Una investigaci¨®n period¨ªstica cifra el drama de las fosas en M¨¦xico: 1.900 en una d¨¦cada
La revelaci¨®n afirma que en 31 de los 32 estados de M¨¦xico se han encontrado cad¨¢veres enterrados
Se suele decir que M¨¦xico se ha convertido en una gran fosa. Un trabajo period¨ªstico presentado este lunes intenta documentar esta afirmaci¨®n y asegura que en el pa¨ªs han sido encontradas 1.978 fosas clandestinas entre 2006 y 2016, seg¨²n datos de la polic¨ªa, las fiscal¨ªas locales y reportes de prensa reunidos en un solo ¡°mapa del horror¡±. Al menos 2.884 cuerpos, 324 cr¨¢neos y miles de restos ¨®seos que pertenecen a un n¨²mero de personas a¨²n no determinado han sido descubiertos en 31 de los 32 estados. La investigaci¨®n reporta n¨²meros contundentes: un entierro ilegal cada dos d¨ªas. Una cifra excesivamente superior a la oficial, que registra aproximadamente 1.500 cad¨¢veres en 855 tumbas entre 2007 y 2016.
En un intento por explicar el mecanismo de las desapariciones en M¨¦xico, que supera actualmente las 35.000 personas, la investigaci¨®n de Quinto Elemento Lab, una organizaci¨®n dedicada a la investigaci¨®n period¨ªstica, refleja la escalada de violencia que vivi¨® el pa¨ªs durante las presidencias de Felipe Calder¨®n (2006-2012) y Enrique Pe?a Nieto (2012-2018). ¡°El fen¨®meno creci¨® a niveles de cat¨¢strofe si se toma en cuenta que en 2006 fueron descubiertas s¨®lo dos fosas, y que en los a?os siguientes el n¨²mero subi¨® a varios cientos. En 2007 el n¨²mero de escondites de cuerpos descubiertos bajo tierra trep¨® a diez. En 2010 la cifra anual ya era de 105 fosas; en 2011 salt¨® a 375, equivalente en promedio a una por d¨ªa. A partir de 2012 los hallazgos de entierros clandestinos, por a?o, no han bajado de 245¡±, reporta la publicaci¨®n.
Durante esos 11 a?os, solo 738 personas del total de las v¨ªctimas han sido reconocidas mientras miles permanecen como no identificados. La publicaci¨®n, realizada a trav¨¦s de 200 peticiones de informaci¨®n p¨²blica, llega a menos de dos meses del esc¨¢ndalo producido por los tr¨¢ileres repletos de cad¨¢veres abandonados en Jalisco, que revelaron el aumento de la violencia en M¨¦xico y la saturaci¨®n de sus morgues.
La responsabilidad de contabilizar las fosas y los cuerpos encontrados en ellas recae directamente en las instituciones, tanto federales como estatales. Sin embargo, organizaciones como la Comisi¨®n Nacional de Derechos Humanos, han contrariado las cifras oficiales m¨²ltiples veces y acusado a los Gobiernos de no dar respuestas satisfactorias. ¡°?Por qu¨¦ las autoridades con toda la responsabilidad y los recursos para hacer el registro completo de fosas y cuerpos no lo han hecho? Es una decisi¨®n pol¨ªtica no hacerlo, es una decisi¨®n pol¨ªtica que no se sepa d¨®nde est¨¢n las fosas ni donde est¨¢n los cuerpos¡±, ha dicho este lunes Alejandra Guill¨¦n, una de las autoras de la investigaci¨®n, en la presentaci¨®n del informe.
La investigaci¨®n period¨ªstica permite mapear los lugares donde se acumula la mayor cantidad de entierros clandestinos y el resultado es estremecedor. Los Estados que registraron m¨¢s fosas fueron Veracruz, cuya c¨²pula policial fue detenida este a?o por torturas y detenciones ilegales, y Tamaulipas, donde el narcotr¨¢fico est¨¢ enquistado desde hace m¨¢s de una d¨¦cada, y donde las Fuerzas Armadas han sido acusadas de secuestrar personas que no volvieron a aparecer. Ambas entidades, sobre el Golfo de M¨¦xico, tienen una importante presencia de carteles del narcotr¨¢fico como Los Zetas.
