Jaime Bonilla, el beisbolista fiel

Durante los momentos m¨¢s duros de Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador, en las derrotas de 2006 y 2012, desahuciado por su partido, por los medios y por buena parte de la sociedad mexicana por su terca resistencia ante los reveses electorales, s¨®lo un peque?o grupo permaneci¨® a su lado. Entre ellos, estaba un empresario de Baja California, que puso al servicio del entonces eterno candidato toda la artiller¨ªa de radios, televisiones abiertas y por cable de su emporio medi¨¢tico, l¨ªder en el estado norte?o. Con el tiempo, aquel empresario se termin¨® convirtiendo en candidato de Morena y este verano arras¨® en las elecciones regionales. Es Jaime Bonilla, el hombre que ha catapultado a L¨®pez Obrador en un Estado dominado durante d¨¦cadas por la derecha, pero que ahora est¨¢ provocando una v¨ªa de agua en el partido por su pol¨¦mica apuesta de extender el mandato.

La decisi¨®n de ampliar de dos a cinco a?os su permanencia en el cargo, que ha supuesto una reforma legislativa de urgencia y una consulta plebiscitaria con una participaci¨®n de poco m¨¢s de 50.000 personas en un estado de m¨¢s de 3 millones de habitantes, tiene enfrente un gigante muro institucional. La Suprema Corte de Justicia (SCJ) admiti¨® a tr¨¢mite la semana pasada cuatro acciones de inconstitucionalidad presentadas por el resto de partidos. Mientras que el Instituto Nacional Electoral ha anunciado una campa?a ¡°para salvaguardar la democracia¡± coronada por otro recurso ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial. Dentro de Morena, Tatiana Clouthier, coordinadora de la campa?a presidencial, ha calificado la medida de ¡°aberraci¨®n¡± y el presidente de la C¨¢mara de Diputados Porfirio Mu?oz Ledo lleg¨® a proponer incluso la desaparici¨®n de poderes en el Estado norte?o.

En el fondo de la pol¨¦mica, se extiende la sombra de uno de los mayores tab¨²s pol¨ªticos del M¨¦xico moderno, el principio de no reelecci¨®n de los gobernantes. La no reelecci¨®n fue la bandera de Francisco Madero, uno de los faros ideol¨®gicos del actual presidente, durante el levantamiento contra el dictador Porfirio D¨ªaz y est¨¢ marcado a fuego en la constituci¨®n desde 1933. Durante todo el conflicto, L¨®pez Obrador se ha mantenido sin mantenido de perfil, encomendando el resultado final a la decisi¨®n de la SCJ y obviando cualquier cr¨ªtica al mandatario norte?o.

Ambos se conocieron por primera vez en 2005, en una visita del entonces empresario Bonilla al despacho del todav¨ªa jefe de Gobierno de Ciudad de M¨¦xico. ¡°Antes incluso de ese momento, ya admiraba mucho el perfil de Andr¨¦s Manuel, su pensamiento pol¨ªtico y su capacidad para comunicar sus ideas. Y a partir de aqu¨ª nacen un aprecio y una amistad verdadera y rec¨ªproca¡±, cuenta Marco Antonio Bl¨¢squez, mano derecha de Bonilla durante m¨¢s de 30 a?os en sus empresas y exsenador por Morena.

Hijo de un militar r¨ªgido pero progresista en la estela de L¨¢zaro C¨¢rdenas (otro de los t¨®tems para actual presidente), ingeniero convertido en hombre de negocios exitoso a ambos lados de la frontera, Bonilla, seg¨²n su entorno, proyecta en L¨®pez Obrador la idea de un pol¨ªtico honesto y con la conciencia social que tambi¨¦n admiraba su padre. Su carrera pol¨ªtica arranc¨® como diputado por el PRD ¨Cla izquierda cl¨¢sica mexicana¨C, para pasarse pronto a las filas del nuevo proyecto de L¨®pez Obrador. El ascenso en Morena fue mete¨®rico: en septiembre de 2018 obtiene el esca?o de senador, tres meses m¨¢s tarde se convierte en superdelegado del Estado, para otros tres meses despu¨¦s lanzarse como candidato a Gobernador.

