Las maniobras militares de EE UU y Corea del Sur ponen en peligro el fr¨¢gil di¨¢logo con Pyongyang
La hermana de Kim Jong-un ya hab¨ªa avisado de que los ¡°simulacros de guerra¡± entorpecer¨ªan el di¨¢logo en la pen¨ªnsula
Se¨²l y Washington han vuelto a provocar la indignaci¨®n de Pyongyang, a pesar de ir sobre aviso. Los dos aliados iniciaron el martes sus maniobras militares conjuntas anuales tras haber recibido 10 d¨ªas atr¨¢s la advertencia de Kim Yo-jong, hermana del l¨ªder norcoreano, Kim Jong-un, de que su realizaci¨®n entorpecer¨ªa el di¨¢logo en la pen¨ªnsula. En una prueba fehaciente de la irritaci¨®n que esta situaci¨®n ha provocado, este mi¨¦rcoles por la ma?ana, al igual que ocurri¨® la tarde anterior, la l¨ªnea telef¨®nica directa que comunica diariamente a los Gobiernos de las dos Coreas ha estado sonando sin que nadie respondiese en la oficina al norte del Paralelo 38.
La agencia estatal de noticias norcoreana KCNA publicaba el martes un comunicado en el que la mano derecha de Kim Jong-un acusaba a las autoridades surcoreanas de ¡°comportamiento p¨¦rfido¡± por seguir adelante con los ejercicios militares con EE UU, a¨²n a sabiendas de que ponen en peligro los avances logrados despu¨¦s del restablecimiento de la comunicaci¨®n telem¨¢tica entre los dos pa¨ªses vecinos, a petici¨®n de Pyongyang, el pasado 27 de julio. Corea del Norte hab¨ªa desconectado en junio de 2020 esta v¨ªa de enlace que emula al tel¨¦fono rojo que establecieron EE UU y la antigua Uni¨®n Sovi¨¦tica durante la Guerra Fr¨ªa con el fin de solventar asuntos de urgencia y evitar a toda costa que una provocaci¨®n deviniese en un conflicto armado.
En su misiva, Kim Yo-jong tambi¨¦n culpa a la Casa Blanca de forzar la ejecuci¨®n de estos ¡°simulacros de guerra¡± cuando ¡°la mirada internacional est¨¢ centrada en c¨®mo se desenvuelven los acontecimientos en la pen¨ªnsula¡±. En sus propias palabras, estas acciones militares muestran que ¡°el ¡®compromiso diplom¨¢tico¡¯ y el ¡®di¨¢logo sin condiciones¡¯ que promueve la actual administraci¨®n estadounidense son una fachada para encubrir su naturaleza agresiva¡±.
Desde el final de la Guerra de Corea (1950-1953), que termin¨® con la firma de un armisticio en lugar de un tratado de paz, el ej¨¦rcito estadounidense mantiene alrededor de 28.500 efectivos en suelo surcoreano. En marzo de este a?o, EE UU y Corea del Sur acordaron que Se¨²l pagar¨ªa anualmente 1.183 billones de wones (unos 873 millones de euros, un 13,9% m¨¢s con respecto a 2019) a Washington por la presencia de estas tropas for¨¢neas en su territorio, alegando la necesidad de agilizar una estrategia ante la posible amenaza del programa nuclear norcoreano.
Seg¨²n informa la agencia de noticias surcoreana Yonhap, las pr¨¢cticas de este verano han comenzado con el llamado ¡°entrenamiento de personal para la gesti¨®n de la crisis¡±, dise?ado para inspeccionar la respuesta de sus militares a potenciales incidentes preb¨¦licos inesperados. Este ejercicio, que se prolongar¨¢ hasta el 13 de agosto, precede al de mando combinado, que supone el grueso de las maniobras estivales y que se celebrar¨¢ del 16 al 26 de agosto. Este ¨²ltimo consistir¨¢ principalmente en una simulaci¨®n por ordenador. Con el fin de hacer frente al aumento de casos de covid-19 en Corea del Sur, en las pruebas realizadas in situ no participar¨¢n soldados cuya base est¨¦ en EE UU.
Horas despu¨¦s de que se hiciesen p¨²blicos los comentarios de Kim Yo-jong, el portavoz del Departamento de Estado estadounidense, Ned Price, enfatiz¨® durante una rueda de prensa diaria que los entrenamientos tienen una ¡°naturaleza puramente defensiva¡± y que Washington ¡°no alberga ninguna intenci¨®n hostil hacia Corea del Norte¡±. Price reiter¨® que el Gobierno de Joe Biden apoya el di¨¢logo y la reconciliaci¨®n intercoreana, y que continuar¨¢ cooperando con Se¨²l para alcanzar dicho fin.
Las maniobras militares conjuntas entre Corea del Sur y EE UU, canceladas en 2020 por la crisis sanitaria mundial, se hab¨ªan reducido en los ¨²ltimos a?os con el objetivo de apoyar la diplomacia orientada a la desnuclearizaci¨®n de la pen¨ªnsula coreana. De los tres encuentros entre el entonces presidente estadounidense, Donald Trump, y el mandatario norcoreano, Kim Jong-un, no se sac¨® ninguna conclusi¨®n y las conversaciones se encuentran estancadas desde junio de 2019. Si bien tanto las autoridades de Corea del Norte como las de EE UU afirman estar abiertas al di¨¢logo, todo indica que nadie est¨¢ dispuesto a ser el primero en dar el paso.
A las cr¨ªticas lanzadas por la hermana del l¨ªder supremo de Corea del Norte tambi¨¦n se han sumado las de Kim Yong-chol, general y pol¨ªtico norcoreano que jug¨® un papel fundamental en las referidas cumbres. La agencia KCNA recoge este mi¨¦rcoles una carta en la que afirma que su pa¨ªs har¨¢ que Corea del Sur ¡°se d¨¦ cuenta de inmediato de la grave crisis de seguridad a la que deber¨¢ enfrentarse por su mala decisi¨®n¡± y en la que agrega que Se¨²l ha perdido una oportunidad de mejorar las relaciones.
El Ministerio de Unificaci¨®n, ¨®rgano dependiente de Se¨²l, ha respondido a los comentarios de Kim Yong-chol indicando que se trata de una repetici¨®n del discurso de Kim Yo-jong del d¨ªa anterior, pero a?ade que se vigilar¨¢n de cerca los movimientos que Corea del Norte realice en el futuro pr¨®ximo. El Gobierno de Moon Jae-in, por su parte, ha emitido un comunicado en el que expresa que ¡°la escalada de la tensi¨®n militar en la pen¨ªnsula coreana no beneficia a nadie¡±.
Paralelamente, las fuerzas armadas de China y Rusia tambi¨¦n han iniciado maniobras militares conjuntas en la regi¨®n china de Ningxia, frontera con Xinjiang, donde Occidente denuncia abusos de los derechos humanos contra la minor¨ªa uigur. Los ejercicios, iniciados el lunes y que discurrir¨¢n hasta el viernes, contar¨¢n con la presencia de 10.000 efectivos del Ej¨¦rcito del aire y de tierra de ambas naciones. Mosc¨², por su parte, ha estado realizando al mismo tiempo pruebas con soldados de Tayikist¨¢n y Uzbekist¨¢n, que tambi¨¦n han generado el descontento entre las naciones de la zona.
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