¡°La importancia del mapa radica en que no solo se trata de un mapa de fosas, sino un mapa de resistencia, de solidaridad de afectos¡±, dijo Carolina Robledo, investigadora del Centro de Investigaci¨®n y Estudios Superiores en Antropolog¨ªa Social, durante la presentaci¨®n en referencia a las miles de madres que recorren fosas, hospitales y morgues cada d¨ªa en medio de la indiferencia oficial. ¡°Una fosa no es solo un homicidio sino un mensaje a las poblaciones. No queremos que el enemigo recupere el cuerpo¡±, a?adi¨® Robledo. La investigaci¨®n centra la mayor cantidad de muertes en un ¡°pent¨¢gono del dolor¡±, formado por Sinaloa, Ciudad Juarez, Acapulco, Veracruz y San fernando (Tamaulipas).
El informe permite adem¨¢s dar cuenta de nuevas formas en las que operan los criminales. ¡°Las inhumaciones ilegales se convirtieron en uno de los sellos de agua de los dos sexenios, al grado de que en uno de cada siete municipios mexicanos personas criminales cavaron hoyos en la tierra para ocultar los cad¨¢veres de sus v¨ªctimas y, en algunos casos, tambi¨¦n quemarlos¡±, se?ala la publicaci¨®n.
Los entierros no siempre se realizaron en lugares despoblados. En algunos casos incluso se hicieron en calles transitadas y ciudades muy pobladas. ¡°La mayor¨ªa de los 350 cuerpos extra¨ªdos en 2011 en Durango [capital del Estado hom¨®nimo que encabeza la lista de entidades con m¨¢s v¨ªctimas encontradas, con casi 500 cad¨¢veres] estaban enterrados en zonas urbanas: algunos en el mero centro, otros en casas, refaccionarias, talleres, obras negras, en terrenos bald¨ªos, en plena avenida o, incluso, junto a un Bachilleres¡±, apunta la investigaci¨®n.
A pesar los abrumadores datos, la publicaci¨®n no tiene informaci¨®n completa, seg¨²n admiten las autoras, quienes explicaron que en siete entidades las autoridades les negaron la existencia de entierros ilegales mientras que testimonios y reportes de prensa aseguraban lo contrario. ¡°Aunque ocho Estados nos han dicho que no tienen fosas tambi¨¦n vemos que hay zonas de silencio. Hay muchos lugares donde no se pueden entrar y siguen siendo hoy lugares de cr¨ªmenes. Intentamos hacer un recorrido por estos lugares y desistimos porque era muy peligroso¡±, ha admitido este lunes Marcela Turati, una de las periodistas que llev¨® a cabo la investigaci¨®n, durante la presentaci¨®n. ¡°Cada fiscal¨ªa da o esconde lo que quiere¡±, asegur¨®.
Otro de los factores que complica la contabilizaci¨®n de los cuerpos sin vida son las diferentes formas en que se llevan a cabo. Algunos Estados incluso han registrado ¡°cocinas¡± donde se deshacen cad¨¢veres en ¨¢cido o tambos met¨¢licos con restos humanos. En este sentido, la publicaci¨®n ha sido concluyente en algo: la necesidad de crear un protocolo homologado en todo el pa¨ªs que sirva para registrar las fosas y los restos encontrados.
Las autoras aseguran que mientras los registros sigan siendo dispersos, incompletos, contradictorios o fragmentados las familias de las v¨ªctimas se ven obligadas a vivir en la incertidumbre acerca del paradero de su seres queridos. ¡°La suma de negligencias y omisiones condenan a las personas desaparecidas a desaparecer por segunda vez¡±, concluye la investigaci¨®n.
Con informaci¨®n de Quinto Elemento Lab
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.