Argentina pide un rescate al FMI

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Argentina no puede doblegar al d¨®lar y volver¨¢ a pedir asistencia al Fondo Monetario Internacional (FMI)?despu¨¦s de 15 a?os. En un mensaje grabado,?el presidente Mauricio Macri ha anunciado este martes que hab¨ªa hablado con la presidenta el FMI, Christine Lagarde, para pedirle su respaldo. Macri dijo que su pa¨ªs necesita el dinero, aunque no ha dicho cu¨¢nto pedir¨¢, para superar un contexto internacional "que es cada d¨ªa m¨¢s complejo", con tasas de inter¨¦s m¨¢s altas. El martes, el peso argentino se depreci¨® m¨¢s de 5% frente al d¨®lar, en un contexto internacional de fuerte presi¨®n sobre las monedas de las econom¨ªas emergentes. "Somos de los pa¨ªses del mundo que m¨¢s necesitamos del financiamiento internacional producto del enorme gasto p¨²blico que heredamos", dijo Macri.?

El pedido de ayuda al FMI es la historia de un fracaso. Y supone el pago de un alt¨ªsimo costo pol¨ªtico para Macri, al frente de un pa¨ªs que durante a?os acus¨® al Fondo de estar detr¨¢s de ajustes salvajes y grandes crisis econ¨®micas. Pero Macri no tuvo otro remedio, tanto que decidi¨® asumir ¨¦l mismo la responsabilidad del anuncio. En un contexto hostil para las monedas de la regi¨®n, el peso argentino puso en evidencia su vulnerabilidad. La divisa alcanz¨® los 23,50 pesos a media ma?ana, pese a las medidas extraordinarias para evitarlo.?Durante la ¨²ltima semana, el banco central subi¨® de 32,25% a 40% las tasas de inter¨¦s, en un intento por desalentar a los inversores que hu¨ªan a toda velocidad del peso y se volcaban a la moneda norteamericana. La decisi¨®n calm¨® a los mercados, pero la primavera dur¨® solo hasta hoy. La Bolsa acompa?¨® el mal clima con una ca¨ªda de casi 5% a mitad de la rueda.

Argentina tiene una econom¨ªa vulnerable a los ruidos externos. En su mensaje, Macri describi¨® con claridad el origen de los problemas."Implementamos una pol¨ªtica econ¨®mica gradualista que resuelva el desastre que nos dejaron en las cuenta p¨²blicas. Eso depende del financiamiento externo y durante los ¨²ltimos dos a?os hemos contado con un contexto favorable. Pero esto est¨¢ cambiando por distintos factores: suben las tasas de inter¨¦s, sube el crudo, se han devaluado las monedas emergentes", dijo.?

El d¨¦ficit es la pata coja del modelo. El Gobierno anunci¨® la semana pasada que recortar¨¢ unos 3.000 millones de d¨®lares del gasto p¨²blico y reducir¨¢ as¨ª la dependencia del Estado al dinero externo. Pero nada de eso fue suficiente. Los inversores ya no conf¨ªan en la econom¨ªa argentina, pese al apoyo internacional que ha merecido Macri desde que lleg¨® al poder. Mientras el d¨®lar subi¨® 5,3% en Buenos Aires, Colombia depreci¨® su moneda 1,4%, Chile 1,3% y Brasil 0,8%. Sostener el peso le cost¨® al Banco Central argentino m¨¢s de 5.000 millones de d¨®lares desde el viernes de la semana pasada.

La estrategia de resistencia del peso puede tener ahora graves consecuencias para la econom¨ªa, en momentos en que intenta frenar una inflaci¨®n que se prev¨¦ del 20% para 2018, la segunda m¨¢s alta de la regi¨®n despu¨¦s de Venezuela. Urgida de fondos frescos, y ante la estampida de los inversores, Macri volver¨¢ al FMI. Las conversaciones, dijo, "arrancar¨¢n hoy mismo". "Esto nos dar¨¢ mayor respaldo para enfrentar este nuevo escenario. Tom¨¦ esta decisi¨®n pensando en el mejor inter¨¦s del pueblo argentino, no minti¨¦ndole, como tantas veces se ha hecho".?

