¡°Si Maduro no cumple con las condiciones, yo me retirar¨ªa de las elecciones¡±
Seguro de poder ganarle al presidente de Venezuela, el opositor Henri Falc¨®n vaticina que ¡°con la MUD nos volveremos a encontrar en el camino¡±
Aunque ha militado consecuentemente en las entra?as de la Mesa de la Unidad Democr¨¢tica (MUD) durante ocho a?os, luego de haber roto con el chavismo, Henri Falc¨®n sigue siendo, para muchos opositores ortodoxos, una figura pactista y dudosa.
Gobernador del Estado Lara durante tres lustros, fundador del partido Avanzada Progresista, Falc¨®n se ha ubicado, deliberadamente, del lado izquierdo de la MUD, y es uno de los pocos dirigentes opositores que el chavismo quiz¨¢ este dispuesto a aceptar como interlocutor. Se trata de un dirigente que ha cultivado sus simpat¨ªas en los sectores moderados de la disidencia, y equidistantes con el chavismo. Un pol¨ªtico que parece haber estructurado una estrategia de poder para las actuales circunstancias de Venezuela, con un proyecto propio, tan controvertido y discutible como los propios t¨¦rminos de cualquier transici¨®n pol¨ªtica. Con m¨¢rgenes aceptables en las encuestas, es el ¨²nico opositor que ha decidido desconocer el llamado mayoritario de la MUD a boicotear las elecciones convocadas por Maduro.
Pregunta. ?Ha pensado en el costo pol¨ªtico que puede pagar present¨¢ndose a una elecci¨®n en la cual puede quedar obteniendo un decoroso segundo lugar que le complete el lienzo a Nicol¨¢s Maduro?
Respuesta. Uno debe asumir ac¨¢ una responsabilidad frente al pa¨ªs y la historia. No se trata de posiciones personales o ideol¨®gicas. Es un clamor: casi 70% de la gente en Venezuela quiere participar en unas elecciones, gente que est¨¢ pasando trabajo, que no consigue medicinas, a la cual no se le puede negar el derecho a votar. Aqu¨ª no se trata de c¨¢lculos personales, de c¨®mo vas a quedar. Alguien tiene que dar la cara.
P. ?No hubo un fraude lo suficientemente notorio con la convocatoria a la Asamblea Constituyente?
R. Los gobiernos con signos dictatoriales como este regularmente apelan a la trampa. Eso ha sido as¨ª siempre. Ocurri¨® en Nicaragua, con el sandinismo; en Per¨², con Fujimori; en Chile con Pinochet. Esas barreras pueden remontarse con organizaci¨®n y decisi¨®n ciudadana. Hay un gran cansancio en el pa¨ªs y las condiciones para cambiar est¨¢n dadas.
P. ?Lo aconsejable no habr¨ªa sido alinearse con la decisi¨®n tomada por el resto de los partidos de la Unidad Democr¨¢tica frente a Maduro?
R. En la oposici¨®n se han venido dando posiciones interesantes, como el Frente Amplio convocado por toda la sociedad civil para rescatar la democracia, que yo saludo y respeto. Todo lo que obre para colocarle un destino cierto al fin de esta pesadilla es bienvenido. Tenemos que ver esas expresiones, incluyendo a la MUD, como aliados, m¨¢s all¨¢ de las diferencias de interpretaci¨®n.
P. A usted se le acusa de ser un agente encubierto del chavismo, un dirigente que va a pactar con Maduro para garantizar el continuismo.
R. Pienso que hay que superar las etiquetas de la militancia pol¨ªtica; centrarnos en el criterio de la ciudadan¨ªa venezolana. Nuestra misi¨®n es convencer a las mayor¨ªas, movilizarlas para superar este gobierno desastroso. Qui¨¦nes somos dem¨®cratas no queremos sacar a este gobierno con balas, sino con votos. Ah¨ª tenemos el caso de Colombia: el proceso de paz termina donde debi¨® comenzar: dialogando. Buscando un marco pol¨ªtico para todos. No hay posibilidad de superar esta crisis si no apelamos a la reconciliaci¨®n. Liberar a los presos pol¨ªticos, tomar grandes decisiones econ¨®micas, levantar el control de cambios. Ah¨ª est¨¢n las elecciones parlamentarias del 2015. Favorec¨ªan al chavismo desde todos los puntos de vista, y unidas, las fuerzas opositoras obtuvieron una amplia victoria. Esas condiciones eran m¨¢s adversas que las actuales. En estas elecciones esperamos una observaci¨®n internacional mucho m¨¢s consistente que en 2015. Ir¨¦ pronto a Naciones Unidas, a conversar con su Secretario General, Antonio Guterres; estamos exigiendo la presencia de una delegaci¨®n de la Uni¨®n Europea a las autoridades electorales del pa¨ªs.
P. ?Qu¨¦ pasa si esas demandas no se cumplen?
R. Si usted firma un contrato, con condiciones establecidas, y las cl¨¢usulas no se cumplen, no hay condiciones de darle cumplimiento al acuerdo. Nos retirar¨ªamos. Pero el m¨¢s interesado en darle cumplimiento a esas condiciones pactadas es el propio gobierno.
P. ?Por qu¨¦?
R. Porque el gobierno de Maduro no tiene posibilidad de maniobra. La crisis devora al pa¨ªs.
P. ?Usted se figura al gobierno de Maduro perdiendo unas elecciones y organizando las cosas para entregarle el poder?
R. No tiene otra. El gobierno de Maduro no solo es derrotable: ya est¨¢ derrotado. Cercado por la crisis y aislado. Debemos dejar de enviarle a la poblaci¨®n mensajes cruzados, ayudando al gobierno a consolidar la desmotivaci¨®n. Hay sectores extremistas de la Oposici¨®n que emplean todo su tiempo en atacarme a m¨ª, en lugar de concentrarse en el verdadero adversario, que es Maduro.
P. ?C¨®mo podr¨¢ imponer su autoridad con unas Fuerzas Armadas que han colaborado activamente con Nicol¨¢s Maduro para imponer su ley?
R. Los militares no son extraterrestres. Tienen, como nosotros, extracci¨®n popular; sufren las consecuencias de esta crisis. La realidad de los hechos, pol¨ªticamente, ir¨¢ haciendo perder peso a la Constituyente. Una vez que yo gane las elecciones, en este contexto, el clima del pa¨ªs cambiar¨¢. La Constituyente no tiene posibilidad de generar ninguna legitimidad luego de la consulta de mayo.
P.??Qu¨¦ piensa Henrique Capriles Radonski de su candidatura?
R. He tenido mis diferencias con Henrique. Nuestra relaci¨®n hoy es excelente, porque m¨¢s all¨¢ de la pol¨ªtica somos amigos. Hemos conversado mucho. Es una persona con muchos atributos, un l¨ªder necesario. Ojal¨¢ sigamos coincidiendo. Nadie quiere ir aqu¨ª a un gobierno perpetuo: mi presidencia ser¨¢ extraordinaria, encarna una circunstancia excepcional, y debe ser el comienzo para eliminar ese vicio de la reelecci¨®n. Venezuela necesita rescatar el valor de la alternabilidad.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.