Liberado despu¨¦s de tres meses un futbolista que fue de luna de miel a Tailandia y acab¨® en la c¨¢rcel
El joven, que estaba reclamado por Bahr¨¦in, regresar¨¢ ahora a Australia, donde tiene estatus de refugiado
La pesadilla del futbolista bahrein¨ª Hakeem Al-Araibi dio este lunes un giro positivo inesperado; despu¨¦s de casi tres meses en una prisi¨®n de Bangkok, Tailandia ha decidido ponerlo en libertad y permitir su regreso a Australia, donde tiene condici¨®n de refugiado y vive desde 2014. Lo ha hecho despu¨¦s de que, presionado, Bahr¨¦in retirara una petici¨®n de extradici¨®n por un delito que Al-Araibi considera un pretexto para reprenderle por su vinculaci¨®n con la primavera ¨¢rabe y sus cr¨ªticas al Gobierno.
¡°Hakeem Al-Araibi ha salido de la c¨¢rcel. Est¨¢ de camino al aeropuerto¡±, anunciaba victorioso el primer ministro australiano, Scott Morrison, a la espera de que el joven de 25 a?os se reencuentre con su familia el martes en Australia.
Aunque Australia ha sido una de las principales fuentes de presi¨®n para la liberaci¨®n de Al-Araibi, ese pa¨ªs tambi¨¦n jug¨® su papel en el rocambolesco caso. Fue una ¡°alerta roja¡± activada err¨®neamente por Australia la que advirti¨® a las autoridades tailandesas de que el joven, sobre quien pesaba una orden de arresto de Interpol interpuesta por Bahr¨¦in, se dirig¨ªa a Tailandia desde Australia el pasado 25 de noviembre.
Lo que estaba previsto como su luna de miel, se torn¨® por sorpresa en un infierno para Al-Araibi y su esposa. Nada m¨¢s pisar el aeropuerto de Bangkok, el joven fue detenido y enviado a una c¨¢rcel de la ciudad, pese a que Australia retir¨® despu¨¦s la ¡°alerta roja¡± e implor¨® a Tailandia que no atendiera la petici¨®n de extradici¨®n bahrein¨ª y le permitiera regresar a Melbourne. El bahrein¨ª juega al f¨²tbol en un equipo de esa ciudad australiana, adonde lleg¨® tras huir de su pa¨ªs en 2014. Australia le concedi¨® el estatus de refugiado en 2017.
Al-Araibi huy¨® de Bahr¨¦in antes de que se celebrara un juicio en su contra por el asalto a una comisar¨ªa en 2014. El futbolista neg¨® los cargos y aleg¨® estar jugando un partido de f¨²tbol televisado en el momento del supuesto ataque. En cambio, achac¨® los cargos a la persecuci¨®n de la que afirma ser v¨ªctima por parte de Bahr¨¦in desde 2012, cuando fue detenido por primera vez y torturado por la implicaci¨®n de su hermano en las protestas prodemocracia que desde finales de 2010 se expandieron por varios pa¨ªses ¨¢rabes.
¡°Bahr¨¦in es un pa¨ªs que no respeta los derechos humanos. Mi vida est¨¢ en peligro¡±, declar¨® Al-Araibi a la organizaci¨®n Human Rights Watch (HRW) tras ser detenido en Tailandia, asegurando que ser¨ªa torturado de nuevo si regresaba a su pa¨ªs.
Tailandia advirti¨® que no liberar¨ªa a Al-Araibi a no ser que Bahr¨¦in retirase la orden de extradici¨®n, lo que finalmente hizo este lunes. Pese a las renuencias iniciales, la presi¨®n sobre el pa¨ªs ¨¢rabe y Tailandia ha jugado a favor del futbolista. Adem¨¢s de Australia o grupos como HRW, la misma FIFA tom¨® partido en el caso, divulgando un comunicado pidiendo su puesta en libertad.
?El propio Al-Araibi hab¨ªa pedido ayuda al a organizaci¨®n. En una entrevista al diario brit¨¢nico The Guardian en diciembre, el futbolista dijo creer que Bahr¨¦in tambi¨¦n buscaba vengarse por sus cr¨ªticas hacia Sheikh Salman al-Khalifa, miembro de la familia real de Bahr¨¦in, presidente de la Confederaci¨®n Asi¨¢tica de F¨²tbol (AFC) y vicepresidente de la FIFA, por su supuesta inacci¨®n durante la represi¨®n de Bahr¨¦in contra los atletas que participaron en las protestas prodemocracia de 2011 y 2012.
?¡°Quiero decir al presidente (de la FIFA) Gianni Infantino que tiene el poder de salvarme la vida¡±, dijo Al-Araibi a HRW, seg¨²n un comunicado de esta organizaci¨®n.
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