La brecha entre Trump y los pa¨ªses del G7 se agrava tras una cumbre crispada por el comercio
El presidente de EE UU se desmarca del comunicado en el ¨²ltimo momento enfadado por las cr¨ªticas de Trudeau. ¡°Somos la hucha de la que todo el mundo roba¡±, afirma el neoyorquino
La cumbre del G7 finaliz¨® en llamas este s¨¢bado en Canad¨¢. El grupo de pa¨ªses m¨¢s industrializados anunci¨® que hab¨ªa consensuado un comunicado conjunto para tratar de evitar una escalada proteccionista, tras dos d¨ªas de reuniones muy dif¨ªciles por el giro aislacionista de EE UU. La tensi¨®n estall¨® poco despu¨¦s. El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, critic¨® la pol¨ªtica de Trump en su rueda de prensa de clausura y el presidente se revolvi¨® v¨ªa Twitter poco despu¨¦s. Fiel a su talante volc¨¢nico, imprevisible, anunci¨® que hab¨ªa ordenado a sus representantes que no suscribieran el texto conjunto.
"Sobre la base de las falsas declaraciones de Justin en su rueda de prensa, y el hecho de que Canad¨¢ est¨¢ gravando con aranceles masivos a nuestros ganaderos, trabajadores y empresas, he instruido a nuestros representantes para que no apoyen el comunicado mientras miramos los aranceles sobre los autom¨®viles que entran en el mercado estadounidense", escribi¨® Trump en su cuenta de la red social horas despu¨¦s de abandonar el encuentro.
La cumbre fracas¨® estrepitosamente en el objetivo de rebajar las tensiones, empezando como empez¨® ya crispada, con reproches p¨²blicos de Trump a la Uni¨®n Europea y a Trudeau, y la r¨¦plica de Macron, que advirti¨® al neoyorquino que nadie es eterno y que el mercado de los seis pa¨ªses restantes superaba al EE UU.
Aun as¨ª, contra pron¨®stico, este s¨¢bado EE UU, Canad¨¢, Reino Unido, Francia, Alemania, Italia y Jap¨®n hab¨ªan sido te¨®ricamente capaces de consensuar un comunicado en el que acuerdan reducir aranceles y subsidios, de forma gen¨¦rica, y se compromet¨ªan a modernizar la Organizaci¨®n Mundial del Comercio (OMC), organismo que Estados Unidos ayud¨® a crear en 1995 pero que el nuevo orden de Washington critica con dureza. Tanto Macron como Trudeau afirmaron que el consenso inclu¨ªa a la Administraci¨®n de Trump. El texto recoge alguna demanda estadounidense, como el calificativo de "rec¨ªproco" para el libre comercio, adem¨¢s de "equitativo".
Fractura en el bloque occidental
La reuni¨®n del G7 ha mostrado la creciente fractura en el bloque occidental. El anta?o l¨ªder de este grupo, Estados Unidos, lleg¨® ya distanciado del resto de socios por su ruptura unilateral del pacto nuclear con Ir¨¢n, el adi¨®s al Acuerdo de Par¨ªs contra el calentamiento global y las crecientes tensiones comerciales.
El primer d¨ªa Donald Trump a?adi¨® otro frente m¨¢s al salir en defensa del regreso de Rusia al grupo, que fue expulsada en 2014 por la anexi¨®n ilegal de Crimea en el marco de la crisis de Ucrania. Que solo le apoyase el nuevo Gobierno populista de Italia refleja que las turbulencias entre aliados van m¨¢s all¨¢ de la era Trump. Preguntado sobre Crimea, el neoyorquino no dej¨® lugar a dudas: Barack Obama. ¡°?l dej¨® que ocurriera¡±, sentenci¨®.
Pero en la rueda de prensa de clausura, Trudeau expres¨® su enfado con el presidente estadounidense y el magnate neoyorquino estall¨®. "Los canadienses somos amables y razonables, pero no nos van a avasallar", hab¨ªa enfatizado Trudeau. De nuevo, el primer ministro canadiense calific¨® de "insultante" que Washington haya usado el argumento de la seguridad nacional para subir los aranceles a sus productos, teniendo en cuenta, resalt¨®, que soldados de ambos pa¨ªses "han luchado hombro con hombro en tierras lejanas en conflicto desde la Primera Guerra Mundial".
