Brexit: 22 d¨ªas de bloqueo con las cartas marcadas
Los euroesc¨¦pticos y los defensores del refer¨¦ndum asumen la pr¨®rroga de la fecha de salida de la UE
Geoffrey Cox, el mago jur¨ªdico, el deus ex machina que el Gobierno de Theresa May ha puesto en escena en ¨²ltimo momento para solucionar el bloqueo del Brexit, ya se ha dado cuenta de que las soluciones jur¨ªdicas no suelen encajar en las reglas de las batallas pol¨ªticas.
¡°Estamos discutiendo propuestas detalladas, coherentes, cuidadosas con la Uni¨®n Europea. Me sorprenden los comentarios surgidos en las ¨²ltimas 48 horas en el sentido de que nuestras propuestas no son claras. Son claras como la luz del d¨ªa y seguiremos discuti¨¦ndolas¡±, defend¨ªa este jueves el Abogado General del Reino Unido en la C¨¢mara de los Comunes sus esfuerzos hasta el momento por ara?ar de Bruselas una soluci¨®n al embrollo del backstop, la llamada salvaguarda irlandesa, que puede contentar a los euroesc¨¦pticos conservadores m¨¢s radicales.
Sus esfuerzos por convencer a los diputados de que las negociaciones est¨¢n avanzando fueron recibidos con notable escepticismo. Cox busca un mecanismo de arbitraje que permita al Reino Unido poder escapar de la uni¨®n aduanera si las conversaciones sobre la futura relaci¨®n comercial con la UE, una vez que el Brexit sea una realidad, se estancan indefinidamente. Pero est¨¢ chocando con un doble muro: Bruselas no quiere o¨ªr hablar de m¨¦todos de resoluci¨®n de disputas ajenos a su orden jur¨ªdico y legal. Y el ala dura de los conservadores no est¨¢ dispuesta a comprar una soluci¨®n intermedia que no cumpla con su exigencia radical de hacer desaparecer por completo el backstop. Han llegado al extremo de seleccionar a un grupo de ocho notables para analizar el resultado final que Cox traiga de Bruselas, a los que ya se conoce como la Star Chamber (C¨¢mara Estelar), en referencia al tribunal bajo mandato directo de los monarcas brit¨¢nicos, hace 500 a?os, que se usaba para juzgar a los enemigos pol¨ªticos y en el que la confesi¨®n bajo tortura era moneda aceptada.
El Gobierno de May mantiene su compromiso de someter a votaci¨®n el martes su plan. Y de ser derrotado, pedir al Parlamento que se pronuncie sobre la posibilidad de solicitar una pr¨®rroga de la fecha de salida de la UE, prevista para el 29 de marzo. Ah¨ª est¨¢ la explicaci¨®n de todas las estrategias desplegadas en este enredo pol¨ªtico. Los aliados de la primera ministra utilizan la amenaza de la pr¨®rroga para advertir a los euroesc¨¦pticos de que abrir¨ªa las puertas a un Brexit m¨¢s suave del perseguido. ¡°Si esto ocurre entraremos en territorio desconocido y habr¨¢ que llegar a consensos con la C¨¢mara de los Comunes, lo que implicar¨¢ hacer concesiones¡±, ha advertido este jueves el ministro de Econom¨ªa, Philip Hammond, en la BBC.
Ese territorio desconocido podr¨ªa ser un Brexit ¡°a la noruega¡±, con la permanencia del Reino Unido en la uni¨®n aduanera e incluso en el Mercado Interior. El l¨ªder de la oposici¨®n laborista, Jeremy Corbyn, se reuni¨® el mi¨¦rcoles con diputados conservadores como Nick Boles y Oliver Letwin, que defienden esta opci¨®n, y dio se?ales de que pod¨ªan llegar a puntos de acuerdo. Enseguida despert¨® las alertas en los laboristas que persiguen la pr¨®rroga para impulsar un segundo refer¨¦ndum.
?Y los euroesc¨¦pticos? Pasado el susto, comienzan a acariciar la idea de dejar que pase una pr¨®rroga de apenas dos meses para acabar llegando a la tierra prometida que anhelan: un Brexit a las bravas, sin acuerdo de ning¨²n tipo.
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