Las fuerzas turcas conquistan la ciudad kurdo-siria de Afrin
Los civiles huyen ante el avance turco y denuncian vejaciones y cr¨ªmenes de las facciones ¨¢rabes aliadas de Turqu¨ªa
La bandera turca ya ondea sobre lo que hasta ahora era la sede de gobernaci¨®n del cant¨®n kurdo de Afrin, se?alando la victoria final de la ofensiva de las Fuerzas Armadas de Turqu¨ªa y sus aliados del Ej¨¦rcito Libre Sirio (ELS) y otras facciones islamistas sobre las milicias kurdas Unidades de Protecci¨®n Popular (YPG). Seg¨²n im¨¢genes distribuidas por Ankara, los tanques turcos han penetrado en el interior de la ciudad y patrullan sus calles.
¡°Esto es un tributo a los m¨¢rtires que ha dado su vida por la naci¨®n turca¡±, proclam¨® un soldado desde el balc¨®n del edificio gubernamental de Afrin tras colocar las banderas de Turqu¨ªa y la oposici¨®n siria. Haciendo gala de su condici¨®n de comandante en jefe, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, anunci¨® triunfalmente: ¡°A las 8.30 de la ma?ana, unidades del Ej¨¦rcito Libre Sirio apoyadas por las Fuerzas Armadas Turcas ha tomado el control total del centro de Afrin. Los terroristas han escapado con el rabo entre las piernas¡±.
Las defensas de las YPG se han desmoronado como un castillo de naipes desde que Turqu¨ªa tomase el control de las ¨¢reas monta?osas que rodean la ciudad de Afrin hace menos de dos semanas. La invasi¨®n de este cant¨®n kurdo del noroeste de Siria, que hasta ahora hab¨ªa sido uno de los rincones m¨¢s pac¨ªficos durante los siete a?os de guerra que vive el pa¨ªs, se inici¨® el pasado 20 de enero con la justificaci¨®n de que las milicias kurdas que lo controlaban supon¨ªan una amenaza para Turqu¨ªa dado que mantienen estrechos v¨ªnculos con el grupo armado kurdo PKK, que act¨²a en territorio turco y est¨¢ incluido en las listas de organizaciones terroristas de Ankara, Bruselas y Washington. Pese a lo cual, las YPG combaten contra el Estado Isl¨¢mico de la mano de Estados Unidos en el norte y este de Siria. Los ¨²ltimos d¨ªas de ofensiva han sido un paseo triunfal para el Ej¨¦rcito turco, que ha avanzado desde el extrarradio de Afrin gracias al apoyo de los bombardeos a¨¦reos y sin apenas resistencia ante la aparente huida de los milicianos de las YPG.
Tambi¨¦n buena parte de la poblaci¨®n tambi¨¦n ha huido. Decenas de miles de personas (hasta 200.000 de las 350.000 que habitaban en Afrin, seg¨²n el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos) han tomado los pocos enseres que han podido y en coches, camionetas y tractores han buscado refugio de los combates y los bombardeos turcos en ¨¢reas bajo dominio del r¨¦gimen sirio.
¡°Vivimos en un pa¨ªs devastado por la guerra, pero en Afrin est¨¢bamos a salvo. Ten¨ªamos un hogar, ten¨ªamos dignidad. Ahora no tenemos nada. Junto a m¨ª est¨¢n mi madre y mi hermana, pero tenemos poco dinero y no sabemos adonde ir¡±, explica Rania a este diario por tel¨¦fono y entre sollozos. Esta maestra ha tenido que escapar en tres ocasiones del lugar d¨®nde se cobijaba ante el avance de las tropas turco-¨¢rabes: ¡°Al principio pensaba que el mal no puede ganar, que el mundo actuar¨ªa y detendr¨ªa el ataque. Pero fui est¨²pida. Vivimos en un mundo que es una jungla, donde cualquiera puede invadir tu tierra bajo falsos pretextos y el mundo ignorar¨¢ sus atrocidades. En 1948, cuando Palestina fue ocupada por Israel, la gente tuvo que abandonar sus hogares y sus pueblos. Siempre que le¨ªa sobre ello lo justificaba en que entonces la comunidad internacional no hizo nada porque no sab¨ªa, porque no hab¨ªa medios ni internet. Pero hoy estamos en 2018 y esto mismo le ocurre a los kurdos ante el silencio del mundo¡±.
La mayor¨ªa de la poblaci¨®n de Afrin es kurda y muchos temen las ansias de venganza de las facciones rebeldes que acompa?an a los soldados turcos, en algunos casos procedentes de localidades en otras partes de Siria controladas por milicias kurdas. En las redes sociales han aparecido v¨ªdeos de milicianos islamistas y del ELS insultando, vejando y maltratando a civiles, as¨ª como otros derribando la estatua del herrero Kawa, figura central de las tradiciones kurdas, que presid¨ªa una glorieta en Afrin.
Fuentes kurdas tambi¨¦n han denunciado cr¨ªmenes de guerra como el bombardeo del hospital Avrin, el ¨²nico que funcionaba en la ciudad conquistada por la ofensiva turco-¨¢rabe, hecho que las autoridades en Ankara han negado. ¡°El hospital Avrin fue alcanzado por tres misiles y quince personas perdieron su vida en el ataque. Hace tres d¨ªas, las fuerzas turcas tambi¨¦n atacaron con lanzacohetes el edificio de la Media Luna Roja y el hospital Avrin¡±, denunci¨® Mustafa Ahmet, de la Media Luna Roja Kurda. Seg¨²n el Observatorio Sirio, desde el pasado enero, 289 civiles, entre ellos 43 ni?os, han fallecido bajo las bombas turcas.
La misma organizaci¨®n ha incrementado el n¨²mero de bajas mortales de las YPG en toda la campa?a de Afrin hasta las 1.500 (previamente hab¨ªa dicho que no superaban las 500), y hasta las 496 el de las fuerzas atacantes, en su mayor¨ªa combatientes del ELS y grupos islamistas. El Ej¨¦rcito turco reconoce la muerte de 46 de sus soldados.
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