Golpe del Supremo de EE UU al ¡®lobby¡¯ de las armas en pleno debate sobre su control

El golpe judicial al lobby de las armas, aunque no es un criterio nuevo, llega en un momento especialmente delicado. El pasado mi¨¦rcoles, un hombre de 19 a?os entr¨® en un instituto de Parkland, Florida, y asesin¨® a sangre fr¨ªa a 17 estudiantes y profesores con un rifle de asalto AR-15 comprado legalmente. En medio de la conmoci¨®n nacional, los supervivientes han empezado una campa?a para se?alar a los pol¨ªticos por su inacci¨®n a la hora de aprobar restricciones a la compra de armas.

El caso en cuesti¨®n tiene origen en una demanda presentada en 2011 por particulares y organizaciones de defensa de las armas contra una ley de California que impone un periodo de espera de 10 d¨ªas antes de comprar un arma de fuego. El Estado argumenta que este l¨ªmite sirve como ¡°periodo de tranquilidad¡±, para evitar compras de armas en caliente, como medida de prevenci¨®n ante comportamientos impulsivos. La ley contempla varias excepciones.

El Tribunal Supremo, m¨¢ximo ¨®rgano de interpretaci¨®n de la Constituci¨®n de Estados Unidos, suele ser reticente a entrar en el debate de la definici¨®n de los l¨ªmites a la Segunda Enmienda, que establece el derecho a tener armas. En dos ocasiones anteriores, en 2008 y 2010, declar¨® inconstitucionales sendas normas de Chicago y de Washington DC por ser demasiado restrictivas de este derecho, de forma que lo eliminaban en la pr¨¢ctica. El Supremo no ha aceptado casos sobre este asunto desde entonces.

En este caso, el Supremo deja en vigor la sentencia de la Corte de Apelaciones del Noveno Circuito (el tribunal federal con sede en San Francisco y con jurisdicci¨®n sobre todos los estados del Oeste), que consider¨® en su sentencia de 2016 que la ley de los 10 d¨ªas de California no afectaba al derecho constitucional de llevar armas.

El juez Thomas, en su voto particular, critic¨® duramente a sus compa?eros de tribunal. ¡°Si una corte inferior hubiera tratado cualquier otro derecho tan a la ligera, tengo pocas dudas de que esta corte habr¨ªa intervenido¡±, escribe. ¡°Pero, como queda en evidencia por nuestra continuada inacci¨®n en este asunto, la Segunda Enmienda es un derecho que sale perjudicado por este tribunal¡±. Thomas a?ade: ¡°El derecho a tener y llevar armas es aparentemente el hu¨¦rfano constitucional de esta corte. Y las cortes inferiores parecen haber captado el mensaje¡±.

Los periodos de espera para comprar armas est¨¢n en vigor en California, Haw¨¢i, Rhode Island, Illinois, Minnesota, Florida, Iowa, Maryland, Nueva Jersey y Washington DC. Los 10 d¨ªas de California son el periodo m¨¢s largo despu¨¦s del de Haw¨¢i. En California se aplica a todas las compras de armas, incluso si el comprador ya tiene otra o es conocido por el vendedor. El periodo de espera es necesario para dar tiempo a hacer los controles de antecedentes necesarios, asegurarse de que todos los papeles est¨¢n en regla, evitar compras fraudulentas y compras en caliente.

El a?o pasado, el Tribunal Supremo tambi¨¦n dej¨® sin tocar otra ley de California que requiere ¡°buenas razones¡± para otorgar permisos para llevar armas ocultas en p¨²blico.