Miguel Pizarro, delegado de Guaid¨® ante la ONU: ¡°El informe de Bachelet le da piso pol¨ªtico a nuestra labor¡±

El ¨²ltimo informe sobre Venezuela de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de Naciones Unidas, Michelle Bachelet, conocido la semana pasada, dibuja un panorama aterrador. El estudio documenta el control ejercido por grupos criminales en las zonas mineras del sur del pa¨ªs, la falta de independencia del sistema de justicia y las violaciones continuadas a los derechos humanos. En el equipo de Juan Guaid¨® hay un dirigente encargado de la interlocuci¨®n con la ONU y del seguimiento de esos atropellos. Miguel Pizarro (Caracas, 1988), licenciado en Comunicaci¨®n Social, entr¨® en pol¨ªtica muy joven. Es diputado electo en la actual Asamblea Nacional y militante de Primero Justicia. Su cargo es, formalmente, el de delegado ante Naciones Unidas de la presidencia interina de Guaid¨®, quien, pese a tener el respaldo de casi 60 pa¨ªses, no goza de pleno reconocimiento dentro de la organizaci¨®n. En esta conversaci¨®n con EL PA?S, realizada por v¨ªa telem¨¢tica, Pizarro reivindica el espacio pol¨ªtico logrado por las fuerzas democr¨¢ticas venezolanas y el fundamento de las denuncias en contra de la gesti¨®n de Maduro en estos a?os.

Pregunta. Hay gente en Venezuela molesta con el segundo informe de Michelle Bachelet. Existe la sensaci¨®n de que se qued¨® corto.

Respuesta. Hay un proceso natural de desgaste y demanda de v¨ªctimas y organizaciones. El sistema de Naciones Unidas tiene un alcance, pero quien debe tomar las decisiones para detener esta tragedia es el r¨¦gimen de Nicol¨¢s Maduro. Naciones Unidas hab¨ªa premiado a Venezuela por sus supuestos logros sociales en los a?os de Ch¨¢vez a trav¨¦s de las FAO y la Unesco. Antes se negaban las violaciones a los derechos humanos: ahora se reconoce que en la sede de Contrainteligencia Militar dan palizas, electrocutan gente en los interrogatorios, se a¨ªslan familiares, se acosan mujeres. Se tiende a creer que los informes de Naciones Unidas constituyen un paso definitivo para resolver el problema. Lo trascendente del informe de Bachelet es que le da piso pol¨ªtico a nuestra labor. Naciones Unidas es el ente que hace llamados para que levanten las sanciones a Corea del Norte, a Ir¨¢n, los que cuestionan el bloqueo a Cuba. En el informe se asienta que un tercio de la poblaci¨®n sufre inseguridad alimentaria y que siete millones de venezolanos requieren asistencia humanitaria urgente. Denuncia la crisis del sistema de salud y del sistema de servicios del pa¨ªs. ?Que no es suficiente? Naciones Unidas ha sido uno de los ¨²ltimos reductos del r¨¦gimen de Maduro para hacer diplomacia. En septiembre viene una evoluci¨®n de este informe, el mandato final de la misi¨®n de verificaci¨®n de hechos. Es la primera vez que vamos a tener mapas con cadenas de mando en los cr¨ªmenes. Para llegar hasta ah¨ª hemos tenido que transitar un a?o entero en gestiones burocr¨¢ticas. Estos procesos son muy lentos. Hemos logrado cosas importantes.

P. ?Usted espera que esas conclusiones tengan impacto en los tribunales internacionales de derechos humanos?

R. Si la Misi¨®n de Verificaci¨®n de Hechos, de oficio, determina responsabilidades en las cadenas de mando, esto va al sistema de justicia universal. Estos informes son parte del sustento de la demanda que varios pa¨ªses tienen contra Maduro en la Corte Penal Internacional. Maduro ha sido demandado por Colombia, Brasil, Canad¨¢, Francia, por varios pa¨ªses de la regi¨®n, y estos informes son los que permiten darle sustento. Por eso es tan importante que lo expuesto se ajuste a lo que ha sucedido.

P. ?Admitir¨ªa que el informe es insuficiente?

R. Absolutamente. Hay una comprensi¨®n de que eso es as¨ª. Los procesos de Naciones Unidas siempre procuran una balanza entre hablar duro y preservar el acceso al pa¨ªs.

P. El Gobierno de Maduro, por el contrario, afirma que es un genuino garante de los derechos humanos y los derechos constitucionales en Venezuela.

R. Esa narrativa, como otras del chavismo, ha entrado en una grave crisis. Tambi¨¦n sus posturas indigenistas. El informe revela que todo eso es letra muerta, no es exageraci¨®n nuestra, en el sur del pa¨ªs la explotaci¨®n anarquizada del oro ha tra¨ªdo grupos irregulares, cr¨ªmenes ambientales, tr¨¢fico de personas, explotaci¨®n de mujeres, masacres a ind¨ªgenas, expoliaci¨®n de sus tierras. Todo eso est¨¢ documentado.

P. ?Tiene alguna efectividad el trabajo diplom¨¢tico de Maduro en el seno de la ONU?

R. Cuando Naciones Unidas dice algo que les conviene, lo exaltan, invocan el derecho internacional, los principios de paz, amistad y cooperaci¨®n. Cuando Naciones Unidas afirma algo que los deja mal parados, entonces el organismo est¨¢ controlado por las grandes potenciales imperiales y los sectores oscuros del capitalismo. Al sistema de Naciones Unidas el Gobierno de Maduro le invierte mucho tiempo y esfuerzos.

P. ?D¨®nde est¨¢ la zona de influencia del chavismo en la pol¨ªtica internacional?

R. En el Movimiento de los [pa¨ªses] no alineados ellos tienen su piso pol¨ªtico m¨¢s importante. Eso ha venido mermando. Pero ellos ganaron la silla para ocupar un puesto en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU. Una amarga iron¨ªa que trae consigo su reflexi¨®n: en la oposici¨®n tenemos con nosotros al mundo democr¨¢tico, a las naciones hist¨®ricamente m¨¢s cercanas, a alguno de los pa¨ªses m¨¢s poderosos, con los bloques regionales m¨¢s importantes, pero que hay un mundo que todav¨ªa se entiende con Maduro.

P. ?C¨®mo es la relaci¨®n de la oposici¨®n con Naciones Unidas?

R. Luego de un enorme esfuerzo, tenemos canal directo con la comisionada Bachelet, con el secretariado, con las agencias humanitarias. Han entendido que este es un movimiento genuino, democr¨¢tico, hombres y mujeres v¨ªctimas de una violaci¨®n masiva de derechos humanos, y que nuestra exigencia, desde hace seis a?os, es la misma: que con nuestro voto podamos decidir libremente nuestro futuro.