La polic¨ªa cubana desaloja la sede del Movimiento San Isidro y detiene a varios integrantes durante horas

La polic¨ªa cubana irrumpi¨® la noche de este jueves en la sede el Movimiento San Isidro, una red de activistas que lleva diez d¨ªas de encierro en La Habana para exigir la liberaci¨®n del rapero Denis Sol¨ªs, y mantuvo bajo arresto durante horas a una quincena de personas. Entre ellas se encuentran periodistas, artistas y profesores, algunos de los cuales se declararon en huelga de hambre y sed para protestar contra la represi¨®n y las pol¨ªticas del Gobierno, que, denuncian, cada vez m¨¢s cercenan la libertad de expresi¨®n. Varios de los arrestados fueron puestos en libertad horas despu¨¦s.

Entre los desalojados est¨¢ Carlos Manuel ?lvarez, periodista y escritor, director de El Estornudo y colaborador de EL PA?S. ?lvarez lleg¨® el martes a la isla para unirse al grupo de activistas que se hab¨ªa encerrado en la sede del Movimiento San Isidro, en el hom¨®nimo barrio de La Habana. Las autoridades justificaron el operativo esgrimiendo el protocolo de salud adoptado por la pandemia de coronavirus. Primero, relata ?lvarez por tel¨¦fono desde La Habana, llegaron ¡°unos agentes de la Seguridad del Estado disfrazados de m¨¦dicos¡±. ¡°Yo no ced¨ª¡±, contin¨²a. Despu¨¦s se sum¨® un grupo de uniformados, que tras las advertencias ¡°rompieron la puerta a golpes, la echaron abajo¡±. ¡°Nosotros est¨¢bamos serenos y no ofrecimos resistencia. Eran como fiera reparti¨¦ndose la presa. Parec¨ªan incluso tener m¨¢s miedo que nosotros.¡±, recuerda el reportero.

No hubo golpes, pero s¨ª confusi¨®n y empujones para introducir a los detenidos en los furgones policiales. ¡°A los hombres nos llevaron a la estaci¨®n de Cuba y Chac¨®n [en La Habana Vieja] y ah¨ª estuvimos dos horas en el carro¡±. ?lvarez sinti¨® ¡°un ambiente de mucha camarader¨ªa¡±. De alguna manera, como ocurre en las circunstancias excepcionales, ¡°se puso el cu?o a la hermandad que se hab¨ªa creado all¨¢ adentro¡± en el encierro del Movimiento San Isidro. ¡°Es raro, parec¨ªa que no est¨¢bamos ah¨ª: hacinados, muertos de risa, bromeando¡±. Sentido del humor para vencer el miedo. Pero en cuanto los separaron todo cambi¨®. ¡°Yo fui la segunda persona a la que llamaron para hacer una prueba PCR y despu¨¦s me trajeron a una casa de una amiga muy cercana, de M¨®nica [Bar¨®, reportera de El Estornudo]. En cuanto me separaron ese sentimiento comenz¨® a transformarse sobre todo en soledad, pesar, tristeza, mucha confusi¨®n tambi¨¦n. Hubiera dicho que rabia, pero es una sensaci¨®n m¨¢s seca, no es ira. Eso fue lo que sent¨ª y eso a medida que han ido pasando las horas se est¨¢ asentando como tristeza, como soledad¡±.

?lvarez, que por la ma?ana hab¨ªa denunciado a trav¨¦s de las redes sociales un intento del Gobierno de construir un caso pol¨ªtico con el argumento de su llegada del extranjero y los riesgos para la salud p¨²blica, deber¨¢ permanecer confinado unos d¨ªas. ¡°Quer¨ªamos hacernos compa?¨ªa ahora, pero me aislaron hasta el domingo¡±. Asegura que las reivindicaciones del colectivo no se acaban esta noche. A¨²n no saben qu¨¦ estrategias seguir, llevan d¨ªas pensando en posibles variantes, pero ?lvarez no tiene dudas: ¡°Eso no se termina¡±.

El periodista fue liberado antes de las doce de la noche tras permanecer unas horas bajo arresto. Su decisi¨®n de sumarse a la protesta del Movimiento San Isidro se produjo despu¨¦s de que las fuerzas de seguridad detuvieran, a principios de mes, a Denis Sol¨ªs sin orden policial en medio de un altercado que fue difundido en las redes sociales. El rapero fue condenado a ocho meses de prisi¨®n con la acusaci¨®n de desacato a las autoridades.

El Movimiento San Isidro es una red nacida en 2018 precisamente para luchar contra las restricciones a la libertad de expresi¨®n impuestas por el Gobierno de Miguel D¨ªaz-Canel. A pesar de las protestas de varios miembros del colectivo, que llegaron a acudir a una comisar¨ªa de la ciudad para tener noticias de Sol¨ªs, conocer los detalles del juicio y saber d¨®nde se encuentra, varios manifestantes fueron detenidos durante horas y entonces la polic¨ªa redobl¨® el hostigamiento en contra de esta red y su sede.

Entre quienes se declararon en huelga de hambre el pasado 18 de noviembre est¨¢n el bioqu¨ªmico ?scar Casanella, antiguo profesor de la Universidad de La Habana y los periodistas Iliana Hern¨¢ndez y Esteban Rodr¨ªguez. D¨ªas m¨¢s tarde, se sum¨® a ellos la poeta Katherine Bisquet. A partir de esa decisi¨®n, agentes de las fuerzas de seguridad intensificaron los controles en la calle en la que est¨¢ ubicada la sede del colectivo. Seg¨²n denunci¨® el periodista Dar¨ªo Alem¨¢n, los uniformados prohibieron incluso a una vecina llevarles alimentos y productos de aseo.

Tambi¨¦n Maykel Gonz¨¢lez Vivero, director de la revista Tremenda Nota, relat¨® por Whatsapp las circunstancias del desalojo despu¨¦s de salir de la sede del movimiento. ¡°Un vecino me explic¨® que se los llevaron violentamente, que rompieron la puerta, que hab¨ªa fuera el t¨ªpico acto de repudio, gente aliada del Gobierno citada para dar vivas¡±. Este periodista, que se tuvo que alejar debido al gran despliegue policial y resguardarse en un lugar seguro, fue el primero en informar del operativo, que en un primer momento incluy¨® la interrupci¨®n de las conexiones a Internet en la zona, a trav¨¦s de las redes sociales. ¡°Estuve conversando con Abraham L¨®pez, un vecino, que conoce perfectamente a los activistas ah¨ª sitiados¡±, afirm¨®. Tras conocerse las detenciones, escritores y periodistas de todo Am¨¦rica Latina denunciaron el desalojo de la sede y exigieron la liberaci¨®n de los detenidos, que comenz¨® a producirse horas m¨¢s tarde.