El pen¨²ltimo escondrijo del ISIS

El norteamericano Brett McGurk, enviado especial del presidente Donald Trump para la coalici¨®n anti-ISIS, se llev¨® consigo en su ¨²ltimo encuentro con la prensa, el pasado 21 de diciembre, un mapa de Siria e Irak. En ¨¦l, varios n¨²meros se?alaban puntos calientes de la guerra contra los yihadistas de Abubaker al Bagdadi. Con el n¨²mero cuatro aparec¨ªa destacado Tanf, ¨²ltimo paso fronterizo entre los dos pa¨ªses antes de toparse con Jordania. McGurk reconoci¨® entre otras cosas que Estados Unidos ten¨ªa en la base de ese enclave en medio del desierto sirio una ¡°peque?a presencia militar¡±; que trabajaba con las fuerzas locales y que unos y otros, estadounidenses y rebeldes, hab¨ªan mantenido hac¨ªa solo una semana un fuerte enfrentamiento con yihadistas. "Estamos en Tanf, y estaremos presentes all¨ª para asegurarnos de que el ISIS no vuelva", dijo. EE UU estima que este grupo cuenta con alrededor de un millar de combatientes entre Siria e Irak, cifra que no incluye a los yihadistas en zona controlada por el r¨¦gimen sirio y Rusia.

Acercando cualquier herramienta de mapeo se puede localizar y ver la base de Tanf, donde militares norteamericanos colaboran con el Jaish Maghaweir al Thowra (MaT, Ej¨¦rcito Comando Revolucionario). El pasado 19 de noviembre, seg¨²n informaci¨®n de Washington, el MaT se las vio con un grupo del ISIS. Acabaron con nueve yihadistas. En las fotos distribuidas tanto por estadounidenses como por sirios se ve, primero, un convoy de pick-ups escoltado por un veh¨ªculo militar norteamericano y, segundo, una ristra de fusiles, munici¨®n y granadas incautadas al ISIS.

El objetivo desde ese flanco, reitera el Mando Central estadounidense en sus partes semanales, es asegurar una zona de unos 55 kil¨®metros de radio. Esto es, mantener al ISIS lejos de esa estrat¨¦gica triple frontera (Siria, Irak, Jordania) atravesada por la carretera que une Damasco con Bagdad. Esa zona es una de las m¨¢s ansiadas por los yihadistas desde la proclamaci¨®n del califato en junio de 2014. Ese mismo mes, el grupo terrorista ya se hizo con la localidad iraqu¨ª de Rutba. Si se sigue con el mapa desde Tanf un poco hacia el este y se cruza la frontera en direcci¨®n a Bagdad, el desierto se topa con Rutba precisamente. Hacia all¨ª han viajado en torno a 40.000 huidos de la guerra para alojarse en uno de los campos de desplazados con peor acceso a la ayuda humanitaria.

Rutba, pr¨¢cticamente despejado de yihadistas, es no obstante uno de los habituales objetivos de la campa?a a¨¦rea estadounidense. Sirva de ejemplo, aviones norteamericanos alcanzaron all¨ª entre el 12 y 13 de diciembre dos edificios, una unidad t¨¢ctica y un veh¨ªculo del ISIS. Pero los bombardeos de la coalici¨®n antiyihadista se concentran sobre todo entre Abu Kamal (Siria) y Al Qaim (Irak), localidades que atraviesa el r¨ªo ?ufrates en su paso por la frontera que comparten los dos pa¨ªses. En torno a esas dos localidades hay a¨²n importantes bolsas de yihadistas ya que los r¨ªos son siempre un buen refugio. Como tambi¨¦n las hay siguiendo la frontera sirio-iraqu¨ª hacia el norte, en la orilla oriental del ?ufrates, a su llegada a territorio kurdo. Desde ese flanco son las Fuerzas Democr¨¢ticas Sirias (SDF, en sus siglas en ingl¨¦s), las que, coordinadas por EE UU, atacan al ISIS.

Asediada desde tierra y aire la franja sur y este del Valle del ?ufrates (de Tanf a Abu Kamal y de ah¨ª a Al Shaddadi, el pen¨²ltimo gran escondrijo del ISIS y, previsiblemente, su c¨²pula), queda la zona occidental. Ese frente est¨¢ dominado por las fueras del r¨¦gimen sirio con el apoyo de Rusia. Ah¨ª no se va a meter EE UU, como dijo recientemente su secretario de Defensa, Jim Mattis. Y Mosc¨² parece haber culminado sus aspiraciones en la zona tras la conquista de Deir Ezzor.

El general en jefe ruso Valery Gerasimov, en entrevista el pasado 27 de diciembre, manifest¨® que pese a tener Rusia a¨²n capacidad para atacar las bolsas de yihadistas del ISIS, la prioridad ahora es combatir a Hayat Tahrir al Sham, grupo que incluye a los remanentes de Al Qaeda en Siria. Y estos se encuentran en la otra parte del pa¨ªs, en el oeste, acantonados en la provincia de Idlib.