Un incidente con la bandera ind¨ªgena agrava la polarizaci¨®n pol¨ªtica boliviana

Un nuevo conflicto ha estallado en Bolivia alrededor de la bandera ind¨ªgena o wiphala, que el pa¨ªs adopt¨® como su segunda ense?a nacional en 2009. El pasado 24 de septiembre, en el acto de conmemoraci¨®n del aniversario de Santa Cruz, una regi¨®n boliviana fuertemente opositora al Gobierno izquierdista de Luis Arce, dirigentes opositores arriaron la wiphala que poco antes hab¨ªa izado el vicepresidente David Choquehuanca, con el argumento de que es divisionista. Al mismo tiempo, el gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, no permiti¨® que Choquehuanca hablara en la ceremonia a nombre del Gobierno central. Estos hechos elevaron la polarizaci¨®n pol¨ªtica boliviana a su mayor nivel desde las elecciones de octubre de 2020.

El Gabinete de Arce ha abierto procesos penales contra los autores de los hechos, por considerarlos ¡°una nueva ofensa contra la wiphala¡±. En Bolivia, no mostrar adecuado respeto a los s¨ªmbolos patrios es un delito que se pena con dos a?os de c¨¢rcel. Por su parte, el dirigente c¨ªvico de Santa Cruz R¨®mulo Calvo ha pedido la renuncia de los dos ministros que hicieron esta acusaci¨®n judicial por su ¡°temeraria osad¨ªa de provocar al pueblo cruce?o¡±.

¡°La wiphala se respeta porque es el lenguaje, es la historia, es el resumen de toda la lucha de nuestros pueblos originarios y no se va a borrar con el capricho de un grupo de personas. Esa lucha, esa batalla de a?os hermanos no se borra con una intenci¨®n, con una paradita de gallo viejo¡±, dijo Luis Arce luego del incidente. Arce no particip¨® en el acto en el que no dejaron hablar a su vicepresidente porque estaba fuera del pa¨ªs. Del otro lado, Calvo declar¨® que la wiphala ¡°no representa a los cruce?os y a muchos bolivianos, por su uso pol¨ªtico que se le dio a este s¨ªmbolo empleado en avasallamientos, incendios, confrontaci¨®n y violencia¡±.

Camacho fue el principal dirigente de las protestas que culminaron con la ca¨ªda del presidente Evo Morales, en noviembre de 2019. Este movimiento se identific¨® con la bandera tradicional boliviana y, en varios momentos, atac¨® y destruy¨® wiphalas, consideradas emblemas del Movimiento al Socialismo (MAS) de Morales. Camacho sali¨® en defensa de la multicolor bandera ind¨ªgena para tratar de evitar que los sectores ind¨ªgenas del pa¨ªs chocaran con el nuevo Gobierno surgido del derrocamiento de Morales. Fue un gesto ef¨ªmero. El Gobierno interino de Jeanine A?ez apart¨® la wiphala del ceremonial oficial y despleg¨® un discurso de reivindicaci¨®n de la ¡°rep¨²blica de Bolivia¡±, que hab¨ªa sido sustituida por el Estado Plurinacional durante el periodo de Morales.

Desde su elecci¨®n como gobernador de la regi¨®n oriental de Santa Cruz, en marzo de este a?o, Camacho ha antagonizado intensamente con el Gobierno de Arce, que se asienta sobre todo en el occidente del pa¨ªs. Para ello ha impulsado la tradicional desconfianza de los habitantes de los llanos orientales respecto a los monta?eses (o ¡°collas¡±) que migran constantemente a su territorio ancestral. Ah¨ª est¨¢ el polo de mayor dinamismo econ¨®mico, basado en la industria de la soja y otros productos naturales. Esta migraci¨®n ha causado fuertes presiones sobre la tenencia tradicional de la tierra y sobre el medio ambiente. Camacho, la ¨¦lite cruce?a y grupos ind¨ªgenas del lugar est¨¢n pidiendo que la tierra solo se distribuya entre los oriundos de Santa Cruz y la preservaci¨®n de la cultura originaria frente a la ¡°invasi¨®n¡± de los migrantes de ascendencia aimara y quechua. Son estos pueblos ind¨ªgenas los que han definido la wiphala como suya y han logrado, durante el primer gobierno del MAS, que se convierta en la segunda bandera nacional.

A lo largo de los 14 a?os del Gobierno de Evo Morales, la relaci¨®n con los ind¨ªgenas de las regiones orientales bolivianas ha sido complicada y llena de desencuentros. El conflicto clave fue la discrepancia respecto a la construcci¨®n de una carretera a trav¨¦s de un parque nacional. Morales, interpretando la necesidad de los campesinos quechuas y aimaras, era firme partidario de la misma. Los dirigentes de los ind¨ªgenas guaran¨ªes y de otras culturas selv¨¢ticas se opusieron con no menor firmeza, a fin de impedir la llegada a trav¨¦s de la carretera de los migrantes occidentales. Como resultado, el proyecto se paraliz¨®, pero la relaci¨®n entre ambos sectores ind¨ªgenas qued¨® maltrecha. Actualmente, la mayor¨ªa de los ind¨ªgenas orientales se alinean con la oposici¨®n y los poderes regionales en contra del MAS. Su planteamiento es formar un ¡°parlamento¡± que d¨¦ expresi¨®n a sus demandas y rechazan la distribuci¨®n de tierras a las comunidades forasteras.

Suscr¨ªbase aqu¨ª a la newsletter de EL PA?S Am¨¦rica y reciba todas las claves informativas de la actualidad de la regi¨®n.