El Supremo de Israel permite la entrada a la estudiante retenida m¨¢s de dos semanas en el aeropuerto de Tel Aviv

En un fallo que supone uno de los mayor reveses sufridos por el primer ministro Benjam¨ªn Netanyahu en la actual legislatura, el Tribunal Supremo de Israel ha permitido este jueves la entrada al pa¨ªs a una estudiante estadounidense que llevaba retenida hace m¨¢s de dos semanas en el aeropuerto de Tel Aviv. El Ministerio del Interior prohibi¨® el paso el pasado d¨ªa 2 a Lara Alqasem, de 22 a?os y nieta de palestinos, bajo la acusaci¨®n de haber apoyado la campa?a de Boicot, Desinversi¨®n y Sanciones (BDS) contra el Estado jud¨ªo. La joven ¡ªque hab¨ªa recibido un visado en el consulado israel¨ª en Miami y hab¨ªa sido aceptada para estudiar en la Universidad Hebrea de Jerusal¨¦n, recurri¨® la decisi¨®n hasta llegar al Alto Tribunal, que finalmente ha rechazado las tesis del Gobierno.

Decenas de militantes o simples simpatizantes del movimiento BDS han sido bloqueados en las fronteras y expulsados desde que el Gobierno de Netanyahu, considerado el m¨¢s derechista en la historia de Israel, lograra en 2017 la aprobaci¨®n en la Kneset (Parlamento) de una restrictiva legislaci¨®n que les veta la entrada al pa¨ªs. Este fue el caso de la activista espa?ola Ana S¨¢nchez Mera, a quien le fue expeditivamente aplicada la norma el pasado mes de julio en el aeropuerto de Ben Gurion cuando coordinaba la visita a Palestina de una delegaci¨®n de cargos municipales y auton¨®micos de Podemos y sus confluencias.

Al Qasem fue presidenta de la secci¨®n de la Universidad de Florida, donde se licenci¨® en Derecho, en la organizaci¨®n estadounidense Estudiantes por la Justicia en Palestina. Durante la vista que se desarroll¨® la semana ante el tribunal de Tel Aviv que confirm¨® en primera instancia su expulsi¨®n de Israel, su abogado asegur¨® que ella se hab¨ªa desvinculado de la pol¨ªtica en los campus hace m¨¢s de un a?o y que por ello hab¨ªa decidido estudiar un m¨¢ster sobre derechos humanos en la m¨¢s prestigiosa universidad israel¨ª.

¡°La decisi¨®n del Supremo de anular el fallo del tribunal de Tel Aviv y permitirla entrada al pa¨ªs es una victoria para la libertad de expresi¨®n, la libertad acad¨¦mica y el Estado de derecho¡±, aseguraron sus letrados en un comunicado citado por el diario Haaretz. ¡°Dado que la acusaci¨®n no ha presentado una causa satisfactoria para impedirle el ingreso a Israel, la impresi¨®n inevitable es que la invalidaci¨®n del visado que se le otorg¨® se ha debido a sus opiniones pol¨ªticas¡±, reza la resoluci¨®n del Alto Tribunal. "Si este es realmente el caso, se ha dado un paso extremo y peligroso que podr¨ªa llevar al desmoronamiento de los pilares sobre los cuales se asienta la democracia en Israel¡±.

Yotam Ben-Hillel, el principal abogado del caso Alqasem, argument¨® que Israel tiene todo el derecho a controlar sus fronteras, pero ello no faculta al Ministerio del Interior para actuar con poderes no sometidos al escrutinio de la ley para expulsar a quien considere indeseable¡±. Este caso, apostill¨®, ¡°confirma que una democracia no puede tener cabida una polic¨ªa del pensamiento¡±.

El ministro de Turismo, Yariv Levin, miembro de unos de los sectores m¨¢s nacionalistas del gubernamental partido Likud, presidido por Netanyahu, calific¨® de ¡°vergonzoso¡± y ¡°contrario a la democracia¡± el fallo del Supremo. ¡°Contradice una clara legislaci¨®n aprobada por el Parlamento y crea una v¨ªa verde (nada que declarar) para la entrada de activistas del boicot a Israel que quieren perjudicar al Estado¡±, argument¨®.

La Universidad Hebrea, que ha apoyado a la estudiante durante, expres¨® en un comunicado su satisfacci¨®n por la decisi¨®n judicial que permitir¨¢ que ¡°Lara Alqasem pueda unirse a miles de estudiantes [en Jerusal¨¦n]¡±. ¡°La estudiante decidi¨® venir a Israel para cursar un m¨¢ster en Derecho, a pesar de los principios del boicot [que se le imputan]¡±, asegur¨® el rectorado durante la vista. ¡°Creemos que la decisi¨®n de deportarla es un error que (¡­) socava las iniciativas acad¨¦micas israel¨ªes para atraer estudiantes e investigadores extranjeros¡±.

La campa?a de Boicot, Sanciones y Desinversiones (BDS) a Israel fue iniciada en 2005 por activistas en Palestina y a escala internacional. Persigue a la misma estrategia de aislamiento que puso fin al r¨¦gimen del apartheid en Sud¨¢frica hace un cuarto de siglo para acabar con la ocupaci¨®n de territorios palestinos por el Ej¨¦rcito israel¨ª. El Gobierno de Netanyahu acusa al movimiento de intenta deslegitimar la existencia del Estado hebreo y de fomentar el antisemitismo.

El caso Alqasem ha adquirido una repercusi¨®n sin precedentes tanto en su propio Estados Unidos ¡ªdonde el Departamento de Estado ha invocado el principio de libertad de expresi¨®n de sus ciudadanos¡ª como en el propio Estado jud¨ªo. Sectores del Gobierno y de la sociedad civil han comenzado a poner en duda la efectividad de la ley que veta el paso a partidarios del BDS ante el deterioro que causa a la imagen internacional de Israel.