La congresista Alexandria Ocasio-Cortez revela que fue v¨ªctima de una agresi¨®n sexual
La dem¨®crata ha compartido su trauma con sus seguidores de Instagram, mientras hablaba del asalto al Capitolio
Una emocionada Alexandria Ocasio-Cortez ha contado este lunes por la noche a sus seguidores en un directo de Instagram que hace tiempo sufri¨® una agresi¨®n sexual. La congresista dem¨®crata comparti¨® este hecho, sin entrar en detalles, mientras narraba lo vivido durante el asalto al Capitolio el pasado 6 de enero. Ambas experiencias ¨Cno relacionadas¨C le han supuesto un trauma, seg¨²n ha reconocido la congresista. La dem¨®crata ha criticado a los republicanos que quieren ¡°pasar p¨¢gina¡± del acto de insurrecci¨®n sin depurar responsabilidades. A su juicio, esta actitud responde al patr¨®n de los abusadores. ¡°Pens¨¦ que iba a morir¡±, ha dicho entre l¨¢grimas sobre las cinco horas que vivi¨® dentro del Congreso.
Una de las cualidades como pol¨ªtica que se le reconocen a Ocasio-Cortez es la cercan¨ªa con sus seguidores. Este lunes, sobre las 21.00 (hora local), arranc¨® una emisi¨®n en directo desde Instagram, como hace habitualmente, y m¨¢s desde el asalto al Capitolio. Nerviosa, pidi¨® perd¨®n a sus amigos y familiares por lo que iba a revelar. ¡°No lo sabe mucha gente¡±, dijo con la voz quebrada. ¡°Soy superviviente de una agresi¨®n sexual¡±, revel¨®.
AOC recounting her horrifying experience hiding in her office during the insurrection.
— Justice Democrats (@justicedems) February 2, 2021
¡°I thought I was going to die...I have never been quieter in my entire life.¡± pic.twitter.com/t2P6FU3mFU
La congresista afirm¨® que los legisladores republicanos que dicen que el asalto al Capitolio no fue para tanto le recuerdan a las ¡°t¨¢cticas de los abusadores¡±. Como ¡°superviviente de una agresi¨®n sexual¡±, dijo que estos traumas tienen dos caras: el momento en el que suceden y lo que viene despu¨¦s, la reacci¨®n del entorno. ¡°Pens¨¦ que no deb¨ªa compartir mi experiencia del asalto al Capitolio porque iban a decir que lo que quiero es hablar sobre m¨ª¡±, afirm¨®. Al final, se decidi¨® a seguir las recomendaciones de los terapeutas del Congreso, que invitaban a compartir el trauma.
Dos d¨ªas antes del asalto, la dem¨®crata dijo que sent¨ªa ¡°ganas de vomitar por el miedo¡± de lo que podr¨ªa ocurrir el 6 de enero, el d¨ªa de la marcha de los seguidores de Donald Trump que deriv¨® en la toma del Capitolio. Cerca de las dos de la tarde de ese d¨ªa, oy¨® golpes muy fuertes en las puertas que dan a su oficina, como si alguien quisiera derribarlas. Pero no oy¨® voces, ni gritos, nadie se identificaba.
¡°Bum, bum, bum¡±, describi¨® la congresista. Su asistente, que estaba con ella, le aconsej¨® que se escondiera. Entr¨® a su ba?o y cerr¨® la puerta. ¡°??D¨®nde est¨¢?! ??D¨®nde est¨¢?!¡±, escuch¨® la voz de un hombre que accedi¨® a su despacho. ¡°En ese momento pens¨¦ que todo se hab¨ªa acabado (...) Retrospectivamente, quiz¨¢ fueron cinco o diez segundos, pero por mi cerebro pasaron muchos pensamientos. Pens¨¦ que iba a morir¡±.
Entonces se enfrent¨® al hombre, blanco, que la miraba ¡°con ira y hostilidad¡±. No llevaba identificaci¨®n, y lo que la congresista segu¨ªa, angustiada, sin entender qu¨¦ estaba pasando. Su asistente identific¨® al hombre como agente de polic¨ªa del Capitolio, aunque no sab¨ªa si estaba all¨ª para ayudarla o para lastimarla. ¡°As¨ª de hostil era su apariencia¡±. El agente les orden¨® que se fueran a otro edificio. Sin escolta y sin ubicaci¨®n espec¨ªfica. En ese momento, dice Ocasio-Cortez, sinti¨® que formaba parte de la larga lista de personas que no pueden contar con la polic¨ªa.
Por fin se pudo refugiar con la congresista Katie Porter. Miraron dentro de los armarios para comprobar que no hab¨ªa nadie y pidi¨® ropa deportiva prestada a Porter para cambiarse. ¡°Necesitaba un atuendo adecuado por si ten¨ªa que saltar por la ventana. Llevaba tacones¡±. Pasaron cerca de cinco horas antes de que pudieran salir. ¡°La gente tuiteaba ¡®estoy bien, estoy segura¡¯. Yo no lo hice porque no me sent¨ª segura en ning¨²n momento ese d¨ªa¡±, lament¨®.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.