La econom¨ªa brasile?a entra en terreno negativo por primera vez desde finales de 2016

La econom¨ªa brasile?a retrocedi¨® un 0,2% en el primer trimestre del a?o respecto a los tres ¨²ltimos meses de 2018, seg¨²n datos divulgados este jueves por el Instituto Brasile?o de Geograf¨ªa y Estad¨ªstica (Ibge). El resultado, el primero negativo desde el tramo final de 2016, sit¨²a al pa¨ªs m¨¢s grande y poblado de Am¨¦rica Latina al borde de la llamada recesi¨®n t¨¦cnica, un t¨¦rmino que en Brasil se conoce por un periodo de dos trimestres consecutivos con el PIB a la baja. La econom¨ªa brasile?a hab¨ªa avanzado un 0,1% en el ¨²ltimo trimestre del a?o pasado, pero ese resultado a¨²n est¨¢ sujeto a revisi¨®n, que podr¨ªa ser a la baja. El mal dato eleva la presi¨®n sobre Jair Bolsonaro, que hizo de la recuperaci¨®n econ¨®mica una de sus grandes banderas en campa?a.

El cuarto trimestre de 2016 fue el ¨²ltimo de la recesi¨®n en la que se vio sumida la econom¨ªa brasile?a durante dos a?os. Esta vez, en cambio, la cifra en rojo tiene que ver, en gran medida, con los retrocesos registrados en la industria (-0,7%) y en el sector agropecuario (-0,5%). Tambi¨¦n con la fuerte ca¨ªda registrada en las industrias extractivas (-6,3%), en buena medida por el accidente en la represa de la minera Vale en Brumadinho (sureste) el pasado 25 de enero, en el que murieron casi 300 personas. Vale es una de las mayores exportadoras del pa¨ªs. ¡°El accidente de Brumadinho y el consecuente estado de alerta de otros puntos de miner¨ªa afectaron todo el sector¡±, informa la gerente de cuentas nacionales del Ibge, Claudia Dion¨ªsio, en la nota explicativa que acompa?a al dato.

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El fantasma de la recesi¨®n ronda a Brasil desde que se conoci¨® el registro del ¨²ltimo trimestre de 2018 ¨Cun escas¨ªsimo crecimiento del 0,1% en comparaci¨®n con el trimestre anterior¨C, que a¨²n puede ser revisado a la baja. La dificultad del Gobierno de Jair Bolsonaro de convencer al Congreso para que apruebe la reforma del sistema de pensiones, su principal bandera econ¨®mica, y el clima de inseguridad pol¨ªtica alimentado en este inicio de mandato han hecho mella sobre el gigante sudamericano. A estos factores se suma el severo ajuste fiscal, que inhibe uno de los motores en los que descansa toda econom¨ªa y que frena las inversiones p¨²blicas.

Algunas se?ales que emite la econom¨ªa brasile?a preocupan especialmente a los economistas. Las inversiones de las empresas, un rubro en el que se incluyen las compras de maquinaria y los proyectos de expansi¨®n, sufrieron una merma del 1,7% respecto al cuarto trimestre del a?o pasado. Con esta ca¨ªda son ya seis meses consecutivos con la inversi¨®n privada a la baja. "Eso indica que la baja tasa de inter¨¦s [6,5%, el nivel m¨¢s bajo en lo que va de siglo] no est¨¢ encontrando adherencia en la realidad y el optimismo empresarial con el nuevo Gobierno no se traduce en inversiones", explica Andr¨¦ Perfeito, economista jefe de Necton Inversiones. Las familias, sin embargo, siguen comprando. Aunque con moderaci¨®n: seg¨²n IBGE, el consumo privado creci¨® un modesto 0,3% intertrimestral.

La inseguridad de los empresarios es una variable cr¨ªtica, observa Jo?o Luiz Mascolo, profesor de econom¨ªa de la universidad Insper. ¡°Las inversiones est¨¢n mediocres porque falta confianza en el futuro¡±, explica. As¨ª, es m¨¢s f¨¢cil invertir en Bolsa que en proyectos productivos, a?ade. La reforma de las pensiones, agrega, es una v¨ªa para el retorno de la confianza, una variable cr¨ªtica en econom¨ªa.

Pero el desempleo sigue siendo la mayor preocupaci¨®n: alcanza ya a m¨¢s de 13 millones de personas y los especialistas ponen el acento en su efecto de inhibici¨®n del consumo por el temor de los brasile?os a ser los pr¨®ximos en perder el empleo. La inseguridad en la oferta y en la demanda es uno de los factores decisivos en el frenazo de la econom¨ªa, pero hay quien apuesta a que los pr¨®ximos meses ser¨¢n mejores. El Ejecutivo entrante apuesta por incentivar el sistema productivo con medidas de apoyo a proyectos de infraestructura, por ejemplo, y con un plan para reducir la burocracia empresarial para facilitar su inversi¨®n. Sus efectos est¨¢n a¨²n por ver.

El resultado presentado por la econom¨ªa brasile?a no ha sorprendido al mercado ni al Gobierno ya que se esperaba que entrara en terreno negativo. El propio ministro de Econom¨ªa, Paulo Guedes, lo ha reconocido. "Hemos dicho que la econom¨ªa brasile?a est¨¢ estancada. El modelo intervencionista derrib¨® la tasa de crecimiento de Brasil. Nuestro promedio de crecimiento ha sido del 0,6% en los ¨²ltimos ocho a?os. La econom¨ªa est¨¢ parada a la espera de las reformas", declara.

Sin embargo, los n¨²meros ponen m¨¢s presi¨®n al presidente Jair Bolsonaro, que en los ¨²ltimos meses ha realizado una serie de recortes en el presupuesto p¨²blico para intentar equilibrar las cuentas. La gran apuesta del presidente brasile?o ¡ªy tambi¨¦n del mercado¡ª para intentar impulsar la econom¨ªa es aprobar en el Congreso la reforma de pensiones. Lo que se espera es que dicha reforma pueda equilibrar las cuentas p¨²blicas a largo plazo. La aprobaci¨®n ser¨ªa una se?al importante para el mercado, pues aumentar¨ªa la capacidad de inversi¨®n del Gobierno y, con ello, tambi¨¦n el clima de confianza. "Desde el punto de vista del resultado fiscal, la reforma va a tardar un poco para dar resultado. Y en el corto plazo, no hace diferencia en el d¨¦ficit p¨²blico. Lo positivo es la se?alizaci¨®n, lo que puede ayudar en la aprobaci¨®n de otras reformas, como la tributaria", afirma Jo?o Luiz Mascolo, profesor de econom¨ªa del Insper.

La aprobaci¨®n del nuevo sistema de pensiones, sin embargo, necesita eludir un desaf¨ªo importante: los hechos del propio Bolsonaro. El presidente brasile?o, que ha adoptado un discurso agresivo contra el Congreso, acusa a los congresistas de intentar timar al Gobierno a cambio de cargos. El conflicto entre ¨¦l y los diputados y senadores ha resultado en la dificultad de avanzar con la reforma. El pasado mi¨¦rcoles, tras la presi¨®n por la inmovilidad del tema en el Congreso, Bolsonaro fue a una cita con los l¨ªderes de la C¨¢mara y del Senado, adem¨¢s del presidente del Supremo Tribunal Federal. El objetivo era elaborar un pacto de no agresi¨®n entre los tres poderes en favor de las medidas necesarias para recuperar la econom¨ªa, pero no hubo un acuerdo entre ellos.