Un coronel del Ej¨¦rcito de Colombia, destituido por haber ordenado el asesinato de un exguerrillero
La Procuradur¨ªa sanciona a cinco militares por el crimen de Dimar Torres que revivi¨® el fantasma de las ejecuciones extrajudiciales
La Procuradur¨ªa de Colombia ha sancionado este martes a cinco militares, entre ellos un coronel, por el atroz crimen de Dimar Torres, un excombatiente de la extinta guerrilla de las FARC dedicado a labores agr¨ªcolas que fue asesinado ¡°a sangre fr¨ªa¡± el 22 de abril de 2019 en la regi¨®n del Catatumbo, en el departamento de Norte de Santander, fronterizo con Venezuela. Torres es uno de los m¨¢s de doscientos firmantes del acuerdo de paz que han sido asesinados en diversas circunstancias en los casi cuatro a?os transcurridos desde que se sell¨® el pacto.
El Ministerio P¨²blico destituy¨® a Jorge Armando P¨¦rez Am¨¦zquita, un teniente coronel retirado del Ej¨¦rcito, para entonces comandante del batall¨®n involucrado en el crimen, y lo inhabilit¨® por 20 a?os para ocupar cargos p¨²blicos por considerarlo ¡°determinador, provocador e instigador¡± de la muerte del exguerrillero, catalogada como homicidio en persona protegida. Tambi¨¦n destituy¨® e inhabilit¨® por periodos de al menos 12 a?os a tres soldados y al cabo segundo Daniel Eduardo G¨®mez Robledo.
El coronel P¨¦rez Am¨¦zquita ¡°fue quien conmin¨® al cabo G¨®mez Robledo a asesinarlo a sangre fr¨ªa¡±, asegura el fallo, como parte del deseo de vengar la muerte de un soldado ocurrida unos d¨ªas antes en un campo minado, con la que Torres no ten¨ªa ninguna relaci¨®n. ¡°Lo detuvo, lo requis¨®, le dispar¨® por la espalda y lo remat¨® con un tiro en la cara¡±, asegura la Procuradur¨ªa de Colombia. El cabo ya hab¨ªa sido condenado a 20 a?os de c¨¢rcel como autor material. Los otros tres soldados ayudaron a ocultar el cuerpo y otras evidencias, sostiene el ente de control. La defensa de los militares anunci¨® que apelar¨¢ la decisi¨®n, seg¨²n informa el peri¨®dico El Tiempo.
Dimar Torres fue baleado en circunstancias que no hab¨ªan sido del todo esclarecidas. Tanto la Fuerza Alternativa Revolucionaria del Com¨²n ¨Cel partido pol¨ªtico que hered¨® las siglas de las FARC en virtud del acuerdo de paz¨C como los lugare?os denunciaron casi de inmediato tanto el asesinato como el intento de los militares por enterrar el cad¨¢ver. Sin embargo, el entonces ministro de Defensa, Guillermo Botero, sostuvo en un primer momento que hab¨ªa muerto en un forcejeo al intentar arrebatarle el fusil al cabo.
Adem¨¢s de agitar el recuerdo de los mal llamados ¡°falsos positivos¡± ¨C el asesinato de civiles por parte de militares para presentarlos como bajas de guerrilleros en combate¨C, el caso de Dimar Torres propici¨® una propuesta de moci¨®n de censura contra el entonces ministro Botero, que no prosper¨® en el Congreso. M¨¢s adelante, Botero renunci¨®, el pasado noviembre, ante la inminente aprobaci¨®n de otra moci¨®n de censura que lo acusaba de ocultar la muerte de al menos ocho menores de edad en un bombardeo contra disidentes de las FARC, adem¨¢s de revivir el fantasma de las ejecuciones extrajudiciales. El presidente Iv¨¢n Duque nombr¨® entonces al frente de la cartera de Defensa al hasta entonces canciller, Carlos Holmes Trujillo.
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