Duque se enroca en el uribismo para relanzar su Gobierno
El presidente de Colombia mantiene en la ¨®rbita del Centro Democr¨¢tico las principales carteras del Gabinete pese a las expectativas de una apertura a otros partidos
El Ejecutivo de Iv¨¢n Duque est¨¢ en la b¨²squeda de gobernabilidad. La esperada remodelaci¨®n de su Gabinete para encarar la crisis de popularidad que atraviesa, sin embargo, se ha producido a cuentagotas. Hasta ahora, se ha traducido m¨¢s bien en un enroque, pues las carteras clave siguen encomendadas a los sectores m¨¢s afines al expresidente y senador ?lvaro Uribe, su mentor pol¨ªtico.
El m¨¢s relevante de los cambios anunciados es la designaci¨®n el pasado viernes de Alicia Arango como nueva ministra del Interior, la cartera m¨¢s pol¨ªtica. Ella ven¨ªa desempe?¨¢ndose como cabeza del Ministerio de Trabajo y Protecci¨®n Social, el encargado de lidiar con los asuntos laborales y las relaciones con los sindicatos, pero a partir del 15 de febrero reemplazar¨¢ a Nancy Patricia Guti¨¦rrez, que a su vez relevar¨¢ como consejera presidencial de derechos humanos a Francisco Barbosa, un abogado muy cercano a Duque que fue elegido Fiscal General de la Naci¨®n. Guti¨¦rrez ven¨ªa de desatar una sonada controversia al calificar como "semifallido" el acuerdo de paz con la extinta guerrilla de las FARC.
Las especulaciones acerca de los ajustes del equipo de ministros ¨Cque en Colombia se conocen coloquialmente como ¡°gabinetolog¨ªa¡±¨C vienen desde hace meses, pero al final la sacudida ha sido escalonada. Pese a las crecientes expectativas de que el mandatario prepara una apertura que incluya a otros sectores pol¨ªticos, incluso algunos que le han sido adversos, y que se espera para los pr¨®ximos d¨ªas, las carteras m¨¢s determinantes se mantienen en manos del uribismo. Como secretaria privada, Arango fue la mano derecha de Uribe durante sus a?os en la Casa de Nari?o (2002-2010). Despu¨¦s dirigi¨® el Centro Democr¨¢tico, el partido de Gobierno fundado por el expresidente, el m¨¢s f¨¦rreo opositor al proceso de paz que Juan Manuel Santos ech¨® a andar con las FARC, y ya en la campa?a presidencial del 2018 fue una de las asesoras m¨¢s cercanas a Duque.
Los primeros cambios ya hab¨ªan recurrido al uribismo m¨¢s tradicional. En noviembre, Duque nombr¨® al canciller Carlos Holmes Trujillo como nuevo ministro de Defensa, despu¨¦s de la renuncia del cuestionado Guillermo Botero ante una inminente moci¨®n de censura en el Congreso. Y al frente de la diplomacia colombiana design¨® a la exsenadora Claudia Blum, otra figura vinculada con el exmandatario, del que fue embajadora ante la ONU. Junto a Interior, Defensa y Exteriores, la columna vertebral del Gobierno la completa el ministerio de Hacienda, que permanece en manos de Alberto Carrasquilla, quien ya hab¨ªa liderado esa cartera en tiempos de Uribe.
Cuando asumi¨® el poder, en agosto del 2018, Duque nombr¨® el primer Gabinete paritario de Colombia, y se propon¨ªa mantener ministros de perfil t¨¦cnico que se mantuvieran los cuatro a?os de su mandato. La realidad pol¨ªtica ha dinamitado esos planes. Elegido con una cifra in¨¦dita de m¨¢s de diez millones de votos, el presidente enfrenta la necesidad de relanzar un Gobierno mermado por la impopularidad, las protestas en las calles y serias amenazas de seguridad que incluyen el incesante asesinato de l¨ªderes sociales y el repunte del paramilitarismo. La falta de mayor¨ªas en el Congreso, con una oposici¨®n al alza, agrava ese panorama.
El Ejecutivo ha entablado conversaciones para armar una coalici¨®n m¨¢s amplia que le permita tramitar una agenda legislativa que incluye resistidas reformas como la que afecta las pensiones. Sin embargo, la esperada entrada al Gobierno de representantes del conservatismo, el partido de la U e incluso Cambio Radical, de concretarse, ser¨¢ en otros ministerios, como las vacantes en las carteras de Trabajo ¨Ctras la salida de Arango¨C o Salud, que ha afrontado la crisis del coronavirus con un ministro encargado luego de la renuncia en diciembre de Juan Pablo Uribe.
Las turbulencias prometen continuar. A los inminentes cambios en el Gabinete se suma la vacante en la embajada en Estados Unidos que dej¨® el mes pasado la renuncia de Francisco Santos ¨Cexvicepresidente de Uribe¨C en la v¨ªspera de la visita a Bogot¨¢ del secretario de Estado norteamericano, Mike Pompeo. Es otro puesto clave, m¨¢s a¨²n para un Ejecutivo que ha fijado en Washington el eje de su pol¨ªtica exterior, dominada por la cooperaci¨®n antinarc¨®ticos y la crisis de Venezuela.
A ese ramillete de vacantes cr¨ªticas se a?ade el esc¨¢ndalo en el flamante Ministerio de Ciencia, Tecnolog¨ªa e Innovaci¨®n. Luego de crear la cartera a finales del a?o pasado, Duque nombr¨® como primera responsable a Mabel Torres, una reconocida bi¨®loga del selv¨¢tico departamento del Choc¨®. Con esa designaci¨®n a una mujer afrodescendiente profundizaba el mensaje de un gabinete con sentido paritario ¨Cde hecho, las mujeres ahora mismo son mayor¨ªa¨C. Sin embargo, la ministra ha sido duramente cuestionada por el grueso de la comunidad cient¨ªfica luego de haber impulsado una bebida contra el c¨¢ncer sin las suficientes pruebas ni evidencias.
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