Filipinas celebra unas elecciones con aire de refer¨¦ndum sobre Duterte

Un refer¨¦ndum sobre el presidente Rodrigo Duterte. As¨ª se pueden considerar las elecciones municipales y legislativas que se celebran este lunes en Filipinas, y a las que est¨¢n llamados casi 62 de los 107 millones de habitantes censados en las islas. Est¨¢n en juego 18.000 cargos, entre ellos los de 200 gobernadores y alcaldes. Pero los que m¨¢s pueden marcar el futuro de este archipi¨¦lago son los doce asientos en juego en el Senado, de un total de 24. De ellos depender¨¢ que el lenguaraz exalcalde de Davao pueda poner en marcha su anhelada agenda de reforma de la Constituci¨®n o recuperaci¨®n de la pena de muerte.

Pocos creen que, como plebiscito sobre su persona aunque no aparezca en las listas, esta sea una consulta que Duterte vaya a perder. Es vilipendiado, s¨ª, en Occidente por sus comentarios machistas, por su desastroso historial de derechos humanos y por una violenta campa?a contra el tr¨¢fico de drogas que, seg¨²n c¨¢lculos de ONG, puede haber costado m¨¢s de 20.000 vidas. Pero en su pa¨ªs mantiene una inmensa popularidad: su lengua suelta y su imagen de hombre de acci¨®n le diferencian de las acartonadas ¨¦lites tradicionales. Un 79% de los filipinos se declara satisfecho con su mandato, seg¨²n una encuesta de la firma Social Weather Stations.

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La jornada electoral de las elecciones municipales y legislativas de Filipinas, en im¨¢genes

En cambio, la oposici¨®n filipina ¡ªdividida, mermada y sin un liderazgo claro¡ª no ha sabido bien c¨®mo responder a Duterte desde que esta suerte de Donald Trump asi¨¢tico gan¨® por amplia mayor¨ªa las elecciones presidenciales en 2016.

Las encuestas pronostican que los candidatos que cuentan con el apoyo del presidente pueden barrer en la consulta de este lunes, y dejar el Senado -tradicionalmente una c¨¢mara m¨¢s independiente que la C¨¢mara Baja- con una mayor¨ªa absoluta de partidarios de Duterte. Ocho de los doce senadores que no se someten a elecciones este a?o le apoyan; si se cumplen las proyecciones de los sondeos, el dirigente podr¨ªa tener aliados en al menos 18 de los 24 esca?os de la C¨¢mara Alta.

Ello dar¨ªa al presidente filipino v¨ªa libre para poner en marcha algunos de sus proyectos m¨¢s acariciados. Entre ellos, acometer una reestructuraci¨®n del sistema fiscal y una reforma de la Constituci¨®n. Con esta medida aspira a descentralizar el pa¨ªs y cambiar el car¨¢cter de la Presidencia, y eliminar los l¨ªmites temporales al mandato del jefe de Estado: hasta ahora, los presidentes filipinos cumplen un mandato ¨²nico de seis a?os y no pueden presentarse a la reelecci¨®n. Para sacar adelante un cambio de la Carta Magna, necesita el apoyo de una supermayor¨ªa del 75% en cada una de las dos C¨¢maras parlamentarias.

Duterte podr¨ªa tambi¨¦n restablecer la pena de muerte, abolida en 2006 por presiones de la Iglesia Cat¨®lica, y que el presidente filipino quiere imponer en su campa?a contra la droga. Un proyecto de ley que prev¨¦ la aplicaci¨®n de esa condena a quienes lleven encima medio kilo de marihuana, o diez gramos de coca¨ªna, hero¨ªna o ¨¦xtasis, recibi¨® el visto bueno de la C¨¢mara Baja, pero no del Senado en 2017.

Los colegios electorales tienen previsto su cierre a las 18.00 hora local , y los primeros resultados se conocer¨¢n horas m¨¢s tarde. Los nombres de los senadores ganadores podr¨ªan anunciarse durante el fin de semana.

De la mano de su padre, Sara Duterte, hija del presidente y de la que se habla como posible sucesora, aspira a renovar su cargo al frente de la alcald¨ªa de Davao, la principal ciudad del sur del pa¨ªs; el hermano de ella, Sebastian, se presenta a vicealcalde.

Hasta el momento no se han registrado incidentes de violencia significativos, aunque el mando de la Polic¨ªa filipina ha recibido denuncias de ¡°fraude masivo¡± y de aver¨ªas de m¨¢quinas para el voto electr¨®nico.

Un editorial del peri¨®dico Philippine Daily Inquirer subraya este lunes, bajo el t¨ªtulo ¡°Vote hoy, m¨¢s que nunca¡±, que ¡°la votaci¨®n de hoy depende de cu¨¢l sea la opini¨®n de cada uno con respecto al presidente Duterte. Es ciertamente un refer¨¦ndum de mitad de mandato sobre su presidencia¡±. ¡°El resultado de las elecciones de hoy -opina el diario- depender¨¢ de nuestra percepci¨®n de lo bien, o lo mal, que el mandato de Duterte ha sido para este pa¨ªs¡±.