La turbia campa?a electoral amenaza la libertad de prensa en Pakist¨¢n

Pakist¨¢n nunca ha sido un pa¨ªs f¨¢cil para los periodistas. A pesar de que sus medios se encuentran entre los m¨¢s vibrantes de Asia, el control de las agencias de seguridad y la violencia de los extremistas religiosos llevan tiempo mermando la libertad de prensa. Pero en el ¨²ltimo a?o, las presiones han perdido cualquier rastro de sutileza con sospechosas desapariciones de reporteros, e incluso el bloqueo de la difusi¨®n de un peri¨®dico y una cadena de televisi¨®n. Los profesionales de la informaci¨®n se muestran preocupados, aunque algunos tambi¨¦n hacen autocr¨ªtica.

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¡°No hemos tenido problemas para cubrir a los m¨ªtines pol¨ªticos. Tenemos libertad para mover a nuestros equipos¡±, declara Raees Ansari, jefe delegaci¨®n de Geo en Lahore. ¡°Mi preocupaci¨®n se centra en el d¨ªa de las elecciones. ?Va a permitir la polic¨ªa que entremos con las c¨¢maras y los tel¨¦fonos m¨®viles en los colegios electorales? ?O vamos a estar a merced de lo que decida el agente de turno como en los comicios de 2013?¡±, a?ade.

Sin embargo, la abogada Hina Jilani, de la Comisi¨®n de Derechos Humanos de Pakist¨¢n, asegura que los medios no han cubierto por igual los m¨ªtines de la Liga Musulmana de Pakist¨¢n (PML) y del Movimiento por la Justicia (PTI). ¡°No se hicieron eco de un reciente mitin del PML en Lahore en solidaridad con su l¨ªder, Nawaz Sharif, al que asistieron cerca de 100.000 personas¡±, pone como ejemplo. ¡°Tambi¨¦n a m¨ª me han cortado estando en directo cuando he expresado mis opiniones, y luego el canal en cuesti¨®n me ha pedido disculpas¡±, cuenta antes de recordar los bloqueos a GeoTV y el diario Dawn.

¡°No puedo comentar el asunto. Los poderes f¨¢cticos quisieron dictarnos la informaci¨®n, nos negamos y sacaron nuestro canal de la distribuci¨®n durante algunos d¨ªas¡±, admite Ansari, quien atribuye lo ocurrido a la debilidad institucional. ?Afecta a su libertad de expresi¨®n? ¡°Dir¨ªa que somos libres en el 90% y no lo somos en el restante 10%¡±, responde reconociendo las limitaciones de las que no responsabiliza al Ej¨¦rcito sino a una generaci¨®n de pol¨ªticos corruptos.

Tampoco Ashaar Rehman, el director de la delegaci¨®n de Dawn en Lahore, quiere hablar de la censura a su peri¨®dico, uno de los m¨¢s reputados en ingl¨¦s, tras la entrevista que public¨® con el ex primer ministro Sharif y que al parecer desagrad¨® a los militares. Sin embargo, el director general del grupo editorial, Hameed Haroon, ha acusado al ¡°aparato de seguridad¡± de interferir en la pol¨ªtica durante un programa de la BBC. Haroon, que adem¨¢s es presidente de la asociaci¨®n de editores de Pakist¨¢n, tambi¨¦n responsabiliz¨® al poderoso Ej¨¦rcito de ¡°un asalto sin precedentes¡± a la libertad de prensa.

¡°Siempre ha habido informaciones que no gustaban a los militares. Pero tal como va el mundo m¨¢s les vale que aprendan a ignorarlo¡±, asegura Rehman, para quien ese af¨¢n de control ha quedado desfasado con la explosi¨®n de las redes sociales. Estas est¨¢n teniendo un gran impacto en la campa?a, ya que los j¨®venes aprovechan los m¨ªtines pol¨ªticos para pedir cuentas a los candidatos, graban sus respuestas y luego las difunden. Algunas de ellas se han hecho virales.

¡°El problema con los medios es que est¨¢n vendiendo el sue?o estereot¨ªpico de la clase media urbana y hay muchas partes del pa¨ªs [el 60% es rural] que se han quedado atr¨¢s y no se ven reflejadas en ese estilo de vida¡±, se?ala Rehman.

Pero otros periodistas ven un problema m¨¢s grave. ¡°Hay m¨¢s de un centenar de canales de televisi¨®n. ?De verdad cree que con el estado de nuestra econom¨ªa hay publicidad para que todos ellos puedan mantenerse de forma independiente?¡±, plantea un veterano reportero que asegura que muchos de ellos son meras pantallas para avanzar los intereses de los grupos de presi¨®n. Eso y la compra de voluntades. ¡°Llevo tres d¨¦cadas en esta profesi¨®n, tengo un buen sueldo y a¨²n vivo de alquiler porque no he podido comprarme una casa; sin embargo, hay colegas que con 10 veces menos de salario, tienen vivienda propia. Al buen entendedor¡­¡±, a?ade la misma fuente.

¡°El 70% del caos social es culpa de los medios electr¨®nicos¡±, apunta por su parte un reportero especializado de un diario nacional. ¡°A pesar de dedicarme a esta profesi¨®n, hace tiempo que he dejado de ver los debates pol¨ªticos y que intento alejarme del ruido y la intolerancia que destilan; selecciono mucho y s¨®lo leo a colegas que considero serios¡±, explica convencido que el ritmo acelerado con que muchas cadenas informan 24 horas al d¨ªa, siete d¨ªas a la semana, termina distorsionando la realidad m¨¢s que explicarla.

Para el observador ocasional, la mayor¨ªa de los canales paquistan¨ªes dan la sensaci¨®n de estar cubriendo una crisis perpetua. En cualquier caso, su nivel de debate se halla a a?os luz de la domesticada prensa de la pen¨ªnsula ar¨¢biga. En el ¨²ltimo ¨ªndice global de libertad de prensa de Reporteros Sin Fronteras, Pakist¨¢n ocupaba el n¨²mero 139 entre 180 pa¨ªses.