La Euroc¨¢mara propone dar a Espa?a y Francia m¨¢s diputados tras el Brexit

El Brexit es uno de los mayores desaf¨ªos de la Uni¨®n Europea en los pr¨®ximos a?os. Las negociaciones para la primera salida del club europeo en m¨¢s de seis d¨¦cadas no han hecho m¨¢s que empezar, y el impacto econ¨®mico y pol¨ªtico del divorcio ser¨¢ de primera magnitud. Veintisiete contra uno: quiz¨¢ lo m¨¢s sorprendente hasta ahora es la unidad de los socios. Ajena al ruido y agarrada a esa unidad, Bruselas sigue dise?ando la nueva fisonom¨ªa de la UE: la Euroc¨¢mara propondr¨¢ esta semana reducir de 751 a 705 el n¨²mero de eurodiputados. El Parlamento elimina as¨ª una parte de los 73 euroesca?os brit¨¢nicos. El resto ha desatado una batalla feroz entre bambalinas, de la que finalmente salen ganando Espa?a y Francia, que consiguen cinco asientos m¨¢s por cabeza.

Espa?a pasar¨¢ de 54 a 59 eurodiputados si el pr¨®ximo martes sale adelante el borrador pactado por los principales grupos; Francia, con una poblaci¨®n mayor, pasar¨¢ de 74 a 79. Ambos pa¨ªses estaban infrarrepresentados en esa ratio entre esca?os y poblaci¨®n con respecto a Alemania, que no consigue ni un solo diputado m¨¢s. Los italianos ganan tres esca?os, Holanda e Irlanda obtienen dos adicionales y Suecia y Austria uno extra. El resto se queda como estaba.

La decisi¨®n final est¨¢ en manos del Consejo Europeo, pero la delegaci¨®n espa?ola en la comisi¨®n constitucional de la Euroc¨¢mara apunta que Espa?a ¡°est¨¢ ahora en la media entre esca?os y poblaci¨®n de los grandes pa¨ªses de la Uni¨®n, despu¨¦s de una negociaci¨®n en la que los partidos espa?oles han fijado posiciones conjuntas¡±, seg¨²n Esteban Gonz¨¢lez Pons (PPE), que ha peleado por ese aumento junto a Ram¨®n J¨¢uregui (PSE) y Maite Pagazaurtund¨²a (liberales). ¡°Espa?a recupera el peso que le corresponde: ahora hay que dar densidad pol¨ªtica y presencia institucional a esa representaci¨®n: es urgente recuperar peso en Europa¡±, a?ade J¨¢uregui.

Las negociaciones entre el Reino Unido y la UE han pasado a una segunda fase (tras el acuerdo de divorcio sobre la factura, los derechos de la ciudadan¨ªa y la frontera con Irlanda), pero el riesgo de un Brexit duro sigue ah¨ª, pese a que en los ¨²ltimos d¨ªas se han multiplicado las declaraciones de l¨ªderes que sugieren que el divorcio se podr¨ªa revocar. No parece el escenario m¨¢s probable. La prueba es que la UE sigue adelante con el resto de agendas: la reforma de la eurozona y los pasos adelante en migraci¨®n, defensa y seguridad van de la mano con los trabajos preparatorios de la salida de Reino Unido, que ha encontrado en el Parlamento Europeo a una de las instituciones menos permeables a las peticiones brit¨¢nicas.

La legislatura europea encara su fase final: las elecciones a la Euroc¨¢mara est¨¢n previstas en mayo de 2019, y los grandes partidos empiezan a calentar motores. Junto con esa escaramuza por los euroesca?os que deja vacantes el Brexit, uno de los grandes debates de los pr¨®ximos meses ser¨¢ el de las listas transnacionales (que no siguen la l¨®gica de representaci¨®n de cada pa¨ªs, sino que aglutinan a representantes de los diversos Estados) para los comicios europeos. Ese debate viene de lejos. Pero llega con renovados br¨ªos: el presidente franc¨¦s, Emmanuel Macron, ha hecho suya esa idea con la mente puesta en crear una nueva formaci¨®n, si finalmente no se une a los socialdem¨®cratas o los liberales. El presidente de la Comisi¨®n Europea, Jean-Claude Juncker, ya cit¨® esa posibilidad ¡ªque previamente hab¨ªan lanzado los socialdem¨®cratas italianos¡ª en su discurso sobre el Estado de la Uni¨®n, el pasado oto?o. Y la idea va ganando densidad: Espa?a, Irlanda y B¨¦lgica apoyan esa propuesta entre el centroderecha, y la reciente cumbre del Sur en Roma (en la que participaron Italia, Espa?a, Francia, Grecia, Chipre y Portugal) incluy¨® la posibilidad de impulsar listas transnacionales en sus conclusiones. La Euroc¨¢mara abrir¨¢ esa discusi¨®n tambi¨¦n el martes.