Sergio Moro: ¡°La corrupci¨®n seguir¨¢ existiendo, pero debemos romper las reglas de la impunidad¡±

Sergio Moro visit¨® M¨¦xico para hablar de la importancia de la lucha contra la corrupci¨®n. El juez brasile?o que lidera desde 2014 el caso Lava Jato, que ha derivado en 118 sentencias condenatorias incluida la del expresidente Luis Inacio Lula da Silva y ha desnudado un sistema de sobornos que ha rebasado las fronteras de Brasil, encontr¨® a su paso un pa¨ªs que lleva cuatro meses sin fiscal general y que tiene un complejo Sistema Nacional Anticorrupci¨®n en funciones pero ac¨¦falo. Sin embargo, el juez dej¨® un mensaje de que es posible romper las inercias que parecen enraizadas en las naciones. ¡°La corrupci¨®n siempre ha existido y existir¨¢, pero lo que debemos hacer es romper las reglas de la impunidad¡±, dijo el magistrado de la 13 Corte Criminal Federal de Curitiba.?

El juez Moro, invitado al pa¨ªs norteamericano por la asociaci¨®n civil Mexicanos contra la corrupci¨®n, se reuni¨® este lunes con estudiantes de Derecho de diversas universidades. Tambi¨¦n se entrevist¨® con ministros de la Suprema Corte de Justicia y dio sendas conferencias en el Senado y en el Colegio Nacional. En una peque?a reuni¨®n con periodistas, en la que estuvo EL PA?S, el juez detall¨® las claves que permitieron a Lava Jato convertirse en el caso judicial m¨¢s conocido de Am¨¦rica Latina rompiendo el pacto de impunidad entre el poder pol¨ªtico y las corporaciones. ¡°Fue muy importante la colaboraci¨®n de delincuentes confesos. Un exdirectivo de Petrobras revel¨® los cr¨ªmenes de otro. Y eso hizo posible procesar un caso mucho m¨¢s grande que revel¨® todo un sistema criminal¡±, explic¨®. ¡°Es importante tener pruebas. No puedes conseguir sentencias solamente con deposiciones¡±.?

La investigaci¨®n cont¨® con la cooperaci¨®n de Suiza, que provey¨® a los juzgados brasile?os con evidencia. ¡°Ellos pusieron condiciones. Dar¨ªan informaci¨®n sobre pagos de sobornos , pero exigieron no procesar delitos fiscales con esas pruebas¡±, agrega el juez. El resultado es una operaci¨®n que desvel¨® los tent¨¢culos de una trama que alcanz¨® pol¨ªticos y empresarios en Argentina, Chile, Colombia, Ecuador, M¨¦xico, Panam¨¢, Per¨², Rep¨²blica Dominicana y Venezuela. Hasta hoy llegan a sus juzgados testimonios de empleados que aseguran haber pagado propinas y coimas a funcionarios de otros pa¨ªses para obtener contratos y favores de diferentes gobiernos.?

Moro naci¨® en la ciudad de Maring¨¢ (Estado de Paran¨¢, al sur de Brasil) en 1972. Est¨¢ casado y tiene dos hijos. Curs¨® la carrera de Derecho y despu¨¦s hizo las oposiciones para entrar a la magistratura en 1996. Sobre ¨¦l plane¨® la figura de Giovanni Falcone, uno de los jueces italianos que logr¨® m¨¢s de 300 sentencias condenatorias de mafiosos sicilianos en los a?os ochenta y noventa como parte de la investigaci¨®n Mani pulite (manos limpias). ¡°Fue un juez que me marc¨®¡±, asegur¨®. El juez no fue el mismo despu¨¦s de haber le¨ªdo Excellent Cadavers, un libro sobre la investigaci¨®n judicial orquestada por el magistrado de Palermo, asesinado en un atentado en mayo de 1992. Ese texto, record¨® Moro, despu¨¦s fue llevado al cine en la pel¨ªcula Falcone. El propio Moro ser¨¢ un personaje de ficci¨®n. El 23 de marzo, Netflix estrenar¨¢ mundialmente O Mecanismo, una serie brasile?a inspirada en la operaci¨®n Lava Jato que detalla la investigaci¨®n policial.?

La corrupci¨®n no es una enfermedad tropical¡­ No existe ning¨²n destino manifiesto que condene a los pa¨ªses latinoamericanos a la corrupci¨®n

Los manifestantes que tomaron las calles de Brasil en 2016 para mostrar su hartazgo por la corrupci¨®n que hab¨ªa contaminado las altas esferas de la pol¨ªtica usaban m¨¢scaras y camisetas con su rostro. El juez Moro, sin embargo, se resta protagonismo. ¡°No fue idea m¨ªa, yo no lo ped¨ª¡±, r¨ªe. Las sentencias del caso, asegura, ¡°no son el trabajo de un solo hombre¡±.?

Las claves del ¨¦xito de Lava Jato fueron diversas. ¡°Brasil desarroll¨® una democracia muy exigente despu¨¦s de los a?os del Gobierno militar¡±, asegura. Esto hizo que varias instituciones del Estado vieran reforzadas sus cimientos. Entre ellos, el sistema de justicia y la independencia interna de los ¨®rganos de investigaci¨®n. ¡°Volvimos todo p¨²blico para que la gente conociera lo que estaba ocurriendo, que supiera lo que estaba pasando¡±. La operaci¨®n cont¨® con el apoyo de la opini¨®n p¨²blica y de la prensa local. ¡°Han sido determinantes porque evitan la obstrucci¨®n de la justicia. Esta gente es muy poderosa¡±, dijo en referencia a los pol¨ªticos y empresarios corruptos. ¡°Tambi¨¦n fue importante tener algo de suerte¡±, brome¨®.?

Moro retom¨® ayer el mensaje optimista frente a un grupo de senadores mexicanos. ¡°La corrupci¨®n no es una enfermedad tropical¡­ No existe ning¨²n destino manifiesto que condene a los pa¨ªses latinoamericanos a la corrupci¨®n¡±. La figura que ayud¨® a romper la inercia de la impunidad en Brasil tir¨® del optimismo y llam¨® a la acci¨®n. ¡°El presidente del Supremo Tribunal dijo que tal vez los tiempos de los barones de la corrupci¨®n en Brasil est¨¦n llegando a su fin... Este caso dio la esperanza a los brasile?os de que las cosas pueden cambiar, todo puede ser alterado siempre y cuando haya voluntad pol¨ªtica¡±. Los senadores aplaudieron al final de la conferencia. El sonido de los aplausos no dej¨® claro si los legisladores recog¨ªan el guante o solo desped¨ªan a su invitado.