La crisis venezolana se cuela en el viaje del Papa a Panam¨¢
El Vaticano asegura que "apoyar¨¢ cualquier esfuerzo que permita ahorrar ulterior sufrimiento a la poblaci¨®n" venezolana


La crisis venezolana explot¨® a 37.000 pies de altura. La noticia corri¨® primero entre las filas de la clase turista, donde viajaba la prensa. Poco despu¨¦s lleg¨® a los asientos delanteros de la comitiva papal. Francisco estaba a punto de aterrizar en Panam¨¢, un pa¨ªs clave en la regi¨®n, para participar en la Jornada Mundial de la Juventud (JMG). Un viaje dise?ado para tratar los asuntos que preocupan a los j¨®venes cat¨®licos y alejado, en principio, de cuestiones pol¨ªticas que s¨ª suele tratar Francisco en los desplazamientos de Estado. Sin embargo, la inestabilidad abierta en la regi¨®n y el papel del Vaticano en la crisis de Venezuela?¡ªfue uno de los agentes que medi¨® sin ¨¦xito en el conflicto¡ª han obligado a a la Santa Sede a afrontar la cuesti¨®n.
El tema venezolano ha copado la primera jornada del viaje. Ante las repetidas preguntas de los periodistas que viajan con el Pont¨ªfice, el portavoz de la Santa Sede ha enviado una declaraci¨®n oficial que permite entender que la Santa Sede est¨¢ por una transici¨®n pac¨ªfica. "El Santo Padre, informado en Panam¨¢ de las noticias provenientes de Venezuela, sigue con cercan¨ªa el desarrollo de la situaci¨®n y reza por las victimas y por todos los venezolanos. La Santa Sede apoya todos los esfuerzos que permitan ahorrar ulterior sufrimiento a la poblaci¨®n¡±. La declaraci¨®n no es en ning¨²n caso un apoyo al jefe de la Asamblea Nacional, el opositor Juan Guaid¨®. Pero en un contexto en el que el status quo es todo lo contrario al ahorro del sufrimiento, parece evidente que el Vaticano se inclina por los cambios.
La crisis venezolana se hizo presente ya en las calles desde el primer momento. El Papa lo comprob¨® r¨¢pido: poco despu¨¦s de aterrizar, mientras recorr¨ªa las avenidas de la capital en su autom¨®vil, un hombre se abalannz¨® contra su coche ondeando una bandera venezolana. Tras ¨¦l, comenzaron las declaracines de algunos peregrinos a las televisiones. Miles de sus ciudadanos exigen desde hace a?os al Vaticano que tome una posici¨®n clara sobre el conflicto y censure el r¨¦gimen de Nicol¨¢s Maduro. Una respuesta que no podr¨ªa estar m¨¢s alejada del estilo diplom¨¢tico de la Santa Sede, que siempre ha sido muy sinuosa con la cuesti¨®n y no tomar¨¢ decisiones radicales que puedan poner en riesgo a la comunidad cat¨®lica del pa¨ªs o su jerarqu¨ªa eclesi¨¢stica.
El Papa nunca se ha pronunciado hasta ahora en favor o en contra de su presidente, Nicol¨¢s Maduro. No es el estilo y tampoco lo har¨¢ estos d¨ªas de forma clara. Pero siempre se ha mostrado abiertamente a favor del di¨¢logo, pese a la presi¨®n de los obispos chilenos, claramente del lado de la oposici¨®n, para que fuese m¨¢s duro. La situaci¨®n se complica todav¨ªa m¨¢s ahora teniendo en cuenta que el motor del asalto diplom¨¢tico a Nicol¨¢s Maduro procede de dos l¨ªderes como el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro y el de EE UU, Donald Trump, con los que el Papa no mantiene buena sinton¨ªa. Pero se espera una respuesta. Miles de j¨®venes venezolanos se han desplazado a la JMG para escuchar al Pont¨ªfice, de modo que ser¨¢ dif¨ªcil que el Papa evite una alusi¨®n a la situaci¨®n que atraviesa el pa¨ªs de tantos peregrinos.
El Vaticano conoce muy bien la cuesti¨®n. El Secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin, fue nuncio en Venezuela y conserva una n¨ªtida capacidad de an¨¢lisis del conflicto. El nuevo Sustituto de la Secretar¨ªa de Estado ¡ªalgo as¨ª como el n¨²mero 3 de la curia¡ª es el venezolano Edgar Pena Parra, la misma nacionalidad que el actual superior de los Jesuitas, Arturo Sosa. De modo que no falta atenci¨®n y la v¨ªa de di¨¢logo con el Gobierno de Maduro siempre ha estado abierta. Incluso demasiado, para el gusto de la oposici¨®n.
La Santa Sede estuvo presente con un representante en su ceremonia de investidura el pasado 10 de enero, algo que incomod¨® a parte de la jerarqu¨ªa eclesi¨¢stica del pa¨ªs. El portavoz de la Santa Sede lo justific¨® as¨ª: "La actividad diplom¨¢tica del Vaticano tiene como finalidad promover el bien com¨²n, tutelar la paz y garantizar el respeto de la dignidad humana. Por este motivo, se ha decidido estar representados en la ceremonia. La Santa Sede y los obispos contin¨²an trabajando juntos para ayudar al pueblo venezolano, que sufre las implicaciones humanitarias y sociales de la grave situaci¨®n que atraviesa el pa¨ªs". Una respuesta parecida a la que se espera que llegue este jueves.
El primer d¨ªa del viaje de Francisco, en el que se inaugur¨® la JMJ, comenz¨® con un encuentro con el presidente de Panam¨¢, Juan Carlos Varela, y las autoridades del pa¨ªs. En su discurso el Pont¨ªfice hizo alusi¨®n a las particularidades del pa¨ªs, que lo convierten en un cruce de caminos comercial y financiero que, a menudo, fomentan la corrupci¨®n. ¡°Es una invitacio?n a vivir con austeridad y transparencia, en la responsabilidad concreta por los dema?s y por el mundo; llevar una vida que demuestre que el servicio pu?blico es sino?nimo de honestidad y justicia, y anto?nimo de cualquier forma de corrupcio?n. [¡] Tengamos la osad¨ªa de construir una pol¨ªtica aut¨¦nticamente humana [¡]. Una cultura de mayor transparencia entre los Gobiernos, el sector privado y la poblaci¨®n¡±.
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