Netanyahu choca con el bloqueo pol¨ªtico cuando se agota el plazo para formar Gobierno en Israel

Al frente del Likud, el partido m¨¢s votado (30 esca?os) en las elecciones del 23 de marzo, y de una coalici¨®n que acaricia la mayor¨ªa, el conservador Benjam¨ªn Netanyahu se estrella una y otra vez contra el bloqueo pol¨ªtico a pocas horas de que se agote su plazo para formar Gobierno, en la medianoche de este martes. El primer ministro en funciones de Israel precisa el voto de 61 de los 120 diputados de la Kneset (Parlamento) para ser investido para un quinto mandato consecutivo. Pero la polarizaci¨®n del electorado y la creciente fragmentaci¨®n de los bloques del legislativo hace cada vez m¨¢s dif¨ªcil superar ese list¨®n, lo que ha forzado la celebraci¨®n de cuatro comicios generales en los dos ¨²ltimos a?os.

Si Netanyahu no logra el aval de la mayor¨ªa absoluta de la C¨¢mara, el presidente del Estado de Israel, Reuven Rivlin, tiene la opci¨®n de encargar a Yair Lapid, l¨ªder del segundo partido m¨¢s votado, el centrista Yesh Atid (17 esca?os), la formaci¨®n de un Gabinete de amplia coalici¨®n. Tambi¨¦n puede traspasar la misi¨®n al propio Parlamento, para que negocie por s¨ª mismo una salida al bloqueo pol¨ªtico. En ambos casos, si se vuelve a agotar el plazo sin resultados tangibles la ley israel¨ª prev¨¦ la convocatoria autom¨¢tica de nuevas elecciones legislativas.

Nadie parece querer esta alternativa en el Estado jud¨ªo, pero los partidos tampoco han logrado alcanzar acuerdos con peso suficiente. Netanyahu lleg¨® a proponer el lunes al nacionalista Naftali Bennett, que encabeza el partido Yamina (siete esca?os) que ejerciera en primer lugar como primer ministro en un pacto de rotaci¨®n en el cargo. Bennett exigi¨® al l¨ªder del Likud que antes le presentase ¡°un pacto con mayor¨ªa¡±.

Incluido el respaldo de las dos formaciones de los ultraortodoxos jud¨ªos (16 esca?os) y de la ultraderecha (seis), el primer ministro en funciones solo contar¨ªa con 59 parlamentarios a su favor. Un entendimiento, con f¨®rmulas de apoyo externo en la C¨¢mara, con el peque?o partido ¨¢rabe Raam (cuatro diputados) le garantizar¨ªa la investidura, pero la extrema derecha ¡ªque agrupa a diputados racistas¡ª se niega a aceptarlo.

Mientras se dejaba cortejar por Netanyahu ¡ªa quien sirvi¨® en el pasado como jefe de Gabinete interno y ministro¡ª, Bennett ha apostado tambi¨¦n a la baraja del llamado Bloque por el Cambio, que aglutina bajo la direcci¨®n del exministro Lapid a conservadores, centristas, laboristas y partidos ¨¢rabes, entre otros. Sus exigencias de carteras ministeriales y cargos han parecido hasta ahora excesivas a estos socios, que solo parecen haberse puesto de acuerdo en un objetivo: apear a Netanyahu del poder a toda costa.

El ¨²nico jefe de Gobierno que ha tenido Israel desde 2009 (y que acumula un trienio de un primer mandato de 1996 a 1999) se resiste a dejar un puesto que le blinda durante el juicio por corrupci¨®n que se desarrolla en su contra en Jerusal¨¦n.

Y mientras Netanyahu exclu¨ªa la constituci¨®n de una comisi¨®n de investigaci¨®n sobre la avalancha en la que murieron el viernes 45 ultrarreligiosos en una celebraci¨®n jud¨ªa, el contralor del Estado, Matanyahu Englman, que ejerce la alta inspecci¨®n de la Administraci¨®n en Israel, abri¨® el lunes las primeras pesquisas oficiales. ¡°Vamos a efectuar una auditor¨ªa para investigar las circunstancias que rodearon los hechos¡±, anunci¨® en la sede de la Kneset. El contralor ya hab¨ªa observado en sendos informes de 2008 y 2011 graves fallos de seguridad en el santuario religioso del monte Meron, en la regi¨®n de la Alta Galilea (norte), donde cientos de miles de peregrinos acuden cada a?o a la tumba de un rabino del siglo II en la festividad jud¨ªa del fuego.