El porvenir de Colosio sigue sin llegar a Lomas Taurinas
El barrio donde el excandidato presidencial del PRI Luis Donaldo Colosio fue asesinado contin¨²a albergando rezago y pobreza. El debate del domingo se celebra a tres kil¨®metros de all¨ª
El barrio de Lomas Taurinas cambi¨® para siempre la historia de M¨¦xico el 23 de marzo de 1994. En sus calles de tierra fue asesinado el candidato del PRI a la presidencia Luis Donaldo Colosio. Antes del magnicidio, esta barranca ¨Cal este de la ciudad de Tijuana?¨C era el lugar donde cientos de vecinos de la urbe fronteriza se instalaron ante el rezago y la pobreza que vivi¨® la regi¨®n en la d¨¦cada de los a?os 90. Veinticuatro a?os despu¨¦s de la desaparici¨®n de Colosio, Lomas Taurinas se muestra como una postal de M¨¦xico: con la misma necesidad de oportunidades para el futuro de sus habitantes.
A tres kil¨®metros de all¨ª, los cuatro candidatos presidenciales de 2018 debatir¨¢n sobre el mismo porvenir del que Colosio habl¨® esa tarde de marzo antes cientos de personas que acudieron a escucharle. Yolanda L¨¢zaro fue una de ellas. ¡°El se?or Colosio era una persona muy amable y muy sencilla¡±, recuerda. L¨¢zaro, de 58 a?os y priista de toda la vida, baja de su coche tras volver del aeropuerto donde se uni¨® al grupo local del PRI que recibi¨® al candidato Jos¨¦ Antonio Meade a su llegada a Tijuana, 48 horas antes del debate de este domingo.
En la intersecci¨®n de las calles Mariano Arista y Adolfo L¨®pez Mateos quedan los recuerdos del ¨²ltimo mitin de Colosio. Una estatua monumental del priista y una barda pintada solo con su nombre con enormes letras negras. Nadie se ha atrevido a borrar el apellido y el barrio lo conserva como un recuerdo sagrado. L¨¢zaro, como l¨ªder del PRI en la colonia, hab¨ªa tenido la oportunidad de estar cerca de ¨¦l durante esa tarde. Caminaba unos pasos detr¨¢s de ¨¦l por las calles empinadas y sin pavimentar de Lomas Taurinas, cuando el asesino Mario Aburto sac¨® el arma y dispar¨® dos veces contra el candidato priista. ¡°Se vio como un flashazo, al principio no pens¨¦ en un disparo hasta que todo el mundo empez¨® a correr y vi c¨®mo el se?or Colosio ca¨ªa al suelo¡±, cuenta.
Tras el magnicidio, Lomas Taurinas se volvi¨® el epicentro de M¨¦xico. La sacudida de la vida pol¨ªtica del pa¨ªs hab¨ªa ocurrido all¨ª. Uno de los barrios m¨¢s pobres de Tijuana se inund¨® de periodistas, pol¨ªticos, polic¨ªas e investigadores. Las calles principales fueron pavimentadas, el campo de f¨²tbol llanero donde el pol¨ªtico reuni¨® a cientos de vecinos se convirti¨® en un parque y un centro comunitario con el nombre de su esposa Diana Laura Riojas, adem¨¢s el canal de aguas negras al fondo de la barranca fue encausado. ¡°Aqu¨ª vienen todos los pol¨ªticos a hacer promesas, es para lo ¨²nico que sirve el parque¡±, dice Roberto Hern¨¢ndez, un mec¨¢nico de 71 a?os.
Hern¨¢ndez explica que aunque el barrio recibi¨® atenci¨®n en el primer a?o tras el asesinato, poco a poco fue olvidado y le sigui¨® una ¨¦poca llena de violencia y atracos. Lomas Taurinas est¨¢ ubicado a espaldas del aeropuerto de Tijuana, sumergido en una barranca que simula a una olla. En los bordes las sencillas casas han rellenado las laderas, algunas tienen cimientos elaborados con neum¨¢ticos rellenos de hormig¨®n, otros vecinos con m¨¢s recursos han hecho construcciones simulares a las casas de estilo californiano ¨Cde madera y con ca¨ªda de dos aguas en el techo¨C. ¡°Ahora han bajado un poco los atracos pero yo creo que es porque ya no queda nada que robar¡±, apunta el vecino. Algunos coches desvencijados llenan las calles y los ni?os se re¨²nen en una cancha de baloncesto que tambi¨¦n se construy¨® despu¨¦s del magnicidio.
Las preferencias pol¨ªticas de los vecinos se dividen entre el PRI y el PAN ¨Ceste ¨²ltimo, gobierna la regi¨®n desde hace varios a?os¨C y casi no hay indicios de que alguien se decante por las formaciones pol¨ªticas de izquierda. ¡°Esta campa?a es muy rara, hay muchos ataques y pocas propuestas, hay incitaci¨®n a la violencia. Es una verg¨¹enza que la gente cambie su credencial por una despensa¡±, dice la vecina L¨¢zaro, quien acudir¨¢ este domingo a la Universidad Aut¨®noma de Baja California a respaldar al actual candidato del PRI, como hizo en 1994 en su barrio.
El inter¨¦s por el debate presidencial, que por primera vez se celebra en otra urbe distinta a Ciudad de M¨¦xico, no llama demasiado la atenci¨®n de quienes viven en Lomas Taurinas. Algunos vecinos tampoco quieren saber nada de pol¨ªtica, ni de promesas que saben que no llegar¨¢n a este rinc¨®n al lado de la frontera con EE UU o del recuerdo del asesinato que cambi¨® a M¨¦xico hace 24 a?os. Hern¨¢ndez est¨¢ desesperanzado por el futuro de sus nietos y L¨¢zaro tiene nostalgia del PRI del siglo XX. Ambos coinciden en que, como Colosio dec¨ªa en su campa?a, todav¨ªa hay ¡°un M¨¦xico con sed y hambre de justicia¡±.
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