Matteo Salvini, contra su pasado
El l¨ªder de la Liga quiere vencer a las ¨¦lites de Europa en las elecciones de 2019. El encuentro anual del partido en Pontida certifica su cambio de rumbo hacia un trumpismo mediterr¨¢neo
![Matteo Salvini se dirige a su p¨²blico, este domingo en Pontida.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/ZMWHR2DI4RP67WYAOKIOYORFNA.jpg?auth=8e26e33442952a3794179a21cfe66add978fb22fa3d054e920d7aabaa56043aa&width=414)
![Daniel Verd¨²](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/https%3A%2F%2Fauthor-service-images-prod-us-east-1.publishing.aws.arc.pub%2Fprisa%2Fe754d022-18a1-44ce-a528-105a01f36f2f.jpg?auth=dcb863cacfc0bb32942db2b658618b2a27252ccfa1bd13aa2a00df339401e234&width=100&height=100&smart=true)
Un desangelado descampado junto a la carretera nacional 342 de B¨¦rgamo sintetiza la mitolog¨ªa heroica de la Liga de Matteo Salvini. Pontida, un peque?o pueblo de 3.230 habitantes en el Bergamasco, es el lugar donde supuestamente se celebr¨® el 7 de abril de 1167 el juramento de la Liga Lombarda, un ej¨¦rcito capaz de enfrentarse y derrotar al invasor Federico I Barbarroja. No hay una sola prueba de ello. Pero en 1990 el partido proclam¨® oficialmente este solar como su ¡°prado sagrado¡±. Aqu¨ª se iz¨® la bandera de la Padania, otro territorio ficticio sobre el que Umberto Bossi ¡ªfundador del partido, condenado por robarle a su propia criatura¡ª proclam¨® una falsa independencia. Fue mucho antes de que la Liga Norte se despojase de su apellido, se convirtiera en un artefacto nacional y alertase de otra invasi¨®n sin que cuadrasen los datos. Viejos nuevos tiempos. Sucedi¨® hace solo un par de a?os.
Pontida, donde este domingo se juntaron 75.000 militantes, es la prueba del algod¨®n. Aqu¨ª la Liga Norte, en medio del olor a polenta, cerveza y chuletas de cerdo cant¨® contra el sur, contra N¨¢poles, contra el Mediterr¨¢neo. La escoria se encontraba bajo esa serpenteante l¨ªnea que trazaba el r¨ªo Po, la frontera imaginaria de la Padania. El propio Salvini, que entonces era comunista, core¨® aquello de ¡°Roma ladrona¡± y bram¨® lo de ¡°ya huele, llegan napolitanos¡±. No hay un lugar que recuerde m¨¢s a los militantes que ellos no son la ¡°mierda del sur¡± de la que siempre se distinguieron: los despreciables terroni. ¡°En el norte han entendido que nos necesitan¡±, se reconforta Paolo, napolitano del barrio de Forcella, con dos cervezas en la mano en la zona de caravanas y tiendas de campa?a. Junto a ¨¦l han llegado otros 300 paisanos unidos por la causa contra la ¡°invasi¨®n de inmigrantes¡±. Un formidable pegamento para la hist¨®rica brecha entre el norte y el sur. Nada menos que un bot¨ªn de 140.000 votos del sur en las pasadas elecciones generales.
La rave de Pontida, con una dosis de excentricidades considerable y un presentador que fue ultra del Atalanta y hoy es diputado (Daniele Bellotti), es un punto de inflexi¨®n. Cuando Salvini cogi¨® las riendas del partido, la formaci¨®n no superaba el 5% de los votos y estaba al borde del derribo. Ahora le reciben con un tenor cantando el aria Nessun Dorma del Turandot de Puccini, y un v¨ªdeo que recuerda como su gran haza?a que no dej¨® entrar al Aquarius, el barco con 629 migrantes que termin¨® atracando en Valencia. Habla durante una hora. Chistes sobre la izquierda, repaso al programa y oraci¨®n a ritmo de gaitas por Gianluca Buonanno, un eurodiputado muerto en un accidente de tr¨¢fico. Poco m¨¢s del pasado. Ni de las viejas glorias. ¡°El mundo es el que ha cambiado, no la Liga¡±, lanza al final de su intervenci¨®n, con un rosario en la mano, para justificar el tremendo viraje. Y tanto. Su partido ahora gobierna, se ha adue?ado de la bandera tricolor ¡ªque siempre despreci¨®¡ª y apela al sentido com¨²n. ¡°Primero los italianos¡±, puede leerse bien grande en la entrada del recinto.
Pontida siempre midi¨® las fuerzas de un partido residual, los b¨¢rbaros del norte. Hoy har¨ªan falta 20 descampados como este para descifrar su ¨¦xito. La ¨²ltima encuesta, publicada el s¨¢bado por el Corriere della Sera le da ya casi un 31% de los votos, 14 puntos m¨¢s de lo que obtuvo el 4 de marzo, suficiente para certificar el sorpasso al Movimiento 5 Estrellas, su socio de gobierno. De modo que la Liga, como se encargaron de recordar todos los ministros que subieron al escenario, ya no es un reducto de frikis disfrazados de vikingo (aunque este domingo no faltasen). Es el partido con m¨¢s apoyo de Italia, un proyecto trumpista?con aroma mediterr¨¢neo que planifica ya su expansi¨®n por Europa. ¡°Pienso en una Liga de ligas en Europa que incluya a todos los movimientos libres y soberanos que quieran defender sus propias fronteras y el bienestar de sus hijos¡±, ha se?alado mientras saludaba las banderas independentistas de Catalu?a en la primera fila y de Rusia. ¡°Visitar¨¦ las capitales, no s¨®lo las europeas, para crear una alternativa a esta Europa fundada sobre la explotaci¨®n, las finanzas y la inmigraci¨®n en masa¡±, anunci¨®.
