Miles de personas salen a la calle en el Reino Unido contra el cierre del Parlamento brit¨¢nico

Han sido varios los movimientos y asociaciones que han organizado esta protesta, aunque el liderazgo lo ha asumido Momentum, la corriente interna del Laborismo que impuls¨® a Jeremy Corbyn al liderazgo del partido y multiplic¨® con su discurso y actuaciones el n¨²mero de afiliados de la formaci¨®n. "Tenemos a un millonario elegido por un escaso margen que est¨¢ encantado de explotar las fallas de nuestra defectuosa democracia para forzar un Brexit sin acuerdo y aliarse con Trump", ha dicho la coordinadora nacional de Momentum, Laura Parker, a la vez que animaba de nuevo a la ciudadan¨ªa a sumarse a la manifestaci¨®n.

John McDonnell, el n¨²mero dos del Partido Laborista, forma parte de los oradores que se van a dirigir a los concentrados ante las puertas de Downing Street, la residencia oficial de Boris Johnson.

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Las im¨¢genes de las manifestaciones

Rebeli¨®n pol¨ªtica, judicial y en la calle para frenar a Boris Johnson en la recta final del Brexit

Johnson acusa a la oposici¨®n de minar su fuerza negociadora en Bruselas

Scotland Yard ha desplazado hasta los alrededores del Parlamento un n¨²mero considerable de agentes para prevenir cualquier incidente.

En Londres, decenas de miles de personas se han congregado frente a la verja que protege la sede del Gobierno. "?Si t¨² cierras nuestro Parlamento, nosotros cerraremos las calles!", o "Boris Johson, que te jodan. Vuelve a Eton [el colegio privado y elitista donde se educ¨®]" son algunos de los c¨¢nticos que se pod¨ªan escuchar, combinados con m¨²ltiples pitidos y abucheos.

"Lo que ha ocurrido se llama golpe de Estado, y la respuesta debe ser que ocupemos el Parlamento", explicaba Gabriel Adams, de 55 a?os, que se hab¨ªa desplazado hasta Londres desde la localidad de Northhamptonshire. Este gerente de la construcci¨®n no pod¨ªa evitar su decepci¨®n ante el n¨²mero de personas congregadas. Eran muchos, pero no tantos como las expectativas de las ¨²ltimas horas hac¨ªan prever. "Lo que est¨¢s viendo no es m¨¢s que el principio del fin", intentaba justificar. "La desobediencia civil va a ir en aumento, y ser¨¢n decenas de miles los que acudan a la manifestaci¨®n convocada para el 16 de octubre".

Adams se hab¨ªa abierto paso hasta codazos hasta la misma verja de Downing Street, donde unos 12 polic¨ªas de Scotland Yard vigilaban a los congregados con unos rostros en los que se mezclaba el hast¨ªo y la incomodidad. Unos metros m¨¢s atr¨¢s, dentro del patio del recinto, se ve¨ªa a otros ocho agentes, pero estos ¨²ltimos provistos cada uno con un arma de asalto. Un hombre mayor, a punto del desmayo, solicitaba poder abandonar la muchedumbre y pasar al otro lado. Los polic¨ªas le atendieron de inmediato.

"Mis padres vivieron 17 a?os en Francia. Se beneficiaron de una movilidad interna en Europa que este Gobierno quiere eliminar para la siguiente generaci¨®n de j¨®venes", contaba Nicolette Anderson, apoyada junto a Adams en la verja. Es directora de un departamento de recursos humanos, tiene 55 a?os, y curiosamente da ya por amortizada su trayectoria vital. Ha acudido a la manifestaci¨®n para respaldar a la gente que vive y trabaja en el Reino Unido y lleg¨® de otras partes del mundo: "Los inmigrantes han construido el actual Reino Unido", explica.

Johnson pas¨® este viernes a la defensiva y acus¨® a sus detractores de estar minando su capacidad negociadora en Bruselas, al transmitir a los 27 la idea de que los diputados todav¨ªa pueden evitar un Brexit sin acuerdo. ¡°Me temo que cuanto m¨¢s crean nuestros amigos y socios europeos que todav¨ªa puede evitarse el Brexit ¡ªde que el Parlamento puede lograr que el Reino Unido siga dentro de la UE¡ª, menos dispuestos estar¨¢n a darnos el acuerdo que necesitamos¡±, dijo el viernes el primer ministro a Sky News en una ¡°improvisada¡± entrevista. El primer ministro no se ha dirigido espec¨ªficamente a los ciudadanos que participan en la protesta de este s¨¢bado, pero desde su entorno se acusa a la oposici¨®n laborista de agitar la revuelta popular para ganar en las calles lo que no ha logrado en Westminster.

Los grupos de la oposici¨®n, liderados por el laborista Jeremy Corbyn, se disponen a exprimir el breve plazo que se abre el pr¨®ximo martes e impulsar en el Parlamento un debate de emergencia. Pretenden aprobar, contra reloj, una resoluci¨®n con fuerza legal que obligue al Gobierno a pedir a Bruselas una nueva pr¨®rroga. E incluso, si es posible, revertir la decisi¨®n del cierre del periodo de sesiones, previsto a partir del 10 de septiembre. Junto a esa v¨ªa formal, un grupo de m¨¢s de 50 diputados procedentes de los principales partidos han amenazado ya, en un texto p¨²blico remitido al diario The Guardian, con constituir una ¡°C¨¢mara de los Comunes alternativa¡± para burlar la suspensi¨®n decidida por Johnson. ¡°No podemos permitir que el Gobierno esquive el escrutinio debido en un momento de crisis nacional¡±, dicen.