May quiere reabrir el acuerdo de Brexit pactado con la UE

Theresa May ya se conforma con buscar aquellas derrotas que favorezcan su estrategia a largo plazo. La primera ministra volver¨¢ a acudir este martes al Parlamento sin nada nuevo que ofrecer para salvar su plan del Brexit. Y, oficialmente, dar¨¢ ¨®rdenes de rechazar dos nuevas mociones impulsadas desde los esca?os. La m¨¢s peligrosa propone prorrogar la fecha de salida de la UE, prevista para el 29 de marzo, y rechazar la posibilidad de una ruptura sin acuerdo. De salir adelante, dejar¨ªa a May sin fuerza negociadora frente a Bruselas. La otra, fabricada por aliados de la primera ministra, ofrece respaldar su plan si se quita de la mesa el backstop, la salvaguarda irlandesa impuesta por la Uni¨®n Europea, y se negocian "soluciones alternativas". Sobre el papel, el Gobierno brit¨¢nico no puede respaldar una idea que contradice su discurso oficial, seg¨²n el cual ya no hay margen para negociar nada nuevo.

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Extraoficialmente, May estar¨ªa encantada de enviar a Bruselas el mensaje de que es posible obtener una mayor¨ªa parlamentaria si se salva el escollo irland¨¦s. Poco antes de la votaci¨®n de este martes, su portavoz se?al¨® que la primera ministra quiere reabrir la negociaci¨®n con Bruselas. "Debemos tener un acuerdo que pueda obtener el apoyo del Parlamento [brit¨¢nico] y eso va a requerir algunos cambios al tratado de retirada", dijo la portavoz. Este extremo fue rechazado este lunes por Sabine Weyand, la n¨²mero dos del negociador europeo Michel Barnier: "No hay negociaci¨®n entre la UE y Reino Unido. Esa ya termin¨®".

La moci¨®n para esquivar el backstop ha sido dise?ada por sir Graham Brady, el jefe del llamado Comit¨¦ 1922.?Se trata del grupo parlamentario que incluye a todos los diputados conservadores sin cargo en el Gobierno. Ya demostr¨® su peso recientemente cuando puso en marcha una moci¨®n de censura interna contra May para cuestionar su liderazgo al frente del partido. La primera ministra logr¨® superarla, pero comprob¨® con dolor c¨®mo casi el 40% de sus parlamentarios ya no confiaban en ella.

"No s¨¦ si contar¨¦ con el respaldo del Gobierno, pero eso espero. Esta moci¨®n es fruto de varias conversaciones con distintos colegas del partido, incluida la primera ministra", admiti¨® Brady este lunes a la BBC. No hac¨ªa falta ser muy perspicaz para entender que el Ejecutivo de May ve con buenos ojos una iniciativa legal que, de salir adelante, le dar¨ªa "una enorme potencia" ¡ªen palabras de Brady¡ª? para regresar a Bruselas con nuevas exigencias.

Algo se est¨¢ cociendo en las filas de los euroesc¨¦pticos, que comienzan a ver a May con otros ojos. Muchos de ellos se han reunido con ella en los ¨²ltimos d¨ªas y han cambiado su tono. "Si la primera ministra es capaz de asegurar esa modificaci¨®n ¡ªuna perforaci¨®n apropiada, del tama?o que merece Reino Unido, en las entra?as del backstop¡ª?no tengo la menor duda de que tendr¨¢ a todo el pa¨ªs detr¨¢s de ella de un modo incondicional", ha escrito Boris Johnson en las p¨¢ginas del The Daily Telegraph.?Nada que ver con el tono avasallador y displicente que el exministro de Exteriores utilizaba en los ¨²ltimos meses para atacar el plan del Brexit de May.

A primera hora de este martes se sabr¨¢ si la moci¨®n en la que May ha puesto sus esperanzas ser¨¢ debatida en Westminster. La decisi¨®n ¨²ltima depende del presidente de la C¨¢mara, John Bercow, quien tiene la prerrogativa de establecer qu¨¦ iniciativas se incluyen en el orden del d¨ªa. Dados sus ¨²ltimos enfrentamientos con el Gobierno, Bercow podr¨ªa dar la sorpresa y vetar el texto, pero el equipo de May ya anticipa que considerar¨ªan tal decisi¨®n casus belli?y descarta esa posibilidad.

La moci¨®n m¨¢s peligrosa

La moci¨®n que m¨¢s nervios provoca en Downing Street es la presentada conjuntamente por la diputada laborista Yvette Cooper y el conservador Nick Boles. Obligar¨ªa al Gobierno a prorrogar la fecha fijada para el Brexit en el caso de que no se alcanzara, bien con Bruselas, bien en el propio Parlamento, un acuerdo con posibilidades de ¨¦xito antes del fin de febrero.

"Si no aprovechamos ahora esta ocasi¨®n, corremos el grave riesgo de caer involuntariamente por el precipicio el pr¨®ximo 29 de marzo, cuando podr¨ªamos ser capaces de alcanzar un compromiso si dispusi¨¦ramos de unos pocos meses m¨¢s", ha explicado Boles a la BBC.

Los impulsores de esta moci¨®n conf¨ªan en que salga adelante en el Parlamento, aunque prev¨¦n una votaci¨®n muy ajustada. El principal partido de la oposici¨®n, el laborismo de Jeremy Corbyn, ha dado pistas de que est¨¢ dispuesto a respaldarla. May va a pelear hasta el ¨²ltimo minuto para que sea rechazada. Si Westminster le diera su visto bueno, quedar¨ªa aniquilada cualquier esperanza de que Bruselas diera su brazo a torcer en la exigencia del backstop,?la permanencia del territorio de Irlanda del Norte en la uni¨®n aduanera hasta que se negociara la relaci¨®n futura entre Reino Unido y la UE.

Pero en este juego de hip¨®tesis y c¨¢lculos en que se ha convertido la crisis del Brexit, cualquier remedio m¨¢gico recibe enseguida su correspondiente jarro de agua fr¨ªa. El vice primer ministro irland¨¦s, Simon Coveney, ha advertido ya a Londres que la salvaguarda de Irlanda del Norte "es parte fundamental de un acuerdo equilibrado que no va a cambiar", y que "la paz y el Acuerdo de Viernes Santo son m¨¢s importantes que el Brexit". El backstop garantiza que nunca se establecer¨ªa de nuevo una "frontera dura" entre las dos Irlandas que pusiera en peligro la fr¨¢gil cordialidad de los ¨²ltimos a?os.