Benalla: ¡°Jam¨¢s fui guardaespaldas¡± de Macron

Ninguna cercan¨ªa personal. Ning¨²n trato de favor especial. Una mera relaci¨®n laboral con el presidente franc¨¦s, Emmanuel Macron, y ni siquiera de m¨¢xima responsabilidad. Alexandre Benalla, el exasesor de seguridad del El¨ªseo y antigua sombra del mandatario, ha tratado de alejar este mi¨¦rcoles cualquier sospecha sobre su otrora jefe, a quien, seg¨²n ha afirmado, se ha intentado atacar a trav¨¦s de su persona desde que la prensa revelara que agredi¨® a varios manifestantes cuando acompa?aba a la polic¨ªa como observador durante las protestas del 1 de mayo.

¡°Jam¨¢s he sido ni polic¨ªa ni guardaespaldas del presidente¡±, ha asegurado Benalla ante la comisi¨®n investigadora del Senado creada tras el estallido del esc¨¢ndalo a mediados de julio, cuando se supo que pese a su grave actuaci¨®n casi tres meses antes, el que estaba considerado como uno de los hombres de confianza de Macron, siempre a su lado desde la campa?a, tanto en desplazamientos oficiales como privados, segu¨ªa trabajando en el El¨ªseo. Solo despu¨¦s de que el diario Le Monde revelara la identidad de Benalla, el gobierno anunci¨® su despido. No fue suficiente. El caso gener¨® un duro pulso entre el Ejecutivo, que intent¨® minimizarlo como una ¡°tormenta en un vaso de agua¡±, y la oposici¨®n, que lo consider¨® una aut¨¦ntica ¡°crisis de Estado¡± que cuestionaba la ejemplaridad proclamada por Macron desde su llegada al poder. Una pugna que desemboc¨® incluso en la presentaci¨®n de dos mociones de censura contra el Gobierno que, pese a su fracaso, demostraron el grado de crispaci¨®n pol¨ªtica. Esta redund¨® tambi¨¦n en sendas comisiones investigadoras en la C¨¢mara baja y el Senado, ante la que este mi¨¦rcoles ha comparecido Benalla, paralelas a la investigaci¨®n abierta tambi¨¦n por la justicia en torno a los incidentes del 1 de mayo.

Una comparecencia muy esperada

La comparecencia de Benalla, de 27 a?os, ante los senadores hab¨ªa generado una enorme expectativa. Una de las grandes dudas era si iba a guardar silencio, en vista de que hab¨ªa declarado que acud¨ªa ¡°obligado¡± ¡ªno presentarse cuando se es convocado ante una comisi¨®n est¨¢ penada con hasta dos a?os de c¨¢rcel y 75.000 euros de multa¡ª a la cita. Pero Benalla, que dijo sentirse v¨ªctima de un ¡°ensa?amiento¡± medi¨¢tico y pol¨ªtico, no eludi¨® ninguna pregunta y hasta comenz¨® disculp¨¢ndose por haber calificado a los senadores de la comisi¨®n como ¡°gente peque?a¡± liderada por el ¡°peque?o marqu¨¦s¡± Philippe Bas, el senador conservador que preside la comisi¨®n.

Ninguna de las preguntas gir¨® en torno a su controvertida actuaci¨®n el 1 de mayo y a la manera en que obtuvo tanto acceso a recursos policiales. Eso es objeto de la investigaci¨®n judicial y cualquier inquisici¨®n al respecto habr¨ªa supuesto una injerencia en el trabajo de los magistrados, como ha advertido reiteradamente el Gobierno. Pero tampoco esa era la principal preocupaci¨®n de los senadores, m¨¢s interesados en saber el papel de un joven como Benalla en el El¨ªseo, donde gozaba de privilegios como un coche oficial o una vivienda en un lujoso recinto normalmente reservado a altos funcionarios. Benalla tambi¨¦n logr¨®, tras reiterados intentos, obtener un permiso para portar armas.

"Un jefe de orquesta"

Durante las casi dos horas y media en las que ha sido interrogado bajo juramento, Benalla ha rechazado categ¨®ricamente la imagen de hombre de confianza de Macron y se ha definido m¨¢s bien como un ¡°jefe de orquesta¡± encargado de cuestiones de seguridad pero de forma log¨ªstica, asegurando que el presidente cuenta con una protecci¨®n oficial en cuanto jefe de Estado. Sobre el arma que portaba, ha asegurado que lo hac¨ªa para su protecci¨®n personal, no para defender al mandatario, una respuesta que ha irritado bastante a los senadores presentes (los de la Rep¨²blica en Marcha, partido de Macron, hab¨ªan boicoteado la sesi¨®n).

¡°Cuando dice que tiene un permiso de armas para uso personal se r¨ªe de nosotros¡±, ha se?alado el presidente del partido de centroderecha UDI, Jean-Christophe Lagarde, tras la sesi¨®n. ¡°Y para ser un mero jefe de orquesta no hace falta ni llevar armas ni estar tan cerca del presidente¡±, ha continuado, a la par que se ha preguntado qu¨¦ podr¨ªa esconder Benalla tras esas respuestas que, seg¨²n el senador Pierre Charon (Los Republicanos), no han sido m¨¢s que un intento de ¡°echar una cortina de humo¡± sobre unos hechos que, para la oposici¨®n, siguen rodeados de claroscuros.