Escuela pol¨ªtica contra la gran coalici¨®n
J¨®venes socialdem¨®cratas se entrenan para defender su oposici¨®n a la alianza con la canciller Merkel antes de la votaci¨®n de las bases
-El SPD [Partido Socialdem¨®crata Alem¨¢n] tiene que entrar en el Gobierno por responsabilidad de Estado.
-Precisamente, ser responsable implica no entrar y reconstruirse en la oposici¨®n, para no desaparecer.
Julia, Vanessa, Julius y el resto de j¨®venes militantes que esta noche han venido a una sede del SPD en Berl¨ªn, se est¨¢n entrenando. De pie, por parejas, hacen role play. Dramatizan una supuesta conversaci¨®n entre un defensor de la gran coalici¨®n y uno que la rechaza. Los Jusos, las juventudes del SPD, son la punta de la lanza de la revuelta contra la gran coalici¨®n y hoy engrasan sus argumentos y agilidad dial¨¦ctica para salir a la calle.
A partir del pr¨®ximo martes, 460.000 militantes votar¨¢n en una consulta vinculante a favor o en contra de la alianza de Gobierno con el bloque conservador de Angela Merkel. Si la mayor¨ªa vota en contra, el embri¨®n de nuevo Ejecutivo colapsar¨¢ y Alemania se sumir¨¢ en una profunda crisis pol¨ªtica, cuatro meses y medio despu¨¦s de que la mayor econom¨ªa europea haya sido incapaz de poner en pie un Gobierno. La responsabilidad que recae sobre las espaldas de estos j¨®venes y en general de los militantes del SPD es enorme. Por eso, aseguran, est¨¢n hoy aqu¨ª.
Nuevos afiliados
Julius es uno de los 24.339 nuevos afiliados que a partir de enero se apuntaron al SPD y que podr¨¢n votar en la consulta sobre la gran coalici¨®n. Las juventudes socialdem¨®cratas lanzaron una campa?a de captaci¨®n de socios con al idea de que votaran en contra de la alianza con Merkel, que ha resultado muy efectiva.
A sus 26 a?os, Julius, antiguo militante de Los Verdes y estudiante de ingenier¨ªa, se ha apuntado al SPD porque le da miedo ¡°que el SPD se desplome¡±. ¡°Con una tercera gran coalici¨®n, el SPD se arriesga a volverse irrelevante y a ser sustituido por Die Linke y Afd]. ?l va a votar en contra, porque cree que ¡°no es justo que Europa chantajee al SPD. La estabilidad de Europa no depende de nosotros. No es verdad ese escenario apocal¨ªptico que pintan. Hay otras opciones, un Gobierno de minor¨ªa de Merkel o repetir las elecciones¡±.
La sesi¨®n de entrenamiento pol¨ªtico la dirige Alexandra Kramm, una experta en comunicaci¨®n y militante del SPD desde hace 30 a?os. ¡°Aqu¨ª no hemos venido a discutir, hemos venido a entrenarnos y a manejar los argumentos, los racionales y los emocionales¡±, arranca la profesora. ¡°Hay que logar que tu interlocutor conf¨ªe en ti. No hay que ser agresivo¡±, explica a la treintena de j¨®venes que han venido a escucharla. Forman parte de la organizaci¨®n juvenil del SPD, que cuenta con 70.000 socios de entre 14 y 35 a?os y una visibilidad sin precedentes. En buena parte, debido al carisma de su l¨ªder, Kevin K¨¹hnert, que estos d¨ªas recorre el pa¨ªs con su campa?a #NoGroko.