Por el fulgurante camino, ha dejado algunas heridas abiertas. Jaime Mart¨ªnez Veloz, un veterano pol¨ªtico de la regi¨®n forjado en el priismo, form¨® parte de la campa?a presidencial de Morena en Baja California. Mart¨ªnez sostiene que desde la atalaya de senador, Bonilla ya ten¨ªa una gran influencia sobre los movimientos del partido en el Estado, y que durante meses le insisti¨® para que ¨¦l fuera el candidato a gobernador. ¡°?l ¨Ccuenta el pol¨ªtico¨C no quer¨ªa un mandato tan corto, se ve¨ªa en un proyecto a seis a?os. Pero de repente todo cambi¨®. Empezaron a filtrar a los medios que ya buscaban ampliar el periodo y que el propio presidente le hab¨ªa presionado para que ¨¦l fuera el candidato¡±. Mart¨ªn acabar¨ªa rompiendo con Morena y compitiendo con Bonilla como candidato por el PRD, pese a haber sido el hombre que le hab¨ªa presentado a L¨®pez Obrador en aquella reuni¨®n de 2005, sellada con botellas de vino del valle californiano de Napa.

La sinton¨ªa del presidente mexicano y el actual gobernador tambi¨¦n ha sido engrasada por el b¨¦isbol, el deporte favorito del presidente, capaz de recordar los hitos del partido anterior en plena rueda de prensa pol¨ªtica. Bonilla fue el impulsor en los ochenta el equipo local de Tijuana, Los Potros, del que fue gerente. En 2016, L¨®pez Obrador fue uno de los invitados a su palco en el estadio de los Padres de San Diego para presenciar el juego de las estrellas de la liga estadounidense.

Carrera pol¨ªtica en EE UU?

Bonilla tiene doble nacionalidad y lleg¨® a ocupar un cargo en un distrito del condado de San Diego. De hecho, uno de sus padrinos pol¨ªticos es Cruz Bustamante, el vicegobernador dem¨®crata de California que perdi¨® la batalla contra Schwarzenegger en 2003. Su querencia por EE UU ha sido uno de los filones donde le han golpeado sus adversarios, quienes le acusan de estar detr¨¢s de la construcci¨®n de una inmensa desalinizadora en la costa californiana mexicana para beneficio de los vecinos del norte.

Durante su cargo al frente del servicio de aguas del distrito californiano, Bonilla declar¨® ante un juez por un caso de supuestos sobornos. El empresario mexicano reconoci¨® entonces que, en el marco del proceso, hab¨ªa sido informante para el FBI durante al menos cinco meses, incluyendo grabaciones secretas de reuniones con otros empresarios y pol¨ªticos. Tampoco se ha salvado de ser vinculado con las sombras de la delincuencia organizada. La oposici¨®n ha se?alado la presencia en su equipo de Amado Cruz Anguiano, un empresario que lleg¨® a pasar por la c¨¢rcel en los 90 por lavar de dinero para cartel de Tijuana.?

Tambi¨¦n le acusan de connivencia tanto con el PRI ¨Ces amigo personal exgobernador Xicot¨¦ncatl Leyva, otro priista reconvertido en morenista tras ser repudiado por Carlos Salinas¨C como con la derecha panista, a la que ha dado entrada en su administraci¨®n y con los que cont¨® para sacar adelante su reforma. ¡°Hay que entender que no viene de un partido pol¨ªtico, toda su vida ha sido un empresario. Busca el progreso y la productividad para Baja California y lo que menos le interesa es que sea de un partido o de otro: es un se?or pragm¨¢tico¡±, a?ade Bl¨¢squez.

La primera decisi¨®n tras tomar posesi¨®n este viernes fue nombrar como Fiscal General del Estado a su amigo, abogado personal y corporativo durante a?os. Guillermo ¡°Titi¡± Ruiz fue abogado adem¨¢s del empresario y exalcalde de Tijuana Jorge Hank, acusado de corrupci¨®n y asesinato. El nuevo fiscal del quinto estado m¨¢s violento de M¨¦xico tambi¨¦n fue el hombre que bautiz¨® a una de las hijas del gobernador. Una nueva apuesta de Bonilla por la fidelidad.