La crisis del ¨²ltimo desaparecido reactiva las demandas ind¨ªgenas en Argentina

En Argentina hay m¨¢s de 200 conflictos ind¨ªgenas por resolver. En su mayor¨ªa son disputas territoriales frente a terratenientes, grandes corporaciones y el Estado. En 2006, el Congreso argentino aprob¨® una ley que preve¨ªa realizar en tres a?os un informe de las m¨¢s de 1.500 comunidades ind¨ªgenas distribuidas por todo el pa¨ªs y dejaba en suspenso todos los desalojos. Once a?os despu¨¦s, se ha censado menos de la mitad y el Senado acaba de aprobar por unanimidad una tercera pr¨®rroga de la ley por otros cuatro a?os, que debe ser aprobada tambi¨¦n por Diputados. El lento recuento de las comunidades ind¨ªgenas refleja el escaso inter¨¦s gubernamental por las reivindicaciones de los pueblos originarios, pero esa indiferencia se trunc¨® hace dos meses. El 1 de agosto, el artesano Santiago Maldonado desapareci¨® durante un operativo de Gendarmer¨ªa contra mapuches que reclaman tierras en la Patagonia a la multinacional italiana Benetton.

Nadie ha vuelto a ver a Maldonado, pero su desaparici¨®n no s¨®lo ha provocado una movilizaci¨®n multitudinaria para saber d¨®nde est¨¢, sino tambi¨¦n ha puesto en la agenda p¨²blica la existencia de numerosos conflictos ind¨ªgenas que esperan una respuesta del Estado. "No tenemos m¨¢s d¨®nde recular. No es una cuesti¨®n de valent¨ªa ni de resistencia, es una cuesti¨®n de justicia. Es injusto que haya un empresario con un mill¨®n de hect¨¢reas y un pueblo mapuche que no tiene d¨®nde vivir", dijo a los medios el l¨ªder mapuche Roberto ?ancucheo durante la manifestaci¨®n del lunes frente al Congreso para exigir la pr¨®rroga de la ley 26.160 de emergencia ind¨ªgena.

Luciano Benetton es propietario de unas 900.000 hect¨¢reas en la Patagonia argentina. Los mapuches reclaman una peque?a parcela de sus tierras cerca de Esquel, en la provincia de Chubut. La Constituci¨®n nacional permite la reclamaci¨®n de tierras a los pueblos originarios, preexistentes al Estado argentino, pero Benetton rechaza el derecho ancestral al que apelan los mapuches y asegura que vinieron de Chile. "Ac¨¢ son tan inmigrantes como mi abuelo", dijo a EL PA?S hace unos meses Ronald McDonald, administrador general de la empresa de Benetton, Compa?¨ªa de Tierras del Sud Argentino. Los mapuches niegan el argumento y recuerdan que sus antepasados fueron perseguidos, humillados y asesinados durante la denominada Conquista del Desierto. "El Estado argentino tiene una deuda de 200 a?os con los pueblos originarios", dice ?ancucheo.

"No hubo un solo gobierno que pondere a las comunidades ind¨ªgenas contra los privados; ni Menem, ni Kirchner, ni Alfons¨ªn, ni De La R¨²a. El ¨²ltimo fue Per¨®n y desde el regreso de la democracia ning¨²n gobierno se lo tom¨® en serio", afirma Mariela Belski, directora ejecutiva de Amnist¨ªa Internacional (AI) en Argentina. "Este Gobierno ha manifestado voluntad pol¨ªtica de hacer el relevamiento, pero que se haya llevado adelante no me consta. Es cierto que durante estos casi dos a?os se dedicaron a ordenar el INAI", agrega en referencia al Instituto de Asuntos Ind¨ªgenas, a cargo del censo.

Intereses econ¨®micos

La poblaci¨®n ind¨ªgena argentina asciende a 955.000 personas, el 2,38% de la poblaci¨®n, seg¨²n el ¨²ltimo censo nacional, de 2010. Est¨¢ repartida por toda Argentina, pero con mayor presencia en el norte y el sur. "En las provincias del norte, los conflictos tienen que ver con intereses de criollos en terrenos que los ind¨ªgenas consideran propio y gobernadores en connivencia con esos privados; en el sur, son intereses m¨¢s pesados, porque est¨¢n involucradas corporaciones internacionales, sobre todo, mineras y petroleras. Ah¨ª, el inter¨¦s es del gobierno nacional y en ese caso el mejor ejemplo es Vaca Muerta", analiza Belski. Vaca Muerta es un inmenso yacimiento de gas y petr¨®leo no convencionales en el sur argentino con el que el Gobierno argentino espera atraer inversiones multimillonarias, pero los mapuches disputan al Estado parte del territorio.

"Los ind¨ªgenas pelean por sus tierras y la ¨²nica manera de visibilizarse es cortando rutas, por lo que reciben represi¨®n, pero no s¨®lo represi¨®n, se les inventa una cantidad de causas que los criminaliza, hasta por violencia sexual o robo. No es solo 'te pego porque estas cortando la ruta' sino que tambi¨¦n 'te censuro y te silencio con la justicia'", denuncia la directora ejecutiva de AI.

Benetton sostiene que detr¨¢s de los mapuches que reclaman tierras hay una organizaci¨®n, Resistencia Ancestral Mapuche (RAM), que usa m¨¦todos muy violentos y le gustar¨ªa que el Gobierno argentino fuese tan duro como el chileno, que les aplica la ley antiterrorista. Eso no forma parte de los planes de Macri, pero tampoco la cesi¨®n masiva de tierras. "Nuestra decisi¨®n es total y absoluta de no permitir que en la Argentina se asiente un grupo que utilice la violencia como forma de acci¨®n y quiera imponer una rep¨²blica aut¨®noma y mapuche en el medio de la Argentina", se?al¨® la secretaria de Seguridad, Patricia Bullrich, el pasado agosto.

Durante el debate en la C¨¢mara Alta el lunes, el senador macrista Luis Naidenoff precis¨® que seg¨²n la INAI hay 1.432 comunidades, pero s¨®lo 459 tienen el relevamiento culminado. Despu¨¦s de a?os de indiferencia, el oficialismo promete culminar la tarea "en dos a?os y medio". Una vez est¨¦ completo el mapa, esperan nuevos desaf¨ªos.

Bayer: "Argentina se averg¨¹enza de sus ra¨ªces ind¨ªgenas"

El escritor, periodista e historiador Osvaldo Bayer ya escribi¨® hace 60 a?os sobre la reivindicaci¨®n de tierras de los mapuches en las cercan¨ªas de Esquel en el diario La Chispa, que acaba de ser reeditado en edici¨®n facsimilar. Bayer sostiene que nada ha cambiado desde entonces y Argentina "niega, desprecia y persigue a los pueblos originarios". "La Argentina siempre se sinti¨® orgullosa de ser europe¨ªzante, de ser hija de europeos -de espa?oles e italianos, sobre todo-, pero tambi¨¦n es grande el origen ind¨ªgena y no se le da ninguna importancia. Argentina se averg¨¹enza de sus ra¨ªces ind¨ªgenas", opina.

La idea de que los mapuches no son argentinos sino chilenos ha tenido cierto eco en las discusiones de estos ¨²ltimos dos meses por las redes sociales. Tambi¨¦n se ha cuestionado a uno de los l¨ªderes mapuches, Fernando Jones Huala, por ser flogger durante su juventud en Buenos Aires, como se conoci¨® a los j¨®venes que ten¨ªan blogs de fotos.