La viuda de Jovenel Mo?se clama justicia ante su tumba: ¡°Has sido abandonado y traicionado¡±
El funeral del presidente asesinado se celebr¨® en Cap-Haitien en medio de disturbios y disparos que provocaron la evacuaci¨®n de las delegaciones de EE UU y la ONU
La ex primera dama de Hait¨ª, Martine Mo?se, acus¨® este viernes en un encendido discurso a la oligarqu¨ªa haitiana de lo que sucedi¨® con su esposo, que fue torturado y asesinado en su casa de Puerto Pr¨ªncipe el 7 de julio, en un ataque en el que ella misma result¨® herida. ¡°Has sido abandonado y traicionado¡±, dijo delante del f¨¦retro del presidente ante el aplauso de los asistentes al funeral, que se celebr¨® en la vivienda familiar del presidente en Cap-Haitien, en el norte del pa¨ªs, a 200 kil¨®metros de Puerto Principe, la capital. ¡°Fuiste brutalmente asesinado. Se ha conspirado contra ti. Te odiaban, te lanzaron veneno¡±, continu¨® la mujer, vestida completamente de negro y con un brazo en cabestrillo.
Martine Mo?se regres¨® esta semana a Hait¨ª desde Miami, donde recibi¨® tratamiento por las heridas que sufri¨® durante el ataque magnicida que tambi¨¦n presenciaron los dos hijos de la pareja, que resultaron ilesos. Seg¨²n dijo, su familia ¡°est¨¢ pasando por d¨ªas oscuros¡±. La viuda aprovech¨® el funeral para ofrecer un discurso en el que record¨® los 25 a?os de matrimonio que comparti¨® con el expresidente. Y, como hiciera pocos d¨ªas despu¨¦s del crimen, acus¨® a la oligarqu¨ªa de haber orquestado el asesinato para impedir los cambios que quer¨ªa llevar a cabo su marido, entre los que mencion¨® la lucha contra la violencia y la corrupci¨®n o la igualdad de oportunidades para el acceso a la funci¨®n p¨²blica. ¡°Hoy es Jovenel Mo?se. Ma?ana ser¨¢ ella, ¨¦l; ser¨¦ yo; seremos nosotros¡±, dijo antes de clamar justicia.
¡°No queremos venganza, ni violencia. No cederemos al miedo. Los miraremos [a los asesinos] directamente a los ojos. Les diremos que ya es suficiente¡±, agreg¨®. En febrero pasado, el propio Jovenel Mo?se declar¨® en una entrevista con EL PA?S que ¡°un grupo de oligarcas¡± preparaba un golpe de Estado y quer¨ªa asesinarlo. Y se?al¨® como responsables, sin citarlos, a los Vorbe, una de las familias m¨¢s poderosas de Hait¨ª, due?as de la electricidad en el pa¨ªs.
Por el momento, al menos 26 personas han sido detenidas por su presunta participaci¨®n en el magnicidio, entre ellas 18 sicarios colombianos, tres polic¨ªas haitianos y seis civiles de ese pa¨ªs, algunos residentes en Estados Unidos. Pero la investigaci¨®n sigue estando rodeada de inc¨®gnitas y no se ha acabado de establecer qui¨¦n fue el autor intelectual ni qui¨¦n financi¨® una operaci¨®n tan costosa.
La ciudad de Cap-Haitien, donde se encuentra la residencia familiar de los Mo?se, fue el lugar escogido para la ceremonia f¨²nebre. Esa localidad fue escenario de protestas por parte de los partidarios del fallecido presidente que exig¨ªan justicia y quemaron barricadas en varias carreteras. Eso llev¨® a la Polic¨ªa Nacional a disparar munici¨®n real y gases lacrim¨®genos. Ante el sonido de los disparos, los servicios de seguridad evacuaron del lugar a las delegaciones de Naciones Unidas y Estados Unidos.
Los manifestantes criticaron especialmente al jefe de la Polic¨ªa Nacional Civil, L¨¦on Charles, que a su llegada al sepelio fue recibido con gritos de ¡°Asesino¡± y ¡°?D¨®nde est¨¢ Jovenel?¡±. El diario Miami Herald ha revelado que la noche de su muerte, Mo?se hizo varias llamadas pasadas la 1:30 de la madrugada, en un intervalo de diez minutos, a varios agentes de la Polic¨ªa Nacional en las que advert¨ªa de que estaban disparando en su casa y ped¨ªa ayuda.
Pero el mandatario muri¨® despu¨¦s de diez minutos de tortura y de pedir un auxilio que no lleg¨® a tiempo. Desde el inicio de la investigaci¨®n se sospecha que los agentes y miembros del equipo de seguridad de Mo?se podr¨ªan ser c¨®mplices del asesinato, puesto que salieron ilesos del ataque perpetrado por hombres fuertemente armados.
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