Misisipi elige senadora a una republicana que brome¨® con asistir a un ¡°ahorcamiento p¨²blico¡±
Hyde-Smith dijo que ¡°estar¨ªa en primera fila¡± en una ejecuci¨®n de ese tipo en un Estado con un historial funesto de linchamientos a negros
La republicana Cindy Hyde-Smith revalid¨® este martes su esca?o de senadora por Misisipi, logrando sortear la pol¨¦mica desatada por unas declaraciones suyas de tinte racista. La elecci¨®n era una prueba de fuego para el Partido Republicano y el presidente Donald Trump, que se volc¨® en la campa?a. Hyde-Smith, que es blanca, se impuso por siete puntos de ventaja frente al candidato dem¨®crata Mike Espy, negro, en un feudo tradicionalmente republicano y que fue hasta hace medio siglo uno de los epicentros de la discriminaci¨®n legal a los afroamericanos en el llamado Sur Profundo de Estados Unidos.
El resultado implica que los republicanos ampl¨ªan su mayor¨ªa en el Senado, en Washington: a partir de enero controlar¨¢n 53 esca?os, dos m¨¢s de los actuales, frente a 47 de los dem¨®cratas. Aunque los dem¨®cratas ostentar¨¢n la mayor¨ªa en la C¨¢mara de Representantes, el control del Senado es clave para Trump porque es el hemiciclo encargado de votar a sus nominados judiciales y a puestos del Gobierno.
Hyde-Smith, que hasta entonces era comisaria de agricultura de Misisipi, ocupa desde el pasado abril el esca?o del exsenador republicano Thad Cochran, que se retir¨® por motivos de salud. Como era un reemplazo provisional, el 6 de noviembre, coincidiendo con las legislativas, se celebr¨® una elecci¨®n especial para escoger al sustituto. Ni Hyde-Smith ni Espy lograron entonces m¨¢s del 50% de los votos, lo que forz¨® una segunda vuelta electoral este martes.
Tradicionalmente, unos comicios de este tipo apenas habr¨ªan desatado inter¨¦s fuera de Misisipi, un Estado que en las ¨²ltimas tres d¨¦cadas solo ha escogido a senadores republicanos y donde Trump gan¨® por 17 puntos en 2016. El sur de EE UU se ha afianzado en las ¨²ltimas d¨¦cadas como un s¨®lido feudo conservador.
Todo apuntaba a que Hyde-Smith, de 59 a?os, iba a lograr sin dificultades su reelecci¨®n. Hasta el 2 de noviembre, cuatro d¨ªas antes de las elecciones legislativas. La difusi¨®n de un v¨ªdeo desat¨® un terremoto. Ante un peque?o grupo de votantes, se escuchaba a una sonriente Hyde-Smith elogiar a un simpatizante y afirmar que si la invitara a ¡°un ahorcamiento p¨²blico, yo estar¨ªa en primera fila¡±.
La frase reabri¨® r¨¢pidamente traumas raciales. Misisipi fue el Estado de EE UU donde hubo m¨¢s linchamientos de negros, muchos de ellos en ahorcamientos p¨²blicos: unas 600 personas fueron ejecutadas extrajudicialmente en linchamientos entre 1877 y 1950. El dem¨®crata Espy, de 64 a?os, se habr¨ªa convertido en el primer senador afroamericano de Misisipi desde el fin de la Guerra Civil, hace m¨¢s de 150 a?os.
Hyde-Smith intent¨® inicialmente esquivar la pol¨¦mica, pero acab¨® vi¨¦ndose forzada a abordarla a rega?adientes. En un debate televisivo, neg¨® que su comentario tuviera ninguna mala intenci¨®n y acus¨® a su rival de explotarlo. No fue, sin embargo, su ¨²nico rev¨¦s. En otra grabaci¨®n, la republicana sugiri¨® que debe ¡°hacerse un poco m¨¢s dif¨ªcil¡± el voto a los dem¨®cratas. Misisipi, como otros feudos conservadores y como ya ocurr¨ªa tras la Guerra Civil en el sur de EE UU, han sido acusados de impulsar en los ¨²ltimos a?os leyes para dificultar los requisitos de voto con el objetivo de desalentar la participaci¨®n de ciudadanos negros, que suelen votar dem¨®crata.
La estrategia de Espy -que fue congresista en Washington y secretario de Agricultura en el Gobierno de Bill Clinton- ha sido movilizar a la poblaci¨®n negra, que representa un 36% de los votantes, y tratar de atraer a votantes blancos conservadores molestos con la ret¨®rica de Hyde-Smith y con Trump, emulando el malestar que catapult¨® a los dem¨®cratas a hacerse con la C¨¢mara de Representantes. Espy tambi¨¦n ha prometido luchar contra los estereotipos en el resto del pa¨ªs en torno a Misisipi, uno de los Estados m¨¢s pobres y conservadores socialmente. Su objetivo era repetir la sorprendente victoria el pasado diciembre de un dem¨®crata en las elecciones a senador en Alabama, otro dominio hist¨®ricamente republicano. Esos comicios estuvieron marcados por las acusaciones de acoso sexual contra el candidato republicano.
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