El Ej¨¦rcito ruso patrulla la zona entre las fuerzas turcas y las de El Asad
Mosc¨² afirma que no aceptar¨¢ choques entre las tropas de Damasco y las respaldadas por Ankara
El equilibrio de poder en Oriente Pr¨®ximo ha dado un vuelco. Militares rusos han comenzado este martes a patrullar el territorio que separa a los rebeldes sirios respaldados por Turqu¨ªa y al Ej¨¦rcito regular de Bachar el Asad en el norte de Siria. Con este paso, Mosc¨² consolida su papel de mediador y se convierte en el agente de poder de la regi¨®n. La sorpresiva retirada de EE?UU, dejando a su suerte a las milicias kurdas ¡ªsus aliados contra el ISIS desde hace un lustro¡ª, a las que Ankara considera terroristas, ha reorganizado viejas alianzas.
El avance de Turqu¨ªa sobre Siria ha dado un nuevo giro a una guerra que ya ha cumplido ocho a?os y supone un desaf¨ªo a la creciente condena a Ankara por parte de sus aliados occidentales. La ofensiva ha agudizado las tensiones dentro de la OTAN, de la que Turqu¨ªa es miembro.
El enviado especial de Mosc¨² para Siria, Alexander Lavrentiev, ha recalcado este martes que Rusia es contraria a la operaci¨®n ordenada por el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, y que no permitir¨¢ el enfrentamiento entre las tropas turcas y las fuerzas sirias. El Kremlin, jugador principal en el tablero de la guerra siria, respalda desde 2015 al r¨¦gimen de Bachar El Asad y es, junto a Ir¨¢n, su principal valedor. Rusia empez¨® a intervenir en Siria aquel a?o para ayudar a su aliado El Asad a rechazar el avance de las milicias contrarias al r¨¦gimen. Mosc¨² ha criticado durante a?os la presencia de EE?UU en Siria. ¡°[La confrontaci¨®n] ser¨ªa simplemente inaceptable. Y por tanto no permitiremos que suceda, por supuesto¡±, ha incidido Lavrentiev durante una visita a Emiratos ?rabes, donde viaj¨® junto al presidente ruso, Vlad¨ªmir Putin.
¡°Siempre hemos instado a Turqu¨ªa a evitar intervenir militarmente en Siria¡±, ha criticado el enviado del Kremlin, que advirti¨® a Ankara que no tiene derecho a desplegar sus fuerzas en Siria de forma permanente. Seg¨²n los acuerdos previos, apunt¨® Lavrentiev, el Ej¨¦rcito turco solo puede incursionar en Siria y avanzar entre cinco y 10 kil¨®metros. Yuri Ushakov, asesor de pol¨ªtica exterior del presidente ruso, dijo el lunes que la ofensiva militar de Ankara ¡°no era exactamente compatible¡± con la integridad territorial siria. Rusia apoya a El Asad, pero tambi¨¦n ha desarrollado un importante v¨ªnculo con el presidente turco.
Las fuerzas estadounidenses ya han abandonado la ciudad estrat¨¦gica de Manbij, donde hab¨ªan tenido puestos de avanzada desde 2017, cuando entraron para evitar una batalla sobre la ciudad entre sus entonces aliados, las milicias kurdas, y los combatientes turcos. Un papel que ahora ha asumido Rusia.
Las tropas sirias y turcas compiten hoy para controlar grandes partes del norte de Siria, dominadas por las milicias kurdas hasta que Ankara lanz¨® su ofensiva el pasado mi¨¦rcoles. El Ej¨¦rcito sirio ha tomado unos 1.000 kil¨®metros cuadrados en torno a Manbij, seg¨²n los c¨¢lculos del Ministerio de Defensa ruso. Esa ciudad sigue siendo un objetivo militar importante para Turqu¨ªa, seg¨²n ha reiterado este martes Erdogan. Adem¨¢s, los convoyes militares sirios han comenzado a moverse por el norte del pa¨ªs en zonas donde solo ten¨ªan una presencia simb¨®lica desde el comienzo del conflicto.
V¨ªdeos que circulan en las redes sociales y tambi¨¦n otros registrados por periodistas rusos especializados muestran a fuerzas rusas caminando por una base militar estadounidense evacuada recientemente en el norte de Siria. Mosc¨² ha tomado posiciones ya en otras partes de Siria. Seg¨²n un comunicado de Defensa, la polic¨ªa militar rusa patrulla ya el noreste del distrito de Manbij a lo largo de la l¨ªnea de contacto entre el Ej¨¦rcito turco y las tropas de El Asad.
Tras el anuncio de Donald Trump de retirar las tropas de EE?UU, las Fuerzas Democr¨¢ticas Sirias (FDS), en las que se integra la milicia kurda YPG ¡ªque Ankara considera terroristas por sus lazos con el PKK, grupo armado kurdo que act¨²a en Turqu¨ªa desde 1983 con atentados y ataques a las fuerzas de seguridad¡ª, acusaron a Washington de traicionarles. Y buscaron la forma de protegerse ante el avance de fuerzas leales a Ankara.
La f¨®rmula pasa por una alianza negociada por Mosc¨² con el r¨¦gimen de El Asad, que les presta refuerzos para proteger sus posiciones fronterizas. Varios analistas sostienen, adem¨¢s, que las conversaciones a¨²n est¨¢n en marcha y que el siguiente objetivo es crear una zona de exclusi¨®n a¨¦rea controlada por el Kremlin. Con este movimiento, el ruso y el turco pronto podr¨ªan convertirse en los Ej¨¦rcitos internacionales con mayor peso en el norte de Siria.
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