Colombia abre una investigaci¨®n al general se?alado por cometer irregularidades en operaciones militares

La Procuradur¨ªa General de la Naci¨®n de Colombia abri¨® este lunes una investigaci¨®n al general Nicacio Mart¨ªnez "por presuntas irregularidades en las directrices dadas a los militares para mejorar los resultados en las operaciones". El ¨®rgano de control de la funci¨®n p¨²blica busca averiguar la existencia de los procedimientos revelados hace 10 d¨ªas por The New York Times sobre la aplicaci¨®n de "una pol¨ªtica al interior del Ej¨¦rcito Nacional, que podr¨ªa ser similar a la que desencaden¨® los llamados falsos positivos". En la pr¨¢ctica, seg¨²n los testimonios ofrecidos por tres oficiales al diario estadounidense, los soldados recibieron a principios de a?o instrucciones para incrementar el n¨²mero de "bajas" y capturas, poniendo as¨ª en riesgo a la poblaci¨®n civil.

"La Procuradur¨ªa decret¨® la pr¨¢ctica de pruebas con el fin de verificar la ocurrencia de conductas presuntamente irregulares, determinar si son constitutivas de falta disciplinaria, identificar e individualizar los supuestos autores, y esclarecer los motivos determinantes de tiempo, modo y lugar en las que se cometieron", se?ala un comunicado del organismo, que explica que la indagaci¨®n afecta tambi¨¦n a otros cargos del Ej¨¦rcito. Mart¨ªnez, comandante de la fuerza terrestre, se mostr¨® "respetuoso de la competencia de la Procuradur¨ªa". "Estar¨¦ presto a contribuir con transparencia y con la tranquilidad de haber obrado siempre en el marco de la ley. Nuestro Ej¨¦rcito y su comandante se rigen por los est¨¢ndares de respeto y protecci¨®n del orden constitucional", asegur¨® el general desde las redes sociales.?

El caso, sin embargo, despert¨® los peores fantasmas del pasado. El militar acab¨® por derogar la directiva cuestionada. En ella se instaba a los responsables de las distintas ¨¢reas a que compararan la cantidad de muertes del a?o pasado con este. El documento revivi¨® el esc¨¢ndalo de los falsos positivos, esto es, el asesinato sistem¨¢tico de miles de civiles despu¨¦s presentados como guerrilleros ca¨ªdos en el conflicto armado entre el Estado y las FARC. Seg¨²n un informe de la Fiscal¨ªa publicado el domingo por El Espectador hubo al menos 2.248 ejecuciones extrajudiciales entre 1998 y 2014, aunque el 97% de los casos se dieron de 2002 a 2008, entre el primer y el segundo mandato del expresidente ?lvaro Uribe. El entorno pol¨ªtico uribista m¨¢s radical fue precisamente el que con m¨¢s vehemencia atac¨® a The New York Times por la investigaci¨®n, cayendo tambi¨¦n en el se?alamiento p¨²blico de sus autores.

El presidente Iv¨¢n Duque ¡ªrepresentante del partido fundado por Uribe, el Centro Democr¨¢tico, aunque lejano a ¨¦l al menos en las formas y en los prop¨®sitos¡ª anunci¨® la semana pasada la formaci¨®n de una comisi¨®n encargada de estudiar los m¨¦todos de las operaciones militares y el plan de incentivos que apuntan a Mart¨ªnez. "He decidido conformar una Comisi¨®n presidencial independiente que haga un an¨¢lisis riguroso de todas las ¨®rdenes manuales y documentos operacionales, y que pueda evaluar con profundidad c¨®mo esas normas, procedimientos y protocolos se ajustan a las normas internacionales y nacionales en materia de derechos humanos y en materia de derecho internacional humanitario", explic¨®. Los integrantes de esa comisi¨®n son el exministro Hernando Yepes, el expresidente de la Corte Constitucional Mauricio Gonz¨¢lez y el exprocurador Alfonso G¨®mez M¨¦ndez.

Mart¨ªnez fue nombrado al frente del Ej¨¦rcito colombiano el pasado diciembre. A su vez, este y el ministro de Defensa, Guillermo Botero, renovaron la c¨²pula del cuerpo. En febrero la ONG Human Rights Watch (HRW) public¨® un informe que denuncia la restructuraci¨®n de esta fuerza p¨²blica. "HRW ha encontrado pruebas que vincular¨ªan a ocho de estos militares, as¨ª como al general Mart¨ªnez Espinel, con falsos positivos y otros abusos", se?al¨® la organizaci¨®n. ¡°Las autoridades colombianas deber¨ªan impulsar investigaciones serias contra los generales cre¨ªblemente implicados en falsos positivos y no designarlos en los puestos m¨¢s importantes del Ej¨¦rcito¡±, alert¨® ya entonces Jos¨¦ Miguel Vivanco, su director para las Am¨¦ricas.