Bruselas aboga por mantener contacto con los talibanes ante el riesgo de perder influencia en Afganist¨¢n
Un documento interno del servicio diplom¨¢tico europeo sobre la situaci¨®n afgana reclama ¡°aumentar las cuotas de reasentamiento¡± para hacer frente a la crisis humanitaria
Lecci¨®n de primero de realismo pol¨ªtico: los distintos gobiernos se ven obligados a conversar, por muy alejadas que sean sus visiones del mundo, incluso con los reg¨ªmenes m¨¢s correosos o directamente sanguinarios. A este dilema se enfrenta ahora la Uni¨®n Europea en Afganist¨¢n, despu¨¦s la retirada de tropas y la marcha del ¨²ltimo hombre de su legaci¨®n diplom¨¢tica: un vac¨ªo en el tablero mundial que otras potencias est¨¢n m¨¢s que dispuestas a llenar.
Bruselas alerta de los riesgos para el peso geopol¨ªtico de Europa de no estar presente en las negociaciones que se avecinan: ¡°La presencia diplom¨¢tica en Kabul por parte de la UE y de sus Estados miembros ser¨¢ muy limitada o inexistente, al menos a corto plazo¡±, admite con preocupaci¨®n un documento interno del Servicio Europeo de Acci¨®n Exterior (SEAE), el brazo diplom¨¢tico de la Uni¨®n, al que ha tenido acceso EL PA?S. ¡°Esto supone un reto importante en lo que respecta a la recopilaci¨®n de informaci¨®n y a nuestra capacidad de influir en los acontecimientos sobre el terreno, dejando el campo libre a China, Ir¨¢n, Pakist¨¢n, Qatar y Rusia, que mantendr¨¢n su presencia en Kabul¡±.
El texto, un total de siete p¨¢ginas, reconoce que la toma del poder de los talibanes tendr¨¢ un ¡°profundo impacto en intereses estrat¨¦gicos clave de la UE¡±, con potencial para poner en jaque la estabilidad regional y ramificaciones de todo tipo, que van del terrorismo al tr¨¢fico de drogas. Y plantea un abanico de opciones frente a los ¡°muy medi¨¢ticos¡± talibanes, que ¡°se han esforzado por presentarse como una organizaci¨®n que ha cambiado, en su b¨²squeda de reconocimiento internacional¡±. Los informes con los que cuenta la UE, sin embargo, atestiguan ¡°ejecuciones, latigazos p¨²blicos, restricciones a las mujeres y el secuestro de chicas j¨®venes para casarse a la fuerza¡±, advierte con prudencia el documento elaborado por el servicio europeo que encabeza Josep Borrell, alto representante para Asuntos Exteriores.
El informe toca todas las teclas: de la migraci¨®n a las sanciones de la ONU, pasando por la econom¨ªa. Incluso deja para el arrastre (sin mencionarlo) el vago acuerdo de m¨ªnimos sobre los refugiados esbozado este martes por los ministros de Interior de la UE, en el que las capitales se han dejado llevar por los cantos de sirena de la fortaleza Europa. La diplomacia europea reclama en cambio ¡°poner en marcha o aumentar las cuotas de reasentamiento de los Estados miembros¡± con ¡°compromisos¡± concretos, algo que de momento solo parece haber esbozado la canciller alemana, Angela Merkel, al asegurar hasta 40.000 afganos podr¨ªan tener derecho a ser evacuados rumbo a Berl¨ªn.
La parte central del documento se centra en c¨®mo ha de relacionarse la UE con los talibanes. A falta de una ¡°presencia diplom¨¢tica plena¡±, propone considerar ¡°modelos innovadores¡± que garanticen la representaci¨®n local de la UE en Kabul. ¡°Por ejemplo, una oficina humanitaria, o una oficina de representaci¨®n europea¡±, plantea uno de los p¨¢rrafos. ¡°Esto permitir¨ªa un mejor an¨¢lisis de la situaci¨®n sobre el terreno y proporcionar la base para mantener canales de comunicaci¨®n con quienes ostentan el poder¡± mientras el bloque comunitario sopesa ¡°el futuro compromiso diplom¨¢tico, o no, con los talibanes¡±.
En estos momentos, la delegaci¨®n de la UE en Afganist¨¢n, evacuada v¨ªa Madrid, se encuentra en Bruselas. La diplomacia europea pide trasladar su presencia a los pa¨ªses vecinos y a los del Golfo. Y evitar soluciones dr¨¢sticas, como el cierre definitivo de las embajadas de Kabul: ¡°Hasta que no se tome una decisi¨®n definitiva de cortar las relaciones diplom¨¢ticas, podr¨ªa considerarse la posibilidad de suspender las actividades en lugar de cerrar formalmente la Delegaci¨®n de la UE y las misiones diplom¨¢ticas de los Estados miembros¡±, se?ala.
