La chica palestina que abofeteaba en un v¨ªdeo a los soldados israel¨ªes

Acaba de cumplir 17 a?os en la celda y ya es una prisionera c¨¦lebre. Lleva casi dos meses entre rejas, a la espera de que este martes se iniciara su juicio en un tribunal militar en la sala de vistas del penal de Ofer, a las afueras de Ramala, en Cisjordania bajo ocupaci¨®n militar. Sobre su cabeza salida de un lienzo de Botticelli pesan 12 acusaciones de asalto, desacato a las tropas e incitaci¨®n a la violencia en las redes sociales, entre otros cargos. La justicia castrense, que ha ordenado que la vista se desarrolle a puerta cerrada para la prensa y el cuerpo diplom¨¢tico, puede imponerle una condena de hasta 10 a?os de c¨¢rcel. Pero Ahed Tamimi se ha convertido ya en s¨ªmbolo de resistencia para los palestinos. Su detenci¨®n por Israel, precisamente, la ha dado a conocer a escala global. El juicio ha sido aplazado hasta el 11 de marzo: la adolescente de la melena pelirroja tendr¨¢ que permancer otro mes m¨¢s encarcelada.

Entre su pueblo es vista como una Juana de Arco nativa digital, una activista adolescente cuyas protestas han rebotado de Facebook a Twitter desde que se manifestaba con coletas junto a sus padres. Cuando la conexi¨®n de datos 3G ya es un servicio ofrecido por las operadores de m¨®viles cisjordanos, Ahed encarna una nueva generaci¨®n que pasa de las pedradas a los tel¨¦fonos inteligentes que graban y difunden de inmediato cualquier abuso de las fuerzas de seguridad. Ante la sociedad israel¨ª, la muchacha de la melena pelirroja es presentada como una provocadora profesional, educada en una familia de alborotadores expertos en t¨¦cnicas de propaganda, que solo busca denigrar la imagen de las Fuerzas de Defensa de Israel, el Ej¨¦rcito mejor armado de Oriente Pr¨®ximo.

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Ahed naci¨® para activista. Bassem Tamimi, su padre, pas¨® por la c¨¢rcel en las dos Intifadas, y es uno de los l¨ªderes del movimiento que reivindica en Nabi Saleh, al norte de Ramala, la devoluci¨®n a la aldea del manantial arrebatado por los colonos de un asentamiento cercano. En esta insurrecci¨®n por el agua de resonancias b¨ªblicas, le acompa?a toda su familia. Nariman, la madre de la adolescente, fue arrestada al mismo tiempo y est¨¢ tambi¨¦n pendiente de juicio.

Ya era conocida. Cobr¨® notoriedad en 2015 cuando impidi¨® junto a mujeres y ni?os del clan Tamimi que un soldado israel¨ª detuviera a su hermano peque?o, que llevaba un brazo inmovilizado en cabestrillo, bajo la acusaci¨®n de apedrear a las tropas. Fue recibida en Estambul por el l¨ªder turco Recep Tayyip Erdogan; compareci¨® en un acto del Parlamento Europeo, particip¨® en charlas en Sud¨¢frica sobre la situaci¨®n en Palestina. Pero Ahed no fue encumbrada como un icono palestino hasta que una patrulla de la polic¨ªa de fronteras se present¨® en su casa de madrugada el pasado 19 de diciembre para aprehenderla por haber utilizado la violencia contra las fueras de seguridad.

El viernes 15, en plena jornada de la ira palestina, su madre hab¨ªa grabado un v¨ªdeo en el que Ahed se encaraba con dos soldados ante su vivienda. Dej¨® constancia gr¨¢fica de los insultos, patadas y bofetadas que propin¨® a los uniformados, que permanecieron impasibles ante la rabia de la muchacha y la presencia de la videoc¨¢mara. Sus padres alegaron que se encontraba muy afectada por el grave estado de uno de sus primos, al que una bala recubierta de goma disparada por las tropas le hab¨ªa destrozado la cara.

Pasaron las horas y el incidente parec¨ªa haber ca¨ªdo en el olvido. Nadie se present¨® a detener a Ahed hasta que las im¨¢genes grabadas por su madre se tornaron virales en las redes sociales 48 horas despu¨¦s. La mayor¨ªa de los palestinos ve¨ªan reflejada en las escenas del v¨ªdeo una nueva versi¨®n del mito de David contra Goliat. Muchos israel¨ªes, sobre todo entre la derecha nacionalista, percibieron como una humillaci¨®n los manotazos de una adolescente a dos soldados armados, en uniforme de campa?a y provistos de chalecos antibalas. El ministro de Educaci¨®n y l¨ªder del movimiento pol¨ªtico procolonizaci¨®n, Naftal¨ª Bennett, exigi¨® que quienes ataquen a los soldados ¡°acaben sus vidas en prisi¨®n¡±.

Hay israel¨ªes que, como el viceministro Michael Oren, creen que Ahed es un personaje de ficci¨®n inventado por la propaganda pol¨ªtica palestina. Oren, exembajador en Estados Unidos, encabez¨® una investigaci¨®n secreta en la Knesset (Parlamento) sobre si los Tamimi eran una familia verdadera o estaba integrada por ¡°agentes provocadores que enviaban a los menores a enfrentarse con los soldados¡±. A causa de su apariencia ¡°de rubia pecosa vestida con ropa occidental¡±, consideraba que hab¨ªa sido seleccionada para el papel precisamente por ¡°no parecer palestina¡±. La investigaci¨®n no lleg¨® a ning¨²n resultado concluyente, seg¨²n el diario Haaretz.

Otros israel¨ªes, como el poeta y cantautor Yehonatan Geffen, han comparado a la adolescente que se sienta en el banquillo de un tribunal militar con la ni?a alemana jud¨ªa Ana Frank. Geffen, un pacifista contrario a la ocupaci¨®n, ley¨® en un programa de radio un poema en el que glosaba a una muchacha ¡°de la cabeza pelirroja, que abofeteaba como David a Goliat, y que figuraba en las filas de las Juanas de Arco¡­¡±.

¡°Al negarse a poner en libertad a Ahed Tamimi las autoridades israel¨ªes incumplen sus obligaciones con las leyes internacionales que protegen a los menores¡±, advierte Magdalena Mughrabi, subdirectora para Oriente Pr¨®ximo de Amnist¨ªa Internacional. ¡°Una chica desarmada no supone una amenaza para dos soldados¡±. La Convencion de los Derechos del Ni?o, ratificada por el Estado hebreo, prescribe que su detenci¨®n es siempre el ¨²ltimo recurso legal y solo debe aplicarse durante el menor tiempo posible.

Con su comparecencia de este martes ante un consejo de guerra, Ahed Tamimi pone rostro a los 350 menores de edad palestinos recluidos en centros de detenci¨®n de Israel.