Trump acus¨® al primer ministro canadiense de haberse comportado de forma "d¨®cil" y "suave" en las reuniones, para luego "dar una rueda de prensa despu¨¦s de que me haya ido diciendo que 'los aranceles de EE UU son algo insultante' y que no se dejar¨¢ 'avasallar'. Muy deshonesto y d¨¦bil. ?Nuestros aranceles son una respuesta a sus tasas del 270% sobre los l¨¢cteos!", exclam¨®.
El paso de Trump por Quebec fue turbulento y ciclot¨ªmico. Lleg¨® tarde, se fue pronto, y durante su estancia combin¨® los elogios con amenazas de ruptura y frases gruesas, marca de la casa. ¡°Somos la hucha de la que todo el mundo roba¡±, lament¨® en una comparecencia ante la prensa, justo antes de abandonar la cita.
EE UU no suscribi¨® las referencias del texto a la lucha contra el cambio clim¨¢tico, como ya ocurri¨® en la ¨²ltima cumbre, pues apeado como est¨¢ del Acuerdo de Par¨ªs. Pero el principal caballo de batalla ahora es el comercio. Trump ha declarado la guerra al d¨¦ficit comercial. EE UU, la primera potencia econ¨®mica mundial, importa de otros pa¨ªses mucho de m¨¢s de lo que exporta, y este desequilibrio, que sum¨® 556.000 millones de d¨®lares (472.500 millones de euros) el a?o pasado, ha sido su fijaci¨®n desde que comenz¨® su andadura hacia la Casa Blanca. Lo atribuye a unos acuerdos comerciales injustos y les culpa de la p¨¦rdida de empuje fabril de la econom¨ªa. En este contexto, el pasado junio activ¨® unos aranceles al acero (25%) y al aluminio (10%) procedente de Canad¨¢, M¨¦xico y la UE. Los afectados respondieron con represalias equivalentes, alimentando una escalada de tensi¨®n diplom¨¢tica que ha marcado esta cita.
El viernes sorprendi¨® poniendo sobre la mesa la posibilidad de crear un espacio comercial com¨²n. ¡°Ni aranceles ni barreras, as¨ª es como deber¨ªa ser. Y sin subsidios¡±, resumi¨® este s¨¢bado, sin quedar muy claro si se trataba de una posici¨®n meditada, un ¨®rdago o una ocurrencia. Trump asegur¨® que ¡°la relaci¨®n con Angela [Merkel] y Emmanuel [Macron] es de 10¡±. ¡°No les culpo a ellos, sino a mis predecesores, no solo Barack Obama, esto lleva 50 a?os¡±, asegur¨®, pero resalt¨® que tendr¨¢ que haber cambios en material comercial. ¡°No tienen elecci¨®n, deben hacerlo¡±, recalc¨®, porque, de otro modo, ¡°no comerciaremos¡±. Acto seguido, puso como ejemplo al sector l¨¢cteo de Canad¨¢ y critic¨® el gravamen del 270% que su vecino del norte aplica a la leche de EE UU.
La Administraci¨®n de Trump ha abierto tres frentes comerciales a un tiempo: uno con Pek¨ªn, otro con la UE y el del Tratado de Libre Comercio de Am¨¦rica del Norte (TLC) con Canad¨¢ y M¨¦xico. China supone el grueso del desequilibrio comercial estadounidense (375.000 millones de d¨®lares), seguida de Europa (151.000 millones), pero Washington no ha distinguido entre rivales y aliados.
Fuentes del Gobierno franc¨¦s citadas por Bloomberg se?alaron que las conversaciones entre europeos y estadounidenses podr¨ªan retomarse en los pr¨®ximos d¨ªas. La canciller Merkel ha propuesto la creaci¨®n de un mecanismo de evaluaci¨®n para canalizar las negociaciones comerciales con la primera potencia.
Su l¨ªder se ausent¨® antes de tiempo. Trump hab¨ªa decidido acortar su estancia arguyendo la necesidad de preparar su hist¨®rica cumbre con el l¨ªder norcoreano Kim Jong-un, con quien espera pactar la desnuclearizaci¨®n de la pen¨ªnsula. ?Cu¨¢nto le llevar¨¢ saber si ese compromiso es cre¨ªble?, le pregunt¨® un periodista. ¡°Lo sabr¨¦ en el primer minuto¡±, respondi¨®. ¡°Es mi toque, mi sensaci¨®n, es lo que hago¡±. Y parti¨® rumbo a Singapur.
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