La UE manda una misi¨®n a Venezuela para negociar unas elecciones cre¨ªbles

El movimiento del opositor Henrique Capriles de abrirse a la participaci¨®n en las elecciones venezolanas es visto por Bruselas como una oportunidad para presionar al r¨¦gimen de Nicol¨¢s Maduro para lograr mejores condiciones para esos comicios. La UE ha mandado a Caracas una misi¨®n de dos funcionarios comunitarios para abordar con el Gobierno y la oposici¨®n los requisitos necesarios para que las elecciones resulten lo m¨¢s cre¨ªbles y viables posibles. Eso podr¨ªa suponer retrasarlas m¨¢s all¨¢ de la fecha prevista, el 6 de diciembre, lo cual permitir¨ªa organizar con garant¨ªas una misi¨®n de observadores.

Bruselas ve en la irrupci¨®n de Capriles, partidario de participar en las elecciones, una oportunidad para hallar una salida a la grave crisis pol¨ªtica y social que atraviesa Venezuela. Sin embargo, tambi¨¦n observa con inquietud que el r¨¦gimen de Maduro se enroque en la fecha del 6 de diciembre. En las condiciones actuales, cree que los comicios no ser¨ªan reconocidos como leg¨ªtimos y que la Asamblea Nacional resultante tampoco ser¨ªa vista como representativa. Y eso acelerar¨ªa la ruptura de Venezuela con la comunidad internacional, agravando todav¨ªa m¨¢s la crisis humanitaria del pa¨ªs.

El Alto Representante para la Pol¨ªtica Exterior y la Seguridad Com¨²n, Josep Borrell, quiere aprovechar la oportunidad para el di¨¢logo que supone la figura de Capriles. Por ello, como avanz¨® este jueves Abc, mand¨® a Caracas dos funcionarios europeos. En concreto, hasta el pr¨®ximo lunes estar¨¢n en Venezuela el director pol¨ªtico del Servicio Europeo de Acci¨®n Exterior (SEAE), Enrique Mora, y el director general adjunto para Am¨¦rica, Javier Ni?o, seg¨²n fuentes comunitarias.

Antes de enviar a los dos funcionarios, Borrell inform¨® el d¨ªa 17 al Grupo Internacional de Contacto y a los ministros de Exteriores de la UE, el pasado lunes. Tras la reuni¨®n, el jefe de la diplomacia comunitaria se?al¨® que el Consejo fue un¨¢nime al respaldar la decisi¨®n del Grupo de Contacto de ¡°seguir la negociaci¨®n para valorar la posibilidad de unas elecciones que puedan ser observadas¡± por misiones europeas.

A pesar de ello, el presidente del Grupo Popular Europeo, Manfred Weber, acus¨® a Borrell de ¡°legitimar al dictador Maduro con misiones diplom¨¢ticas clandestinas¡±, lo cual consider¨® ¡°inaceptable¡± despu¨¦s de conocer el informe de Naciones Unidas, en el cual se acusa al Gobierno de Nicol¨¢s Maduro de cr¨ªmenes de lesa humanidad.

Bruselas admite que el contenido de ese documento es muy duro, pero tambi¨¦n se?ala la creciente preocupaci¨®n que hay entre los pa¨ªses del grupo internacional por la situaci¨®n en Caracas. Los servicios de ayuda humanitaria europeos est¨¢n reportando un r¨¢pido deterioro de las condiciones de vida de los ciudadanos: un 96% de la poblaci¨®n sin acceso a la electricidad, un 95% sin agua y un aumento de la malnutrici¨®n infantil. Algunas ONG incluso est¨¢n informando de una ca¨ªda dr¨¢stica de su actividad asistencial a causa de la imposibilidad de muchos ciudadanos de desplazarse a sus instalaciones por la falta de combustible.

Emergencia en Caracas

Con ese panorama, Bruselas se aferra a la petici¨®n formulada por la oposici¨®n venezolana a Borrell ¡ªconsiderado como el ¨²nico interlocutor viable para todas las partes¡ª para que hable con Maduro sobre los t¨¦rminos de las elecciones. A su vez, Caracas le envi¨® una carta solicitando que una misi¨®n comunitaria ¡°acompa?e¡± y ¡°observe¡± el proceso electoral, algo que no suced¨ªa desde hace 14 a?os.

Borrell tuvo que responder a Venezuela que era imposible organizar esa delegaci¨®n en tan poco tiempo y que, adem¨¢s, tampoco se daban las condiciones necesarias para celebrar unos comicios. Adem¨¢s, para esas fechas se espera que la pandemia no haya hecho sino empeorar, poniendo en m¨¢s aprietos la cita.

La misi¨®n enviada a Caracas se ver¨¢ con todas las partes ¡ªincluso podr¨ªa encontrarse con Maduro¡ª para tratar de abordar todos esos escollos. Su objetivo no es aplazar los comicios, sino que esa ser¨ªa la consecuencia l¨®gica del ¨¦xito de su cometido. Las condiciones de la UE para que puedan celebrarse elecciones pasan por la participaci¨®n en condici¨®n de igualdad de todos los partidos pol¨ªticos y sus dirigentes, para quienes se pide el fin de su persecuci¨®n e inhabilitaci¨®n, as¨ª como una misi¨®n internacional que pueda ser desplegada con todas las garant¨ªas.