Condena in¨¦dita en Argentina por el travesticidio de la activista Diana Sacay¨¢n
Por primera vez la Justicia contempla un homicidio "calificado por odio a la identidad de g¨¦nero" y sentencia a perpetua al asesino, Gabriel Marino
A Diana Sacay¨¢n la mataron de 13 pu?aladas por travesti. As¨ª lo entendi¨® el Tribunal Oral 4 de Buenos Aires en una sentencia in¨¦dita en la que conden¨® a cadena perpetua a Gabriel Marino por "homicidio calificado por odio de g¨¦nero". Por primera vez, la Justicia argentina reconoci¨® que el asesinato de esta l¨ªder del movimiento LGBTIQ fue "un crimen de odio a la identidad travesti". La abarrotada sala de audiencias estall¨® en aplausos que obligaron a interrumpir moment¨¢neamente la lectura de la sentencia. Fuera de all¨ª, las decenas de compa?eras, amigos y activistas que segu¨ªan el veredicto desde el pasillo, a trav¨¦s de una pantalla gigante, convirtieron el sexto piso del Palacio de Tribunales en una fiesta.
"Ella se lo merec¨ªa. Por suerte y por fin pudimos hacerlo. Por primera vez en la historia la Justicia se pronunci¨® sobre un travesticidio. Diana, a¨²n no estando f¨ªsicamente, sigue haciendo aportes que van a cambiar la historia de nuestro pa¨ªs", dice a EL PA?S su hermano, Sasha Sacay¨¢n, minutos despu¨¦s de escuchar la sentencia desde la primera fila. Diana Sacay¨¢n fue una de las principales defensoras de la Ley de Identidad de g¨¦nero que Argentina aprob¨® en 2012, siendo pionera en Am¨¦rica Latina. Fue tambi¨¦n la promotora de la ley de cupo laboral trans y una de las primeras en recibir un DNI con su g¨¦nero y nombre modificados de manos de la expresidenta Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner.
Su asesinato conmocion¨® a la comunidad LGBTIQ. El 11 de octubre de 2015 Sacay¨¢n fue hallada muerta en su casa del barrio porte?o de Flores. La maniataron, la acuchillaron y despu¨¦s la taparon con un colch¨®n. Fue asesinada "con ferocidad", seg¨²n el perito que realiz¨® la autopsia. Gabriel Marino, de 25 a?os, lleg¨® al juicio acusado por "homicidio triplemente agravado por haber sido ejecutado mediando violencia de g¨¦nero, por odio a la identidad de g¨¦nero y con alevos¨ªa, en concurso ideal por robo". Los jueces consideraron probada su participaci¨®n en el asesinato, que perpetr¨® con 23 a?os. La investigaci¨®n sigue abierta porque los investigadores sospechan de una segunda persona, que a¨²n no ha sido llevada a juicio.?
103 cr¨ªmenes de odio
En 2017, el Observatorio Nacional de Cr¨ªmenes de Odio LGBT registr¨® 103 cr¨ªmenes de odio por orientaci¨®n sexual e identidad de g¨¦nero en Argentina. El 61% de los casos de violencia tienen como v¨ªctimas a la poblaci¨®n trans (travestis, transexuales y transg¨¦nero). "Los datos ¨²nicamente permiten vislumbrar una realidad que es, sin duda, mucho peor de lo que sugieren los n¨²meros", se?ala el informe. Las cifras surgen de los medios de comunicaci¨®n y denuncias ante organismos del colectivo.
"Me liber¨® un poco todo el enojo, toda la angustia y el dolor que sent¨ª durante estos dos a?os y medio", dice Sasha Sacay¨¢n entre abrazo y abrazo. "Cost¨® mucho y fue muy doloroso este tiempo porque nos abocamos en el juicio, no tuvimos tiempo ni para el proceso de duelo", contin¨²a.
La sentencia es un exponente m¨¢s de los cambios en marcha en Argentina. En 2015, Argentina vio nacer al movimiento Ni Una Menos contra la violencia machista, que se extendi¨® con rapidez por gran parte de Latinoam¨¦rica. En las ¨²ltimas semanas, una multitudinaria marea verde ha tomado las calles para exigir la legalizaci¨®n del aborto, que tiene ya media sanci¨®n en la C¨¢mara de Diputados. Hoy, la condena a perpetua por un crimen de odio ejemplifica tambi¨¦n los? avances en el reconocimiento de los derechos de personas trans. Hasta hace pocos a?os, la mayor¨ªa no terminaba sus estudios y era expulsada del hogar. Ante la dificultad para conseguir un trabajo, muchas optaban por la prostituci¨®n.?
Diana Sacay¨¢n naci¨® en Tucum¨¢n el 31 de diciembre de 1975 en un hogar con 15 hermanos. La familia se mud¨® a La Matanza, en la periferia bonaerense, cuando ella era una ni?a. Asumi¨® su identidad trans a los 17 a?os y fue detenida en numerosas ocasiones durante su adolescencia por el c¨®digo de faltas bonaerense, que criminalizaba el travestismo. "Al calabozo no volvemos nunca m¨¢s", cantaban hoy, euf¨®ricas, militantes trans en los pasillos del Palacio de Tribunales.
Cuando Diana fue asesinada ten¨ªa 39 a?os. El promedio de vida del colectivo trans en Am¨¦rica Latina es de 35. A lo largo de las 12 audiencias del juicio, numerosos testigos hicieron hincapi¨¦ en la persecuci¨®n y estigmatizaci¨®n que sufren travestis y transexuales. Con la legislaci¨®n a favor, ha mejorado su aceptaci¨®n social, pero a¨²n son discriminados en escuelas, hospitales y lugares de trabajo. Tampoco ha cesado la violencia f¨ªsica contra ellas.
"El juicio a Diana ha sido un juicio a todas las travas. Y es s¨®lo el comienzo. Que la justicia empiece a condenar cr¨ªmenes de odio, que empiece a hablar de travesticidios, de las condiciones en las que vivimos, del sistema prostituyente que nos mata y nos condena es muy, muy emocionante", se?ala la activista travesti Florencia Guimaraes al t¨¦rmino del juicio.
En 2001 Diana Sacay¨¢n cre¨® el Movimiento Antidiscriminatorio de Liberaci¨®n (M.A.L), una organizaci¨®n dedicada a promover la inclusi¨®n educativa, laboral y sanitaria de las personas LGBTIQ. Un mes antes de su asesinato, en septiembre de 2015, vio como el proyecto de cupo laboral que redact¨® y present¨® tres veces a la Legislatura bonaerense era finalmente aprobado. La conocida como Ley Diana Sacay¨¢n establece que al menos el 1% de los puestos de trabajo del sector p¨²blico deben estar ocupados por "personas travestis, transexuales y transg¨¦nero que re¨²nan las condiciones de idoneidad para el cargo". Sus herederas exigen que esa ley se cumpla a nivel nacional.
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