Horas despu¨¦s, Lagarde emiti¨® un comunicado en el que confirma el inicio de las negociaciones con Argentina, sin dar detalles: "Argentina es un valioso miembro del Fondo Monetario Internacional. Agradezco la declaraci¨®n que el presidente Macri hizo hoy y espero con inter¨¦s continuar nuestra colaboraci¨®n con Argentina. Se han iniciado discusiones sobre c¨®mo podemos trabajar juntos para fortalecer la econom¨ªa argentina y llevaremos estas conversaciones a cabo en breve".

El FMI, una historia de desencuentros

La primera vez que Argentina recibi¨® dinero del FMI fue en en 1957, cuando la los militares que hab¨ªan derrocado a Juan Per¨®n pidieron 75 millones de d¨®lares. La ¨²ltima en enero y septiembre de 2003, por 10.000 millones de d¨®lares. La relaci¨®n termin¨® en? 2006, cuando el presidente N¨¦stor Kirchner cancel¨® el total de la deuda. Fue una decisi¨®n econ¨®mica, pero sobre todo pol¨ªtica. Para muchos argentinos, el FMI era y es sin¨®nimo de ajuste y su papel en la debacle de 2001, donde retir¨® el financiamiento al gobierno de Fernando de la R¨²a, fue cuestionado incluso fuera del pa¨ªs sudamericano.

Las cr¨ªticas al FMI fueron una de las principales banderas del kirchnerismo, en l¨ªnea con los gobiernos regionales de izquierda que marcaron la pol¨ªtica sudamericana durante los ¨²ltimos 15 a?os. Pero el pago al FMI no fue una ruptura, porque Argentina nunca se sali¨® de ¨¦l. Le permiti¨®, sin embargo, rechazar las visitas t¨¦cnicas de evaluaci¨®n a las que el Organismo obliga a sus socios. Era una ¨¦poca en que el viento de cola acompa?aba a las econom¨ªas emergentes, con precios r¨¦cord en las materias primas y tasas cercanas a cero. Argentina se financi¨® durante todo ese tiempo con deuda interna, en pesos. Pero eso cambi¨® con la llegada de Macri. La exposici¨®n en d¨®lares de la deuda argentina es enorme, mucho mayor que la de otros pa¨ªses emergentes. Entre 2016 y 2017, el Gobierno emiti¨® t¨ªtulos por 59.000 millones de d¨®lares, casi el doble que Arabia Saudita, el segundo en el podio, y el triple que el tercero, Indonesia.?

Lagarde estuvo en marzo pasado en Argentina, en el marco de la cumbre de ministros de Finanzas del G20. Trajo como mensaje que el FMI hab¨ªa cambiado, atenta a las consecuencias sociales de sus recomendaciones macroecon¨®micas. "En ocasiones fuimos demasiado a fondo y demasiado r¨¢pido para que la sociedad lo asumiera. Y adem¨¢s ya hemos analizado que subestimamos el impacto de los multiplicadores", dijo en una entrevista a EL PA?S realizada en Buenos Aires.

Lagarde aprovech¨® su viaje a Argentina, el primero de un alto ejecutivo del FMI en 11 a?os, para apoyar la pol¨ªtica de "gradualismo" aplicada por Macri. En ese momento no se habl¨® de apoyo financiero, pero la buena sinton¨ªa fue evidente. "Es un FMI muy distinto del de hace 20 a?os. Ha aprendido de las lecciones del pasado, y ha apoyado el programa gradual de Argentina. Estoy seguro que podremos acordar un programa que apoye nuestro rumbo", dijo el ministro de Hacienda, Nicol¨¢s Dujovne. Fue un intento por aplacar la tormenta pol¨ªtica que se avecina.