Pegida no consigue asar un cerdo frente a una mezquita turca en R¨®terdam

Pegida (Patriotas Europeos contra la Islamizaci¨®n de Occidente) no consigui¨® este jueves asar un cerdo frente a la mezquita turca Laleli, de la ciudad holandesa de R¨®terdam. El grupo de extrema derecha hab¨ªa convocado por Facebook a sus simpatizantes, para que se pronunciaran ¡°contra de la islamizaci¨®n de Holanda¡±. Deb¨ªan reunirse all¨ª hacia las 20:30 horas, poco antes de que los musulmanes concluyeran el ayuno del Ramad¨¢n. A la vista de que la plaza del templo se llenaba de centenares de personas contrarias a la barbacoa, el autocar que llevaba a los miembros de Pegida, unos 30, ni siquiera lleg¨®. Sus ocupantes aseguran que la polic¨ªa no pod¨ªa garantizar su seguridad. El Ayuntamiento dice que ellos mismos decidieron retirarse.

Tras el fiasco, Edwin Wagensveld, portavoz de Pegida, explic¨® que a unos 200 metros de la mezquita: ¡°Hablamos con los agentes y el asesor de seguridad del Consistorio, y analizamos juntos la situaci¨®n¡±, dijo. ¡°Cuando nos dijeron que era imposible preservar nuestra protecci¨®n, desistimos. Eso era esencial. La carne est¨¢ intacta y nos la comeremos, seguro. Hemos demostrado lo que ocurre en Holanda, y el peligro corrido por la libertad de expresi¨®n por culpa de estos j¨®venes de origen inmigrante. Nosotros nos hemos comportado¡±, a?adi¨®.

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Ahmed Aboutaleb, alcalde socialdem¨®crata de R¨®terdam, de origen marroqu¨ª, autoriz¨® la barbacoa en nombre de la libertad de expresi¨®n. En su opini¨®n, ambos son fundamentales, y las autoridades locales se ocupan de mantener el orden y la protecci¨®n ciudadanas. ¡°Si las cosas cambian, y consideramos que la situaci¨®n se tensa, actuaremos en consecuencia¡±, dijo, horas antes de la cita. As¨ª fue. La entrada de la mezquita Laleli tiene una peque?a plaza vallada, y los alrededores se llenaron de gente ofendida y poco dispuesta a moverse de all¨ª. Eran ¡°unos doscientos¡±, seg¨²n fuentes policiales, y hab¨ªa banderas de Holanda, Marruecos y Turqu¨ªa. Cuando el bus no lleg¨®, se oyeron gritos contra el alcalde por haber permitido el encuentro.

El ministro turco de Asuntos Europeos, Om?r ?elik, llevaba dos d¨ªas criticando con dureza a Aboutaleb. ¡°Se equivoca al pensar que Pegida no vulnera la ley con este acto inmoral; qu¨¦ tragedia¡±, se?al¨®, desde Ankara. Los alcaldes de La Haya, Utrecht, Gouda, y Arnhem no dejaron que hubiera concentraciones similares frente a las mezquitas urbanas. Pegida s¨ª pod¨ªa manifestarse en otros lugares.

Durante toda la tarde del jueves, numerosos vecinos de R¨®terdam se acercaron a llenar de flores la reja del templo en se?al ¡°de paz¡±. ?elik hab¨ªa pedido a las organizaciones musulmanas que levantaran ¡°un muro de amor contra el hedor del odio¡±. En el suelo, varias personas pintaron corazones con tiza de color rosa. Algunos j¨®venes bromearon con el hecho de que el iftar (comidan nocturna que rompe el ayuno) estaba listo en sus casas. A las 22:00 ya podr¨ªan comer ¡°toda la carne que queramos¡±, recordaban. Ziyaettin K?m¨¹rc, miembro de la direcci¨®n de Laleli, admiti¨® que durante el Ramad¨¢n ¡°la gente est¨¢ m¨¢s susceptible, pero todo el mundo sabe que los musulmanes no consumimos cerdo¡±.

No es la primera vez que Turqu¨ªa critica al alcalde holand¨¦s Aboutaleb. En 2017, el ejecutivo holand¨¦s no permiti¨® que el ministro de Exteriores turco, Mevlut ?avusoglu hiciera campa?a pol¨ªtica en favor del presidente Recep Tayyip Erdogan. Cuando su colega de Familia, Fatma Betul Sayan Kaya, viaj¨® en coche desde Alemania para sustituirle, fue retenida al llegar a R¨®terdam. La polic¨ªa holandesa la escolt¨® luego fuera del pa¨ªs. Aboutaleb compareci¨® entonces ante la prensa asegurando que hab¨ªa sido ¡°enga?ado por el c¨®nsul turco¡±. A?adi¨® que se hab¨ªa ¡°convocado a la gente diciendo que la ministra les hablar¨ªa, cuando el c¨®nsul me asegur¨® que no acudir¨ªa nadie¡±. El roce diplom¨¢tico acab¨® en choque frontal, insultos incluidos. Erdogan calific¨® a Holanda de ¡°nazi y fascista¡±. Aboutaleb fue tajante. ¡°Sepa que soy alcalde de una ciudad bombardeada por los nazis¡±, replic¨®.