La socialdemocracia se afianza en su viejo basti¨®n del norte de Europa
Los pa¨ªses escandinavos volver¨¢n a estar gobernados por fuerzas de centro-izquierda por primera vez desde 2001 tras su victoria en Noruega
Pertenecer a la ¨¦lite era en teor¨ªa uno de los puntos d¨¦biles de Jonas Gahr Stoere para abrirse camino en el Partido Laborista noruego, tradicionalmente considerado voz pol¨ªtica de la clase trabajadora y art¨ªfice del Estado de bienestar. Hijo de un adinerado intermediario de transporte mar¨ªtimo y heredero de una fortuna calculada en 16 millones de euros, el exministro, de 61 a?os, lidera el partido desde 2014, pero fue incapaz de sacar del poder a los conservadores en su primer intento, en las elecciones de 2017. Esta semana lo logr¨®, a la segunda, y puso fin a ocho a?os en la oposici¨®n de la socialdemocracia noruega. Desde que form¨® un Gobierno por primera vez en 1928, este partido no hab¨ªa estado tanto tiempo alejado del poder.
Tras su victoria en los comicios parlamentarios del lunes pasado, todos los pa¨ªses escandinavos (Noruega, Suecia y Dinamarca) ser¨¢n gobernados por formaciones encabezadas por socialdem¨®cratas por primera vez desde 2001. En el conjunto de los n¨®rdicos, habr¨ªa que a?adir a Finlandia, tambi¨¦n liderada por el Partido Socialdem¨®crata. Esta consolidaci¨®n se produce despu¨¦s de dos d¨¦cadas en las que el panorama pol¨ªtico en los pa¨ªses m¨¢s al norte de Europa estuvo m¨¢s dominado por los conservadores e incluso hace pensar a sus dirigentes que pueda haber un cambio en Alemania el 26 de septiembre, donde el candidato del SPD, Olaf Scholz, encabeza los sondeos.
Axel Fjeldavli, experto de Agenda, un centro de pensamiento con sede en Oslo, considera que se trata de un mensaje claro de los votantes para impulsar un cambio de direcci¨®n. ¡°En el caso de Noruega, por ejemplo, se ha hablado mucho de reducir las desigualdades crecientes y que se est¨¢ debilitando el sistema de bienestar. La concentraci¨®n de la riqueza aqu¨ª est¨¢ hoy a niveles del Reino Unido¡±, explica en una entrevista. El lema de Stoere fue ¡°un giro hacia la gente corriente¡±, con subidas de impuestos para los ricos y planes para una transici¨®n de una econom¨ªa muy dependiente del petr¨®leo a otra verde, que reparta los costes del proceso de forma equitativa.
El temor a las crecientes desigualdades sociales, la necesidad de un Estado de bienestar fuerte acrecentada durante la pandemia y el giro de los socialdem¨®cratas al centro, con pol¨ªticas m¨¢s restrictivas sobre todo en migraci¨®n, han favorecido a estas formaciones aunque el panorama pol¨ªtico est¨¢ cada vez m¨¢s fragmentado, con m¨¢s partidos socios y rivales. ¡°La pandemia ha hecho que la gente sea m¨¢s consciente de los problemas del sistema sanitario, pero veremos cu¨¢nto dura esta preocupaci¨®n, porque las ganas de pagar m¨¢s impuestos para financiar el bienestar no han cambiado mucho en los ¨²ltimos a?os¡±, opina Therese Reitan, profesora de Ciencias Pol¨ªticas de la Universidad de S?dert?rn (Suecia).
La inestabilidad es una de las amenazas que se cierne sobre el avance de los socialdem¨®cratas en el norte de Europa. Porque los partidos de la actualidad distan mucho de ser las grandes m¨¢quinas electorales del pasado que gobernaban en solitario con amplias mayor¨ªas. En todos los casos tienen que lidiar con coaliciones, como en Finlandia con cinco partidos, o cuentan con apoyo externo de otras formaciones, como sucede en Dinamarca. En Noruega, donde el partido ha gobernado durante 50 de los 76 a?os que han pasado tras la II Guerra Mundial, se han iniciado contactos para una alianza entre el partido socialdem¨®crata, otro de izquierdas y el Partido de Centro, con base m¨¢s rural y ¡°el verdadero ganador de las elecciones¡±, seg¨²n Reitan. ¡°Ha sido el que m¨¢s ha subido en votos¡±, a?ade.
La experta puntualiza que, si bien hay m¨¢s Gobiernos liderados por socialdem¨®cratas, hay que matizar sobre c¨®mo se produce su vuelta al poder. En Suecia, en las elecciones de 2018 el partido logr¨® mantenerse en el poder pero tras registrar su peor resultado desde 1908. En Noruega, los laboristas fueron los m¨¢s votados, como ha sucedido siempre desde 1924, pero lograron solo el 26,4% de los votos, el peor porcentaje en m¨¢s de 90 a?os. Ser¨¢n los pactos poselectorales los que permitir¨¢n previsiblemente que Stoere se convierta en primer ministro.
Que su perfil de hombre rico y privilegiado no haya impedido que pueda liderar el Gobierno es una muestra de la apertura ideol¨®gica en la socialdemocracia n¨®rdica, como sucede en otros pa¨ªses de Europa, en un intento por captar votos. ¡°Su debilidad parlamentaria les ha forzado a negociar con partidos liberales que han impulsado pol¨ªticas m¨¢s liberales¡±, afirma la profesora Reitan, que pone como ejemplo las reglas migratorias m¨¢s restrictivas impulsadas sobre todo en Dinamarca, ante el auge de los partidos de derechas tras ¡°el gran flujo de llegada de inmigrantes en 2015 y 2016¡±. La deriva antimigraci¨®n del Gobierno dan¨¦s ha sido uno de los aspectos m¨¢s criticados, por considerarse medidas poco acordes con el esp¨ªritu de la socialdemocracia m¨¢s tradicional.
Axel Fjeldavli sostiene que, aunque haya habido cambios, en general hay una continuidad ideol¨®gica en estos partidos, que ¡°ponen el foco en las rentas del trabajo¡±. Subidas de impuestos s¨ª, pero al capital y a los m¨¢s ricos,y mayor protecci¨®n contra el desempleo. Sin embargo, el experto s¨ª que opina que ha habido un giro en lo relacionado con la lucha contra el cambio clim¨¢tico, con una aproximaci¨®n m¨¢s ambiciosa, y una visi¨®n ¡°m¨¢s realista del dumping social¡± (externalizar la producci¨®n en pa¨ªses en desarrollo por tener costes m¨¢s bajos) y ¡°otros aspectos negativos de la integraci¨®n europea¡±.
Sigue toda la informaci¨®n internacional en Facebook y Twitter, o en nuestra newsletter semanal.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.