Sin reconocer, de momento
Bruselas no quiere reconocer de momento al r¨¦gimen talib¨¢n, pero estima que su relaci¨®n con ¡°el poder de facto que controla el pa¨ªs tendr¨¢ que intensificarse a nivel pr¨¢ctico en el corto plazo¡±, probablemente desde los pa¨ªses del entorno, como Pakist¨¢n, Ir¨¢n y Qatar. Este contacto, a?ade, ¡°deber¨ªa hacer hincapi¨¦ en las cuestiones humanitarias¡± y centrarse en presionar para que el nuevo r¨¦gimen forme un Gobierno inclusivo y que preserve los intereses de la UE en materia de seguridad. El an¨¢lisis del servicio diplom¨¢tico europeo es consciente del potencial inflamable y teme que estas conversaciones se malinterpreten como que Bruselas se ha sentado a fumar la pipa de la paz con los barbudos: ¡°Debe hacerse de una manera que evite crear la percepci¨®n de que el di¨¢logo constituye un reconocimiento del r¨¦gimen talib¨¢n¡±, alerta.
¡°Nos guste o no, [los talibanes] ya no son un grupo rebelde sino el Gobierno (de facto) de Afganist¨¢n¡±, dice un experto en resoluci¨®n de conflictos y crisis humanitarias con experiencia en el territorio afgano. En su opini¨®n, es esencial mantener la presencia de ECHO (la Direcci¨®n General de Protecci¨®n Civil y Ayuda Humanitaria) y cree que ¡°una oficina de enlace o algo similar podr¨ªa ser otra opci¨®n para permitir a la UE mantener cierto grado de di¨¢logo pol¨ªtico con el nuevo r¨¦gimen¡±.
El documento plantea cinco condiciones de cara a un futuro reconocimiento del r¨¦gimen talib¨¢n: que permita abandonar el pa¨ªs en libertad a quien lo desee y no tome represalias contra personas vinculadas a potencias extranjeras o del r¨¦gimen anterior; que evite convertirse ¡°en un refugio para el terrorismo¡±; un ¡°acceso sin restricciones¡± de la ayuda humanitaria; el respeto de los derechos humanos y las libertades fundamentales, especialmente de las mujeres y las ni?as, y de las minor¨ªas¡±, y el ¡°establecimiento de un Gobierno de transici¨®n inclusivo y representativo mediante negociaciones¡±.
Sanciones de la ONU
Tambi¨¦n reconoce que los talibanes buscar¨¢n ganar legitimidad exigiendo ser retirados de las listas de sanciones de la ONU, pero pide mantenerlas ¡°como parte de una estrategia m¨¢s amplia para influir en su comportamiento¡±, y marcando una l¨ªnea frente a China y Rusia, pa¨ªses poco proclives a apoyar nuevas sanciones. Adem¨¢s, es consciente de que tiene un buen arma de negociaci¨®n: la econom¨ªa.
Hasta la fecha, tres cuartas partes del presupuesto de un pa¨ªs diezmado por d¨¦cadas de guerra, el zarpazo de la covid y una severa sequ¨ªa ¡ªy con los activos del banco central congelados¡ª provienen de la ayuda extranjera. ¡°Queda claro que los talibanes quieren mantener a los actores humanitarios y la ayuda humanitaria en el pa¨ªs¡±. Por lo que podr¨¢ presionar para que esta se mantenga exigiendo el respeto al derecho internacional.
Bruselas tantea as¨ª sus opciones en relaci¨®n con el avispero de Afganist¨¢n. Y sigue elaborando una especie de ¡°br¨²jula estrat¨¦gica¡±, con el objetivo declarado de aumentar su autonom¨ªa frente a Estados Unidos. ¡°Europa debe poder hacer m¨¢s cosas que enviar aviones para repatriar a sus diplom¨¢ticos¡±, explica una alta fuente comunitaria. ¡°Para ello hay que activar de una vez una fuerza de acci¨®n r¨¢pida para la que bastar¨ªa con 5.000 efectivos, y que est¨¢ sobre la mesa desde hace m¨¢s de una d¨¦cada. El problema es que no hay tracci¨®n pol¨ªtica para eso, como no la hay para encarar con garant¨ªas la potencial crisis de refugiados, como han dejado claro los ministros del Interior esta semana. La UE tiene que lanzar mensajes alto y claro si quiere tener una voz audible. Y r¨¢pido¡±, concluye.
El documento circula en un momento extremadamente sensible en Europa, con los ministros de Defensa de la UE reunidos este mi¨¦rcoles en un Consejo informal en Eslovenia. La ca¨ªda de Afganist¨¢n figura en la agenda, igual que el eterno debate sobre la independencia estrat¨¦gica de la UE. Pero esta vez con varios mandatarios europeos pregunt¨¢ndose si los intereses de Bruselas y los de la OTAN se encuentran siempre alineados.
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