Netanyahu encabeza los sondeos pese a las acusaciones de corrupci¨®n

Despu¨¦s de una d¨¦cada al frente del Gobierno de Israel, Benjam¨ªn Netanyahu vuelve a proyectarse como ganador de las legislativas del pr¨®ximo d¨ªa 9. El primer ministro acaricia su cuarta victoria consecutiva en las urnas, a pesar de las acusaciones de corrupci¨®n, mientras los sondeos sit¨²an de nuevo en primer lugar al Likud, el partido conservador que lidera. La nueva coalici¨®n centrista Azul y Blanco, del exgeneral Benny Gantz, se hab¨ªa confirmado hasta ahora como alternativa de poder al encabezar con claridad las encuestas durante semanas.

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?A menos de una semana de las votaciones, el mandatario saca partido de la fragmentaci¨®n pol¨ªtica de Israel, que apunta a la previsible presencia de una docena de grupos parlamentarios en una Kneset (Parlamento) de solo 120 esca?os. La polarizaci¨®n que fractura el Estado jud¨ªo parece decantarse a favor del bloque conservador y ultrarreligioso, que sumar¨ªa una clara mayor¨ªa de 67 diputados. El centroizquierda se situar¨ªa en 53 esca?os, incluyendo a una decena de parlamentarios ¨¢rabes, que representan a la principal minor¨ªa (20% de la poblaci¨®n) de Israel.

Casi todos los partidos de la coalici¨®n gubernamental saliente parecen tener garantizada la presencia en la nueva C¨¢mara. A ellos se suma la irrupci¨®n de la alianza ultraderechista Uni¨®n de la Derecha, que incluye a la formaci¨®n Poder Jud¨ªo, heredera de un partido racista anti¨¢rabe que fue proscrito hace tres d¨¦cadas. Es previsible que se incorpore tambi¨¦n a la mayor¨ªa la candidatura de Zehut (Identidad, en hebreo), un grupo ultranacionalista que ha enarbolado la bandera de la legalizaci¨®n del consumo de la marihuana para atraer el voto de los j¨®venes liberales.

En el campo del centroizquierda, el Partido Laborista mejora sus resultados, pero queda lejos de configurarse como primera fuerza de la oposici¨®n, como ocurri¨® en los comicios celebrados en 2015. Este papel le corresponde ahora a Azul y Blanco, coalici¨®n electoral en la que destacan tres antiguos jefes de la Fuerzas Armadas ¨C¨Clos generales retirados Benny Gantz, Moshe Yaalon y Gabi Ashkenazi¡ª junto al l¨ªder centrista laico Yair Lapid. Los cuatro comparten la inequ¨ªvoca voluntad de poner fin al reinado de Netanyahu, que acumula 13 a?os en el cargo si se a?ade su primer mandato (1996-1999). El escaso peso de la izquierda pacifista de Meretz y el rechazo de los partidos sionistas a formar Gobierno con grupos ¨¢rabes convierten la misi¨®n de descabalgar del poder al actual primer ministro en una haza?a de dif¨ªcil ejecuci¨®n.

¡°La gran polarizaci¨®n pol¨ªtica de los ¨²ltimos a?os se ha traducido en una significativa proliferaci¨®n de partidos, con el consiguiente debilitamiento de las formaciones tradicionales¡±, destaca el analista electoral Daniel Kupervaser. Netanyahu y Gantz cuentan solo con el respaldo de una cuarta parte de la Kneset. Peque?os grupos con cuatro o cinco esca?os se disponen a condicionar la gobernabilidad con exigencias desorbitadas. ¡°En funci¨®n de los resultados, los dos l¨ªderes pueden verse obligados, a pesar de sus desavenencias, a formar un Gobierno de gran coalici¨®n si quieren evitar la convocatoria de nuevas elecciones legislativas¡±, subraya este experto pol¨ªtico.

El caso de los submarinos

La brigada antifraude de la polic¨ªa ha acusado a Netanyahu en tres casos de corrupci¨®n, y el fiscal general de Israel ha anunciado que examinar¨¢ su imputaci¨®n despu¨¦s de los comicios. Las investigaciones no parecen haber perjudicado sus expectativas electorales, pero la sombra de un cuarto esc¨¢ndalo le ha vuelto a amenazar en v¨ªsperas de las votaciones. El ex primer ministro laborista Ehud Barak, que tambi¨¦n fue jefe del Estado Mayor del Ej¨¦rcito, y varios antiguos responsables de los servicios de seguridad reclamaron ayer que se investigue tambi¨¦n al primer ministro por su supuesta implicaci¨®n en el cobro de comisiones ilegales en la compra de submarinos alemanes para la Armada israel¨ª. Nuevas revelaciones apuntan a que Netanyahu se enriqueci¨® con la venta de acciones de una compa?¨ªa que fue contratada por los astilleros germanos ThyssenKrupp.

La campa?a israel¨ª versa sobre la permanencia de Netanyahu en el poder. Ni el proceso de paz con los palestinos ni las cuestiones sociales y econ¨®micas ocupan lugar relevante en los programas. El exgeneral Gantz se ha mostrado proclive a reanudar las negociaciones de paz, paralizadas hace cinco a?os, pero el primer ministro marca la agenda electoral desde el Gobierno e impone su experiencia como estadista.

Campa?a teledirigida desde el poder

El primer ministro convoc¨® en la tarde del mi¨¦rcoles a la prensa sin precisar el motivo. En la recta final de la campa?a, el anuncio suscit¨® la atenci¨®n de todos los canales de televisi¨®n, que interrumpieron su programaci¨®n para ofrecer sus declaraciones. Benjam¨ªn Netanyahu inform¨® de la repatriaci¨®n de los restos de un militar israel¨ª, muerto en L¨ªbano en 1982, en una operaci¨®n encubierta de los servicios de inteligencia. En un pa¨ªs con servicio militar obligatorio, el mandatario toc¨® la fibra m¨¢s emocional de los ciudadanos al asegurar que el Ej¨¦rcito ¡°devolver¨¢ a casa a todos los soldados ca¨ªdos¡±. Netanyahu, que tambi¨¦n ejerce como ministro de Defensa, ha mantenido una intensa agenda diplom¨¢tica durante toda la campa?a. Ha visitado la Casa Blanca y recibido al presidente brasile?o, Jair Bolsonaro. Este jueves le espera en Mosc¨² el l¨ªder ruso, Vlad¨ªmir Putin.