Imelda Marcos, en un nuevo documental: ¡°Met¨ª las joyas entre los pa?ales¡± de los nietos

"La percepci¨®n es real, la verdad no", asegura Imelda Marcos en el aclamado documental The Kingmaker (que puede traducirse como La hacedora de reyes), que muestra la cara m¨¢s exc¨¦ntrica y desp¨®tica de la antigua primera dama de Filipinas, empe?ada en reescribir la historia y lavar el apellido Marcos para que sus v¨¢stagos reconquisten el poder.

Tras cosechar ¨¦xitos y nominaciones en festivales, la cinta de la creadora estadounidense Lauren Greenfield, ha llegado entre una enorme expectaci¨®n a la gran pantalla filipina, parad¨®jicamente al Centro Cultural de Filipinas, un imponente edificio en la bah¨ªa de Manila construido en 1969 por orden y deseo de Imelda, que hoy tiene 90 a?os. Su marido, Ferdinand, muri¨® en 1989, a los 72 a?os.

Las fechas de las proyecciones, del 19 al 25 de febrero, coinciden adem¨¢s con el 34.? aniversario de la llamada "Revoluci¨®n de EDSA", las multitudinarias protestas pac¨ªficas, apoyadas por Iglesia y Ej¨¦rcito, que en 1986 forzaron la salida de los Marcos de Filipinas tras dos d¨¦cadas de "dictadura conyugal" y ocho a?os bajo la ley marcial (de 1972 a 1981).?

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Joyas entre los pa?ales

"Met¨ª las joyas entre los pa?ales", cuenta Imelda en la cinta sobre esa noche del 25 de febrero de 1986, cuando en medio de una recepci¨®n para la que se hab¨ªa enjoyado hasta los dientes, la familia fue informada de que la presi¨®n popular frente al palacio presidencial de Malaca?ang era insostenible y deb¨ªan huir del pa¨ªs.

Salieron casi con lo puesto y la primera dama solo pudo esconder las joyas que llevaba encima entre la bolsas de pa?ales de sus nietos: "Nos sirvi¨® luego para pagar los abogados", relata con una media sonrisa en el documental, grabado entre 2015 y 2016, cuando Imelda ten¨ªa 85 a?os y hac¨ªa campa?a para que su hijo Bongbong lograra la vicepresidencia del pa¨ªs.

"Entraron buscando esqueletos y solo encontraron bonitos zapatos", comenta Imelda riendo acerca de su colecci¨®n de m¨¢s de 3.000 pares de zapatos, adem¨¢s de valiosas obras de arte, que las masas enfurecidas hallaron en su casa cuando los Marcos se exiliaron a Haw¨¢i.

"Tengo que lucir bella porque los pobres siempre buscan a una estrella en medio de la noche oscura", apunta la exc¨¦ntrica pol¨ªtica sobre la elecci¨®n de su indumentaria (trajes de seda y anillos de diamantes) al visitar comunidades desfavorecidas como parte de su vocaci¨®n de ser 'la madre de todos los filipinos"

The Kingmaker? tambi¨¦n narra el capricho de Imelda de crear un parque safari en Filipinas, que implic¨® un traslado millonario de cebras y jirafas desde Kenia y la expulsi¨®n de m¨¢s de 200 familias de la isla filipina de Calauit, donde todav¨ªa hoy viven esos animales, que los Marcos nunca visitaron.

Una versi¨®n subjetiva

La pel¨ªcula presenta casi dos horas de metraje articulado a partir de los testimonios de Imelda, rodeada de obras de arte, sobre los a?os que gobern¨® Filipinas mano a mano con su marido, al que recuerda como un hombre cari?oso que la amaba "m¨¢s que a nada en el mundo".

La viuda no menciona las infidelidades de Ferdinand con la actriz estadounidense Dovie Beams, aunque el documental cuenta que Imelda ten¨ªa una grabaci¨®n de una conversaci¨®n telef¨®nica de los amantes y chantajeaba a su esposo con ella, y defiende que la ley marcial fue la etapa de "mayor libertad y prosperidad para Filipinas".

Obvia las sangrantes violaciones de derechos humanos de esos a?os, cuando 70.000 opositores fueron encarcelados, 35.000 torturados y 3.200 asesinados.

"Los Marcos est¨¢n detr¨¢s de una clara campa?a de revisionismo hist¨®rico, apoyada por granjas de troles en las redes sociales y financiada con el dinero que nos robaron a los filipinos", se?ala Etta Rosales, activista anti-Marcos y prisionera pol¨ªtica durante la ley marcial que tambi¨¦n aparece en el documental.?

El asesinato de Ninoy Aquino

"El pasado es pasado. Hay cosas que deber¨ªan olvidarse", apunta Imelda.?El documental sugiere que ella y el general Fabian Ver fueron los cerebros del asesinato del opositor Benigno Ninoy Aquino en 1983, cuando regres¨® a Filipinas despu¨¦s de tres a?os exiliado en Boston, una ¨¦poca en la que el dictador Marcos estuvo convaleciente tras un trasplante de ri?¨®n.

Aunque el caso jam¨¢s se esclareci¨®, el documental muestra la indudable influencia de Imelda en los designios de Filipinas, no solo como primera dama, sino tambi¨¦n despu¨¦s de 1991, cuando la familia retorn¨® al pa¨ªs y a la pol¨ªtica a pesar de afrontar hasta 400 procesos judiciales por el brutal saqueo de la naci¨®n.

Apoyados por una amplia legi¨®n de fieles, Imelda se convirti¨® en congresista; su hija Imee, ahora senadora, fue gobernadora de Ilocos Norte, la regi¨®n natal de Ferdinand, mientras que Bongbong, que ya fue senador, parece un claro candidato a la pr¨®xima carrera presidencial de 2022 tras quedarse a las puertas de la vicepresidencia en 2016.

El documental se rod¨® durante esa campa?a fallida en la que Bongbong part¨ªa como favorito, y muestra a Imelda ejerciendo su influencia e intercambiando favores para recabar apoyos a su hijo como buena hacedora de reyes, que invirti¨® dinero en la candidatura de Rodrigo Duterte, ahora mandatario y fiel aliado de la familia.

La cinta se proyect¨® por primera vez en Filipinas el 29 de enero en un pase ¨²nico, pero ante la enorme expectaci¨®n despertada (unas 1.200 personas abarrotaron las salas y las entradas se agotaron en pocas horas), el Centro Cultural de Filipinas, legado art¨ªstico de Imelda, program¨® nuevos pases.

"Como instituci¨®n defendemos la libertad art¨ªstica. Y este documental adem¨¢s apela a un episodio reciente de nuestra historia que a¨²n no se ha cerrado", apunta Chris Millado, director art¨ªstico del centro, que parad¨®jicamente celebr¨® hace un mes una cena en honor a Imelda como fundadora del lugar al cumplir este medio siglo.