En un peque?o receso, Kramm explica a este diario que se cri¨® en los Jusos con Andrea Nahles, la elegida el martes por la direcci¨®n del SPD para tomar las riendas del partido despu¨¦s de que Martin Schulz se retirara. Nahles, una de las hist¨®ricas representantes del ala izquierda, es ahora una ferviente defensora de la gran coalici¨®n. Kramm no comparte el argumento de que rechazar la alianza con Merkel podr¨ªa provocar una crisis que reverberar¨ªa en toda la UE. ¡°Es que ya estamos en medio de una crisis. Si hay gran coalici¨®n, en las pr¨®ximas elecciones no superaremos el 16%¡±. Europa espera impaciente que hay un Gobierno en Berl¨ªn para poner en marcha las reformas que necesita con urgencia la UE. Schulz explic¨® que ha recibido llamadas de colegas europeos, incluido Emmanuel Macron.
Esa presi¨®n no hace mella en la determinaci¨®n de Julia, una joven de 18 a?os que asegura tener ¡°una posici¨®n muy decidida en contra de la gran coalici¨®n¡±. Ha venido porque quiere aprender a transmitir mejor su convicci¨®n. ¡°Siempre se escuchan los mismos argumentos y yo quiero aprender a hablar de c¨®mo podemos aportar a la sociedad en lugar de sobre c¨®mo nos repartimos el poder¡±, explica la joven durante la pausa. ¡°El partido est¨¢ siendo irresponsable. Hizo una promesa y ahora est¨¢ haciendo justo lo contrario¡±, protesta, en alusi¨®n al compromiso de Schulz de no gobernar con Merkel.
Patio de colegio
Otra joven, Luisa, de 22 a?os y con el pelo verde, dice que va a votar a favor, con la esperanza de que las promesas del contrato de coalici¨®n mejoren en la vida de los ciudadanos. A¨²n as¨ª, le horroriza el baile de pu?ales y la lucha de poder que en los ¨²ltimos d¨ªas han protagonizado algunos dirigentes del SPD. ¡°Es como un patio de colegio¡±.
A media sesi¨®n, le toca el turno a lo que Kramm llama ¡°el empaquetado¡±. Es decir, la importancia de presentar bien las ideas. Hacerlo a trav¨¦s de una imagen, asegura la experta, es lo m¨¢s efectivo. Uno de los alumnos da con una que los dem¨¢s aplauden. ¡°Si pones la mano en un hornillo caliente, te quemas. ?Por qu¨¦ volver a ponerla si ya sabes que te vas a quemar?¡±. El alumno se refiere con su met¨¢fora a la sangr¨ªa de votos que le ha costado las grandes coaliciones con las que el SPD ha gobernado en Alemania ocho de los ¨²ltimos 12 a?os. ¡°?Para que entrar en una nueva Groko [como se conoce en Alemania la alianza] si ya sabes que te vas a quemar?¡±, pregunta el alumno aventajado.
En cuatro tablones, los participantes han escrito los argumentos a favor y en contra. Entre los favorables, aparecen la destacada presencia de ministros, incluidas las carteras m¨¢s importantes, que ha logrado arrancar el SPD en la negociaci¨®n con Merkel. Aparece tambi¨¦n el fuerte contenido social que han logrado imprimir al acuerdo, como una mayor financiaci¨®n para guarder¨ªas. Destacan tambi¨¦n el papel central de una Europa solidaria y social, como otra de las conquistas de los negociadores socialdem¨®cratas. Kramm les explica que es importante que dominen todos los argumentos, los suyos y los del contrario, porque a la hora de defender una posici¨®n, es importante reconocer los logros del contrario para evitar provocar un efecto contraproducente en el interlocutor.
En el tabl¨®n de los argumentos en contra, destaca el miedo a reforzar a la extrema derecha. Alternativa por Alemania (Afd), que ha entrado por primera vez en el Parlamento y se convertir¨ªa en la principal fuerza de la oposici¨®n, en un escenario de gran coalici¨®n. Para muchos de los Jusos reunidos hoy aqu¨ª, ese es el principal motivo para votar que no.
A estas alturas, el resultado de la consulta que se perfila crucial, es incierto. La mayor¨ªa de los que han venido hoy dicen estar en contra del Groko, pero hay alguno que confiesa tener dudas. La propia Kramm reconoce que a¨²n no lo tiene claro. ¡°Las tripas me dicen que vote en contra, pero¡¡±.
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