Los ecuatorianos en Espa?a acuden a las urnas preocupados por la corrupci¨®n
La Embajada ecuatoriana en Madrid estima que la participaci¨®n este domingo rozar¨¢ el 40%
Madrid ha amanecido este domingo con un cielo lluvioso y un viento fr¨ªo. Pero las inclemencias del tiempo no han echado para atr¨¢s a miles de ecuatorianos residentes en la Comunidad de Madrid, Extremadura y Castilla-Le¨®n que se han acercado al Pabell¨®n de Cristal de la Casa de Campo para votar en el refer¨¦ndum constitucional planteado por el presidente, Len¨ªn Moreno.? Las siete preguntas propuestas versan sobre temas variados, aunque la que ha protagonizado el debate pol¨ªtico en campa?a ha sido la referida a si los cargos pol¨ªticos pueden volver a presentarse al mismo puesto indefinidamente. Este punto de la consulta es el que ha creado m¨¢s enfrentamiento entre Moreno, de la formaci¨®n de izquierdas Alianza Pa¨ªs, y Rafael Correa, presidente entre 2007 y 2017 y excompa?ero de partido. Sin embargo, la preocupaci¨®n m¨¢s recurrente entre los ecuatorianos residentes en Espa?a es la corrupci¨®n en su pa¨ªs.
La parada de Metro de Lago huele a Ecuador desde primera hora de la ma?ana. Algunos vendedores de morocho (una bebida de leche y ma¨ªz) y empanadas de pl¨¢tano, queso y carne hacen guardia a las puertas del suburbano para recibir a los votantes m¨¢s madrugadores. En la cuesta entre la parada y el Pabell¨®n de Cristal, el recinto electoral m¨¢s grande entre los que ha habilitado el Gobierno para los ecuatorianos en el extranjero, la afluencia de los electores no cesa durante toda la ma?ana. H¨¦ctor P¨¦rez, de 60 a?os y originario de Guayaquil, comenta que va a votar porque quiere que su pa¨ªs ¡°siga adelante¡±. P¨¦rez no est¨¢ a favor ni de Moreno ni de Correa. ¡°Con que luchen contra la corrupci¨®n y cumplan con su deber basta¡±, afirma.
Dentro, bajo la enorme bandera de Ecuador que preside la sala, unas l¨ªneas de colores en el suelo marcan el camino que conduce a las mesas. Cerca, tres hombres reunidos en c¨ªrculo debaten sobre la consulta. Dos apoyan la postura del expresidente Correa y han votado 'no' a las siete preguntas. ¡°Todos votamos a Moreno, pero ahora nos ha traicionado¡±, afirma Eder Quesada. A ¨¦l y a su compa?ero les preocupa que el presidente se al¨ªe con partidos de derechas y que el pa¨ªs vuelva a una situaci¨®n igual de grave que en los a?os 1999 y 2000, cuando se produjo una emigraci¨®n masiva. Un joven que est¨¢ debatiendo con ellos y que se define como ¡°militante de Alianza Pa¨ªs¡±, pero que no quiere dejar su nombre, opina en cambio que las propuestas planteadas por el actual presidente son buenas ¡°para avanzar¡±. Aunque le reconoce a Correa el m¨¦rito de haber ampliado las garant¨ªas democr¨¢ticas en el pa¨ªs con la celebraci¨®n de elecciones y consultas.
Pocos metros m¨¢s all¨¢, frente a una de las mesas electorales, acaban de votar dos amigos treinta?eros que manifiestan posturas opuestas. Wilson Reatiqui se ha quedado ¡°con el 'no¡±, porque le preocupa que Len¨ªn Moreno quiera implementar pol¨ªticas de privatizaci¨®n y considera que Correa ha hecho cosas buenas para el pa¨ªs. M¨®nica Simba?a, en cambio, apoya las propuesta de Moreno, porque teme que Correa pueda asentarse demasiado en el poder y convertirse en un nuevo Ch¨¢vez. A Gladys Bomb¨®n, de 40 a?os, le parece que el verdadero problema es otro. ¡°Yo quiero que en mi pa¨ªs no haya corrupci¨®n. ?Usted qu¨¦ votar¨ªa? Yo he votado 'no a la corrupci¨®n¡±.
A las 11 de la ma?ana, comparece Crist¨®bal Rold¨¢n, el embajador de Ecuador en Madrid. Anuncia que hasta esa hora ya han entrado en los recintos electorales de toda Espa?a 17.000 de los 175.000 residentes con derecho a voto. ¡°La participaci¨®n es una manifestaci¨®n evidente del fervor c¨ªvico tan caracter¨ªstico de los ecuatorianos¡±, comenta satisfecho. La jornada electoral prosigue con tranquilidad y de forma ordenada. Un matrimonio que acaba de dejar sus papeletas en las urnas asegura que est¨¢ todo mejor organizado que en anteriores comicios. 100 voluntarios, 400 miembros de las mesas electorales y 240 delegados pol¨ªticos se afanan para que todo salga a pedir de boca. La c¨®nsul general en Madrid, Lorena Escudero, explica que el coste para organizar la votaci¨®n en la capital ronda los 60.000 euros. A las 17.00 ha terminado el plazo para ejercer el voto. Unos 40.000 electores, el 26% del censo, han participado.
En la puerta del edificio comienza a caer aguanieve, pero dos hermanos de 30 y 22 a?os esperan tranquilamente bajo un paraguas a que sus familiares acaben de votar. Alexander Torres, el mayor, explica que para ¨¦l es normal que los ecuatorianos en el extranjero vean la corrupci¨®n con tanta preocupaci¨®n. ¡°Cuando llevas aqu¨ª tantos a?os te acostumbras a un cierto nivel de vida y a un funcionamiento de las instituciones, es normal que culpes a los pol¨ªticos corruptos de lo malo que pasa en el pa¨ªs, pero cambiarlo solo puede hacerlo la participaci¨®n ciudadana¡±. Su hermano Jan no ha podido votar, porque no est¨¢ empadronado. Afirma que, pese a que su vida est¨¦ en Espa?a, le gusta informarse sobre su pa¨ªs natal y apoya a Correa, porque cree que Moreno lo ha traicionado. M¨¢s all¨¢ de esta lucha pol¨ªtica, le parece importante que la comunidad emigrada participe para que Ecuador vaya a mejor.
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