La Sala de lo Constitucional de Bukele aprueba la reelecci¨®n presidencial
A trav¨¦s de un fallo judicial de un ¨®rgano nombrado por ¨¦l, el presidente de El Salvador apunta a reelegirse en 2024 y reaviva los temores de sus cr¨ªticos
Unos meses despu¨¦s que el presidente Nayib Bukele comprometi¨® la independencia de la justicia en El Salvador a golpe de giros autoritarios, la Sala de lo Constitucional que ¨¦l instal¨® autoriz¨® la noche de este viernes su reelecci¨®n presidencial inmediata, cruzando una l¨ªnea que los cr¨ªticos del proyecto de Nuevas Ideas ¡ªel partido del mandatario¡ª hab¨ªan advertido con preocupaci¨®n. El Tribunal Supremo Electoral (TSE) salvadore?o anunci¨® este s¨¢bado que acatar¨¢ la orden de la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia de que se permita la inscripci¨®n para competir por una reelecci¨®n presidencial con la ¨²nica condici¨®n de que el presidente en funciones renuncie seis meses antes del mandato.
As¨ª, Bukele apunta a reelegirse en 2024 usando un fallo judicial para consolidar su proyecto pol¨ªtico, como hizo Daniel Ortega en Nicaragua en 2011. La diferencia es que el mandatario sandinista aleg¨® que la prohibici¨®n constitucional de la reelecci¨®n ¡°violaba sus derechos humanos¡± y la justicia de Bukele invoc¨® al pueblo para ¡°que decidan sin presiones o coacciones indebidas¡±.
Hasta ahora, y seg¨²n la Constituci¨®n del pa¨ªs, los presidentes de El Salvador, que tienen un mandato de cinco a?os, no pod¨ªan renovarlo para un periodo inmediato. Sin embargo, la Sala de lo Constitucional instalada en mayo pasado por Bukele arroll¨® el art¨ªculo 152 de la Carta Magna que se?ala que no puede ser candidato a presidente ¡°el que haya desempe?ado la Presidencia de la Rep¨²blica por m¨¢s de seis meses, consecutivos o no, durante el periodo inmediato anterior, o dentro de los ¨²ltimos seis meses anteriores del periodo presidencial¡±.
Aunque la reelecci¨®n presidencial era algo que se barajaba en El Salvador, tomando en cuenta los zarpazos de Bukele a la justicia destituyendo a trav¨¦s de la Asamblea Nacional a magistrados y recientemente a un tercio de los jueces y fiscales, lo sorpresivo es la celeridad con que el mandatario afianza su proyecto pol¨ªtico tildado como autoritario por sus detractores.
¡°La Sala de lo Constitucional de El Salvador ¡ªque Bukele coopt¨® en mayo de este a?o¡ªacaba de permitir que Bukele se presente a una reelecci¨®n. El mismo libreto que usaron Daniel Ortega y Juan Orlando Hern¨¢ndez, el presidente de Honduras. La democracia en El Salvador est¨¢ al borde del abismo¡±, expres¨® Jos¨¦ Miguel Vivanco, director de Human Rights Watch.
Vivanco expuso la dualidad del oficialismo trayendo a colaci¨®n un tuit del vicepresidente de El Salvador, F¨¦lix Ulloa, quien en 2020 asegur¨® ¡°jam¨¢s he propuesto ni estar¨ªa de acuerdo con la reelecci¨®n continua en nuestro pa¨ªs¡±. Ulloa es el designado por Bukele para reformar 196 de los 272 art¨ªculos de la actual Carta Magna.
Tras conocerse la autorizaci¨®n de su reelecci¨®n, hasta la publicaci¨®n de este art¨ªculo, Bukele ha mantenido silencio en su cuenta de Twitter. Sin embargo, algunos de sus funcionarios y diputados del partido oficialista Nuevas Ideas aplaudieron el fallo y alentaron su reelecci¨®n.
En el fallo del viernes, los magistrados ordenan al Tribunal Supremo Electoral (TSE) permitir ¡°que una persona que ejerza la Presidencia de la Rep¨²blica y no haya sido presidente en el periodo inmediato anterior participe en la contienda electoral por una segunda ocasi¨®n¡±.
De acuerdo con los jueces, dicha interpretaci¨®n de 2014 sobre la reelecci¨®n es ¡°err¨®nea¡± y apuntaron que, a su juicio, la Constituci¨®n permite que un ciudadano puede ser presidente por un m¨¢ximo de 10 a?os. El 1 de mayo pasado, la Asamblea Legislativa, de ampl¨ªa mayor¨ªa oficialista, ces¨® a los magistrados constitucionalistas y nombr¨® a cinco abogados para ocupar los cargos. La comunidad internacional critic¨® esta acci¨®n por considerar que era un golpe contra la separaci¨®n de poderes y la independencia judicial. Las alarmas se han materializado con la reelecci¨®n, una pr¨¢ctica que en Centroam¨¦rica tiene graves consecuencias.
Si bien no es precisamente el caso de la Corte de lo Constitucional, en El Salvador, en agosto pasado la Corte Interamericana de Derechos Humanos public¨® una opini¨®n consultiva dejando sentado que la no reelecci¨®n implica violaciones a los derechos humanos. Y, en general, de la reelecci¨®n establece: ¡°La interdependencia entre democracia, Estado de Derecho y protecci¨®n de los derechos humanos es la base de todo sistema (¡) Los principios de la democracia representativa incluyen, adem¨¢s de la periodicidad de las elecciones y el pluralismo pol¨ªtico, las obligaciones de evitar que una persona se perpet¨²e en el poder, y de garantizar la alternancia en el poder y la separaci¨®n de poderes¡±.
Bukele, de 40 a?os, goza de un elevado nivel de popularidad, lo que le permiti¨® alcanzar la presidencia en 2019 dando el tiro de gracia al bipartidismo representado por Frente Farabundo Mart¨ª para la Liberaci¨®n Nacional (FMLN) y Alianza Republicana Nacionalista (ARENA). Tal como lo han hecho otros que se han reelecto, como Ortega en Nicaragua, Bukele ha echado mano a su popularidad y la mayor¨ªa en el Parlamento para implosionar la democracia, comparan sus cr¨ªticos. La justicia ha sido el principal basti¨®n doblado por Bukele para garantizar su continuidad en el poder sin contrapesos.
¡°Asistimos a pasos agigantados al fin de la Rep¨²blica y su sustituci¨®n por un clan familiar antidemocr¨¢tico que utiliza el Estado en su beneficio. Pero para que consigan sus objetivos son necesarios funcionarios y bur¨®cratas indignos, oportunistas o corruptos que operen a su favor, y una ciudadan¨ªa cegada por la propaganda¡±, advirti¨® el peri¨®dico digital El Faro en un editorial, tras conocerse la decisi¨®n de jubilar autom¨¢ticamente a un tercio de los jueces y fiscales.
Suscr¨ªbase aqu¨ª a la newsletter de EL PA?S Am¨¦rica y reciba todas las claves informativas de la actualidad de la regi¨®n
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.