![Unos 75.000 seguidores de la Liga asistieron al encuentro de Pontida.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/TTT2QQ3W64SCO6EVQ7NDVUADEI.jpg?auth=57659600242c84d8c0671cab87340dc60a757348efbb24720e7b487470d6a087&width=414)
Salvini, selfie mediante, cit¨® a todos los enemigos: Bruselas, George Soros, Saviano ¡ª¡°un antimafia de boquilla¡±¡ª, la izquierda radical chic, Matteo Renzi. B¨¢sico y efectivo. Como el nuevo ministro de Agricultura, Gian Marco Centinaio: ¡°Los productos italianos son los mejores. No esa basura que provoca c¨¢ncer que nos mandan de fuera¡±. O el discurso del ministro de Familia, el hom¨®fobo Lorenzo Fontana: ¡°No quiero el apoyo de las multinacionales, sino el del pueblo¡±.
El cocktail que la nueva Liga sirvi¨® en Pontida tiene una parte de nacionalismo, autonomismo, bajada de impuestos (en la monta?a una enorme pancarta ped¨ªa la tarifa ¨²nica de IRPF), esl¨®ganes antiestablishment. Un malabarismo al que tocaba a?adir a los viejos rockeros de siempre, algo molestos con tanto cambio. En la primera fila est¨¢ Luca Bresciano, con una bandera independentista catalana. ¡°Queremos la libertad de nuestros hermanos catalanes¡±, dice mientras en el escenario amenazan con quitarle las subvenciones a las asociaciones LGTBI. Salvini le saluda. Y Empiezan a o¨ªrse las cr¨ªticas a las ONG. De hecho, el hit entre el abundante merchandising salviniano era la camiseta azul con la cara del ministro del Interior y su celebre frase contra los migrantes: ¡°Se acab¨® la buena vida¡±. Lorenzo, de 17 a?os, con su madre y su t¨ªa, la llevaba orgulloso.
El fen¨®meno Liga tiene algo de hipn¨®tico. Es capaz incluso de seducir a quienes son objeto de desprecio. Agron Kolthi, un alban¨¦s que lleg¨® en autob¨²s desde Albania para buscarse la vida lleva a cuestas un enorme retrato enmarcado que le ha pintado a Salvini. Es jardinero y apenas habla italiano. Pero cree que la cosa va solo con los africanos. ¡°Me gusta Salvini porque es un l¨ªder fuerte. Es lo que necesitamos. Tambi¨¦n en Albania¡±. A su lado, Mirella A., 42 a?os y su perro tatuado en el brazo, confirma que el problema ya no es el sur ¡ª¡°nos necesitamos¡±. Hasta que, como dice Salvini, el mundo vuelva a cambiar.
Una Liga de ligas en Europa
Matteo Salvini y la Liga van sobrados en Italia. Lo dicen las encuestas (le dan ya el 31% de estimaci¨®n de voto) y el apoyo ciudadano. Este domingo el l¨ªder de la Liga, convertido en una estrella del rock en el encuentro anual de Pontida, se dio un ba?o de multitudes. Encarrilada la batalla dom¨¦stica, el ministro del Interior tiene la vista puesta en Europa y en crear una nueva plataforma internacional populista. El domingo fue lo que m¨¢s repiti¨® durante su discurso y dej¨® claro cu¨¢les son sus planes para los pr¨®ximos meses. ¡°Pienso en una Liga de ligas en Europa que incluya a todos los movimientos libres y soberanos que quieran defender sus propias fronteras y el bienestar de sus hijos¡±, se?al¨® mientras saludaba las banderas independentistas de Catalu?a en la primera fila y de Rusia. ¡°Visitar¨¦ las capitales, no s¨®lo las europeas, para crear una alternativa a esta Europa fundada sobre la explotaci¨®n, las finanzas y la inmigraci¨®n de masa¡±, anunci¨®.
Con la vista puesta en las pr¨®ximas elecciones europeas en 2019, el l¨ªder ultraderechista, en el Gobierno con el Movimiento Cinco Estrellas, avis¨® de que ¡°el pr¨®ximo muro que se derribar¨¢ ser¨¢ el de Bruselas¡±. ¡°Las elecciones europeas del a?o pr¨®ximo ser¨¢n un refer¨¦ndum entre la Europa de las ¨¦lites, de las bancas, de las finanzas, de la inmigraci¨®n y la precariedad, y la Europa de los pueblos y del trabajo. Nos han ofrecido un futuro de precariedad y miedo, donde un contrato indefinido o tener pensi¨®n es un sue?o¡±.
La plataforma europea, f¨¢cil de conectar en Francia con Marine Le Pen ¡ªaqu¨ª se entiende parte de la guerra que Salvini mantiene con el presidente de Francia, Emmanuel Macron¡ª, forma parte tambi¨¦n de la estrategia del exasesor de Donald Trump Steve Bannon. El estratega ultraconservador pas¨® varios d¨ªas en Roma despu¨¦s de las elecciones y asesor¨® a la Liga sobre c¨®mo ampliar horizontes electorales.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Sobre la firma
![Daniel Verd¨²](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/https%3A%2F%2Fauthor-service-images-prod-us-east-1.publishing.aws.arc.pub%2Fprisa%2Fe754d022-18a1-44ce-a528-105a01f36f2f.jpg?auth=dcb863cacfc0bb32942db2b658618b2a27252ccfa1bd13aa2a00df339401e234&width=100&height=100&smart=true)