec¨ªa ¡°una buena idea¡±, enviar al cementerio a los coches di¨¦sel o de gasolina, pero no quiso comprometerse con una fecha.
El partido Liberal, en cambio, tiene un problema diferente. A¨²n no ha logrado olvidar el mal trato que recibi¨® de la canciller cuando formaron una alianza en 2009. La democracia cristiana no ahorr¨® adjetivos negativos contra el famoso partido bisagra. El FDP tambi¨¦n tiene otro problema que es visto con recelo en el entorno de Merkel. La nueva generaci¨®n del partido no tiene experiencia de Gobierno despu¨¦s de vivir cuatro a?os en el exilio extra-parlamentario, al que fue condenado en las elecciones de 2013 cuando solo obtuvo el 4,8 % de los votos.
La inc¨®moda posici¨®n que hered¨® Merkel a causa del resultado de las elecciones, auguran semanas de largas y dif¨ªciles negociaciones para poder aprobar un programa de Gobierno. Los Verdes nunca han ocultado su deseo de formar parte de una nueva alianza pol¨ªtica con el partido de la canciller. Ahora solo falta saber si el Partido Liberal estar¨¢ dispuesto a poner su firme en el futuro programa de gobierno.
Si Angela Merkel no logra un consenso, el pa¨ªs quedar¨¢ confrontado a la convocatoria de nuevas elecciones, una alternativa que solo aumentar¨ªa el descalabro de los dos grandes partidos alemanes, la Democracia cristiana y el partido Socialdem¨®crata.
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